La confianza en la resolución del brutal crimen de Sandra Viviana Colo (43), ocurrido el jueves de la semana pasada en un pelotero de la calle Alem 388 de nuestra ciudad, divide la opinión de la sociedad juninense.
En efecto, el 52.03% de los votantes en la encuesta de esta semana en el sitio de Internet de DEMOCRACIA consideró que el homicidio “no” se va a esclarecer y que, por ende, los (o el) culpable del hecho de sangre no van a terminar tras las rejas.
En la vereda de enfrente, el 47.97% de los participantes respondieron que “sí” confían en la resolución del caso.
El escenario, de virtual paridad, refleja en parte el malestar de la sociedad con la Justicia o, mejor dicho, con la parte de la instrucción (investigación), que recae en los fiscales.
Si bien se sabe que los tiempos de la Justicia son lentos, el descontento social en nuestra ciudad tiene que ver con que se cuenta con un extenso derrotero de crímenes impunes, además de que existe un elevado índice de reincidencia en el delito, el cual hace que mucha gente piense, y con justa razón, que “los delincuentes entran por una puerta y salen por la otra”.
En este sentido, como publicó este diario, en lo que va del año ya fueron asesinadas en nuestra ciudad siete personas, una cifra alarmante, que arroja un promedio de casi un crimen por mes. Si bien en algunos de estos casos hay personas aprehendidas e imputadas, en ningún caso existe condena.
El caso
El cuerpo de Sandra Colo fue hallado por su propio padre a las 13.30 del jueves de la semana pasada, cuando la fue a buscar al pelotero en el que trabajaba y del que era encargada.
Es que Colo no había ido a la casa en la que vivía con sus padres a almorzar, por lo que comenzaron a llamarla por teléfono y nunca respondió.
Ante esta situación, el padre fue hasta el domicilio del dueño del pelotero, le pidió la llave del local y se dirigió hacia el mismo, donde descubrió el cuerpo de Sandra.
La autopsia determinó que la mujer fue asesinada entre las 10 y las 12 de ese jueves por “asfixia mecánica por estrangulación a lazo”, pero “además se acreditó la existencia de politraumas faciales y estallido hepático por aplastamiento”.
Pista sentimental
La principal hipótesis de los investigadores policiales apunta a que Colo fue asesinada en el marco de un hecho vinculado a una relación sentimental y, en ese sentido, algunas amigas que realizaron meses atrás viajes con la víctima aportaron detalles sobre su vida privada y su presunta relación con un hombre.
De esta manera, los investigadores prácticamente descartaron el robo como móvil del crimen, aunque hayan desaparecido del local unos 650 pesos que había en dos billeteras y el teléfono celular de la víctima.
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