CIFRAS PREOCUPANTES
Junín, ciudad insegura: en 14 días hubo 40 robos y 53 delitos contra las personas
Esa fue la cantidad de ilícitos registrados en sede policial en dos semanas. La cifra coincide con la ola de asaltos a comercios a mano armada. Todos los días se sustrae una moto. Y cada 24 horas, hay al menos cuatro conflictos interpersonales.
El nivel de inseguridad y violencia que se vive en Junín desde hace meses no sólo se ve reflejado en la cruda realidad, sino que tal vez ahora, como nunca, las estadísticas dan números contundentes sobre el flagelo. A las estadísticas oficiales, publicadas por DEMOCRACIA el jueves pasado, sobre las Investigaciones Penales Preparatorias (IPP) iniciadas en la Región durante 2013, que indican que el delito creció 11,2% en un año (más del doble que el promedio provincial de 5,28%), se suma el relevamiento oficial de las autoridades sobre los ilícitos ocurridos en las últimas dos semanas, a las que este diario tuvo acceso.
Días atrás fueron noticia los robos a mano armada en un locutorio, en una farmacia, en un kiosco, en una casa de comisiones y en una zapatería. También los arrebatos azotan casi a diario a los transeúntes. Y los casos de violencia, como los sufridos por Jonathan Corredera, varios jóvenes que se pelearon tras fiestas en la noche, las chica que recibió una paliza a la salida de la escuela y el hombre apuñalado mientras estaba con sus amigos, salieron a la luz en este diario durante los últimos días.
Pero esos no fueron hechos aislados. Según documentación judicial a la que tuvo acceso DEMOCRACIA, el nivel de violencia y delincuencia es aún mayor del que trasciende públicamente. En los últimos días, más precisamente entre los últimos 10 y 24 de abril, hubo en Junín 40 hechos delictivos entre robos, hurtos y asaltos. La cifra da como resultado casi tres sustracciones de bienes por día, entre ellos dinero, celulares, calzado y vehículos.
En el caso de los vehículos, en dos semanas hubo 14 denuncias por sustracción, es decir, a razón de uno por día. Pero en trece de los catorce hechos se trató de hurtos y robos de motos, lo que muestra además, una tendencia sobre la preferencia de los delincuentes por los rodados, en una ciudad en donde hay cerca de 50 mil unidades. En la mayoría de los hechos, cabe destacar, se trató de hurtos en la vía pública. En otros de robos a mano armada.
Violencia
Hace meses que la ciudad parece estar atrapada en un remolino de violencia, del que cada vez parece más difícil salir. Jóvenes apuñalados, golpizas hasta en la salida de la escuela, violencia doméstica, intrafamiliar y de género, y peleas entre “amigos” que terminan con heridos de gravedad fueron noticia en los últimos días.
De esta manera, hubo en Junín 53 hechos de violencia, infracciones o delitos contra las personas en los que debieron intervenir las autoridades –sin contar aquellos que jamás salen a la luz–. Gran parte de ese porcentaje se lo llevan las violaciones a la ley 12569 o de Violencia Familiar, por hombres que tienen restricción para acercarse a un determinado domicilio o personas y no cumplieron con esa norma. O mujeres que denunciaron golpizas por parte de su pareja, o llamados de vecinos ante peleas intrafamiliares que terminaron a los golpes.
Ayer también fue noticia el caso de las adolescentes agredidas a la salida de la Escuela Secundaria 5, situada en Cabrera y Vuelta de Obligado, por otras chicas y que terminó con una de las víctimas, de 17 años, internada en grave estado en el Hospital Piñeyro (ver página 18).
Los jóvenes, protagonizan de forma cada vez más frecuente, peleas que terminan con graves secuelas para la víctima, o hasta la pérdida de la vida. Hace meses que DEMOCRACIA viene reflejando la gravedad del aumento de los casos y el nivel de violencia entre la franja de 15 a 30 años. Sobretodo la pérdida de la capacidad de resolución de conflictos de forma razonable, lo que conlleva a que los enfrentamientos físicos se den cada vez más seguido.
Falta de inclusión social
Sobre esto, en la edición de ayer, concejales opositores apuntaron a la falta de políticas de inclusión social en la ciudad para los jóvenes.
En cuanto al incremento de los delitos del fuero penal juvenil, el edil Juan Manuel Sequeira, recientemente separado junto a Santiago Aguiar del bloque del Frente para la Victoria, dijo que “hace tiempo” vienen “planteando la violencia con la cual se dirimen todos los problemas” y que en “esa resolución del conflicto no hemos podido abordar respuestas”, afirmó.
“Junín tiene una problemática con una secretaría que es la de Bienestar Social. Esa secretaría hace diez años que no tiene acción pública que haya podido llevar adelante”, dijo el edil.
“El gobierno anterior, que también era de matriz radical, tenía una fuerte intervención en los barrios con los trabajadores sociales”, recordó Sequeira.
