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INSEGURIDAD VIAL

Giros a la izquierda peligrosos en varias avenidas de doble mano de la Ciudad

En varias arterias de Junín muchos automovilistas y motociclistas doblan cruzándose de carril y ante la falta de señalización y una ley de tránsito que en este punto es poco clara, los accidentes y situaciones de riesgo ocurren a diario.

En muchas avenidas de nuestra ciudad, los giros a la izquierda son una constante, y con pocos semáforos, escasa señalización y conductores arriesgados, las situaciones de riesgo se multiplican a diario en arterias como Benito de Miguel,  Ramón Hernández, Intendente de la Sota, Libertad y Arias.
La Ley Nacional de Tránsito no es clara y establece que “en vías de doble mano no se debe girar a la izquierda salvo señal que lo permita”, aunque este punto es parte del artículo titulado “vías semaforizadas”.
Por lo que la permisividad o no de poder doblar a la izquierda en las arterias que no tengan semáforo, queda sujeta a un cartel que señalice. Y al no contar con esta señalización en muchas de las esquinas que no están administradas por un semáforo queda un gris o vacío legal sobre la posibilidad de realizar o no esta maniobra, ya que en muchos casos, por el flujo de vehículos es necesaria una señal de luces o prohibición.
Cuando en gran parte del mundo por lo general se prohíbe girar a la izquierda en avenidas de doble mano, en la Argentina, como se menciono más arriba la norma se presta a la confusión.
Donde más se observan estas maniobras es en las avenidas Benito de Miguel,  Ramón Hernández, Intendente de la Sota, Libertad y Arias. También ocurren sobre la avenida San Martín, aunque aquí el Bulevard aporta un poco más de resguardo y legitimidad a la acción.
Los problemas en torno a los giros a la izquierda, en primer lugar se dan para el tránsito que viene atrás del vehículo que se dispone a doblar. Es que el carril izquierdo –aunque muchos no lo respeten– es la vía rápida en toda avenida y cuando un auto o una moto frena para realizar la maniobra, obliga a quienes vienen en velocidad a frenar. Esto, además de entorpecer el tránsito, genera el riesgo de choques de atrás.
En segundo lugar, el riesgo se da en el momento del cruce con quienes vienen por el carril contrario. En este sentido, los choques frontales y laterales producidos en los giros, son de los más graves que se registran en el tránsito urbano. Para evitarlos, se suelen emplazar rotondas o semáforos. Democracia, días atrás, informó sobre la compleja situación en torno a estos cruces.
Otro riesgo que se produce a partir del giro a la izquierda, es el encuentro con los autos que circulan por la vía a la que el primer vehículo se va a incorporar, dado que al hacerlo con celeridad entre el hueco que se genera en el carril a contramano y la presión que ejerce quienes vienen detrás, muchos conductores suelen no advertir que otros autos están circulando por la vía a la que se pretende doblar.
Y por último, como siempre, quienes más expuestos quedan a estas maniobras son los peatones. Cuando un vehículo dobla en velocidad, se observa generalmente que los conductores no respetan la prioridad del peatón en todas las esquinas de calles, siempre que no haya semáforos.

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