Además dijo que hay problemas con jóvenes de 14 y 15 años que cometen robos a mano armada y muertes y que “este gobierno tiene 10 años en el poder. Si alguien que tiene 17 años mata, roba y no tiene ningún sentido la vida para ese joven, hace 10 años tenía 7. No hemos trabajado en esa instancia”, dijo.
“Es el poco valor a la vida y la pérdida de valores que nos lleva a esta sociedad a estar como estamos y se da a nivel macro y mundial”, dijo el concejal del PRO, Pablo Petrecca.
“A nivel local, el problema tiene que ver con no llevar adelante políticas sociales de inclusión”, dijo y afirmó que se debe “invertir mucho más presupuesto en seguridad”, ya que “en otros municipios hay un 8 por ciento de inversión y en Junín no llega al 3 por ciento. Y ese tres, un gran porcentaje se va en los sueldos”, aseguró.
“Poco valor por la vida”
Marcelo Sena, presidente del Observatorio de Seguridad Ciudadana de Junín y director de la Escuela de Ciencias Económicas y Jurídicas de la Unnoba, dijo que estos hechos se dan “en un contexto de violencia general, que está presente en todo el país”, en las que hasta “algunas disputas de tránsito terminan con víctimas”.
“Estamos en un espectro de violencia de la sociedad en el que por cualquier motivo se reacciona. Parece que la vida del prójimo no vale nada”, dijo Sena quien manifestó que ese contexto, “acompañado con el alcohol y la droga” termina agravándose.
Para Sena, desde la problemática de los sicarios en Rosario, las disputas por conflictos en el tránsito y las peleas de jóvenes en las noches, responden a “un contexto que nos indica que apenas nos importa poco la vida”.
El presidente del Observatorio de Seguridad Ciudadana abogó “porque se multipliquen los análisis” para poder detectar las causas que conducen a esta situación. “Es difícil hacer una mirada mas incisiva de los hechos que suceden como tal”, dijo Sena al argumentar que es importante contar con “un análisis concreto de la situación social y económica”.
El director de Asistencia a la Víctima de Delitos de Junín, Andrés Rosa, afirmó en otra publicación de este diario sobre el incremento de los conflictos violentos que “es verdad que en estos hechos de violencia callejera, muchos de ellos con participación de adolescentes como autores y víctimas hay un crecimiento, y no son hechos que podamos enmarcarlos como de inseguridad y tampoco que se puedan prevenir”, dijo el funcionario.
“Obviamente que esto preocupa, que parte de nuestros jóvenes diriman diferencias, la mayoría de ellas mínimas, y terminan costando una vida”, afirmó.
“Tenemos que trabajar mucho en el tema de la inclusión y del mejoramiento de las condiciones sociales. Entiendo que esto no es fácil ni sencillo, pero es el camino, que es largo pero que seguramente en la medida que avancemos en esa dirección, podremos tener otros números, otros índices por lo menos más tolerables”, dijo Rosa.
Días atrás fueron noticia los robos a mano armada en un locutorio, en una farmacia, en un kiosco, en una casa de comisiones y en una zapatería. También los arrebatos azotan casi a diario a los transeúntes. Y los casos de violencia, como los sufridos por Jonathan Corredera, varios jóvenes que se pelearon tras fiestas en la noche, las chica que recibió una paliza a la salida de la escuela y el hombre apuñalado mientras estaba con sus amigos, salieron a la luz en este diario durante los últimos días.
Pero esos no fueron hechos aislados. Según documentación judicial a la que tuvo acceso DEMOCRACIA, el nivel de violencia y delincuencia es aún mayor del que trasciende públicamente. En los últimos días, más precisamente entre los últimos 10 y 24 de abril, hubo en Junín 40 hechos delictivos entre robos, hurtos y asaltos. La cifra da como resultado casi tres sustracciones de bienes por día, entre ellos dinero, celulares, calzado y vehículos.
En el caso de los vehículos, en dos semanas hubo 14 denuncias por sustracción, es decir, a razón de uno por día. Pero en trece de los catorce hechos se trató de hurtos y robos de motos, lo que muestra además, una tendencia sobre la preferencia de los delincuentes por los rodados, en una ciudad en donde hay cerca de 50 mil unidades. En la mayoría de los hechos, cabe destacar, se trató de hurtos en la vía pública. En otros de robos a mano armada.
Violencia
Hace meses que la ciudad parece estar atrapada en un remolino de violencia, del que cada vez parece más difícil salir. Jóvenes apuñalados, golpizas hasta en la salida de la escuela, violencia doméstica, intrafamiliar y de género, y peleas entre “amigos” que terminan con heridos de gravedad fueron noticia en los últimos días.
De esta manera, hubo en Junín 53 hechos de violencia, infracciones o delitos contra las personas en los que debieron intervenir las autoridades –sin contar aquellos que jamás salen a la luz–. Gran parte de ese porcentaje se lo llevan las violaciones a la ley 12569 o de Violencia Familiar, por hombres que tienen restricción para acercarse a un determinado domicilio o personas y no cumplieron con esa norma. O mujeres que denunciaron golpizas por parte de su pareja, o llamados de vecinos ante peleas intrafamiliares que terminaron a los golpes.
Ayer también fue noticia el caso de las adolescentes agredidas a la salida de la Escuela Secundaria 5, situada en Cabrera y Vuelta de Obligado, por otras chicas y que terminó con una de las víctimas, de 17 años, internada en grave estado en el Hospital Piñeyro (ver página 18).
Los jóvenes, protagonizan de forma cada vez más frecuente, peleas que terminan con graves secuelas para la víctima, o hasta la pérdida de la vida. Hace meses que DEMOCRACIA viene reflejando la gravedad del aumento de los casos y el nivel de violencia entre la franja de 15 a 30 años. Sobretodo la pérdida de la capacidad de resolución de conflictos de forma razonable, lo que conlleva a que los enfrentamientos físicos se den cada vez más seguido.
Falta de inclusión social
Sobre esto, en la edición de ayer, concejales opositores apuntaron a la falta de políticas de inclusión social en la ciudad para los jóvenes.
En cuanto al incremento de los delitos del fuero penal juvenil, el edil Juan Manuel Sequeira, recientemente separado junto a Santiago Aguiar del bloque del Frente para la Victoria, dijo que “hace tiempo” vienen “planteando la violencia con la cual se dirimen todos los problemas” y que en “esa resolución del conflicto no hemos podido abordar respuestas”, afirmó.
“Junín tiene una problemática con una secretaría que es la de Bienestar Social. Esa secretaría hace diez años que no tiene acción pública que haya podido llevar adelante”, dijo el edil.
“El gobierno anterior, que también era de matriz radical, tenía una fuerte intervención en los barrios con los trabajadores sociales”, recordó Sequeira.
Además dijo que hay problemas con jóvenes de 14 y 15 años que cometen robos a mano armada y muertes y que “este gobierno tiene 10 años en el poder. Si alguien que tiene 17 años mata, roba y no tiene ningún sentido la vida para ese joven, hace 10 años tenía 7. No hemos trabajado en esa instancia”, dijo.
“Es el poco valor a la vida y la pérdida de valores que nos lleva a esta sociedad a estar como estamos y se da a nivel macro y mundial”, dijo el concejal del PRO, Pablo Petrecca.
“A nivel local, el problema tiene que ver con no llevar adelante políticas sociales de inclusión”, dijo y afirmó que se debe “invertir mucho más presupuesto en seguridad”, ya que “en otros municipios hay un 8 por ciento de inversión y en Junín no llega al 3 por ciento. Y ese tres, un gran porcentaje se va en los sueldos”, aseguró.
“Poco valor por la vida”
Marcelo Sena, presidente del Observatorio de Seguridad Ciudadana de Junín y director de la Escuela de Ciencias Económicas y Jurídicas de la Unnoba, dijo que estos hechos se dan “en un contexto de violencia general, que está presente en todo el país”, en las que hasta “algunas disputas de tránsito terminan con víctimas”.
“Estamos en un espectro de violencia de la sociedad en el que por cualquier motivo se reacciona. Parece que la vida del prójimo no vale nada”, dijo Sena quien manifestó que ese contexto, “acompañado con el alcohol y la droga” termina agravándose.
Para Sena, desde la problemática de los sicarios en Rosario, las disputas por conflictos en el tránsito y las peleas de jóvenes en las noches, responden a “un contexto que nos indica que apenas nos importa poco la vida”.
El presidente del Observatorio de Seguridad Ciudadana abogó “porque se multipliquen los análisis” para poder detectar las causas que conducen a esta situación. “Es difícil hacer una mirada mas incisiva de los hechos que suceden como tal”, dijo Sena al argumentar que es importante contar con “un análisis concreto de la situación social y económica”.
El director de Asistencia a la Víctima de Delitos de Junín, Andrés Rosa, afirmó en otra publicación de este diario sobre el incremento de los conflictos violentos que “es verdad que en estos hechos de violencia callejera, muchos de ellos con participación de adolescentes como autores y víctimas hay un crecimiento, y no son hechos que podamos enmarcarlos como de inseguridad y tampoco que se puedan prevenir”, dijo el funcionario.
“Obviamente que esto preocupa, que parte de nuestros jóvenes diriman diferencias, la mayoría de ellas mínimas, y terminan costando una vida”, afirmó.
“Tenemos que trabajar mucho en el tema de la inclusión y del mejoramiento de las condiciones sociales. Entiendo que esto no es fácil ni sencillo, pero es el camino, que es largo pero que seguramente en la medida que avancemos en esa dirección, podremos tener otros números, otros índices por lo menos más tolerables”, dijo Rosa.