Junín: casos que movilizaron la solidaridad

Como pocas veces, la demanda de ayuda procedente de familias afectadas por situaciones complejas de salud surgió casi en simultáneo en los últimos meses, situación que puso a prueba el espíritu solidario de los juninenses.  
La respuesta de los ciudadanos a las respectivas campañas estuvo a la altura de las circunstancias y, en mayor o menor medida, los protagonistas de cada historia lograron avanzar en la ejecución de sus respectivos tratamientos.
Uno de los casos que  movilizaron a la comunidad es el de Bernardo Bugnicourt, el nene que necesita un trasplante de médula ósea para superar definitivamente la batalla contra la anemia de Fanconi, una enfermedad que lo viene atormentando desde que nació.
Si bien su caso se hizo público el año pasado, desde febrero de 2012 se tornaron más intensas las convocatorias a donantes de sangre para proveer de glóbulos rojos al organismo del menor, quien se encuentra internado en el Hospital Garrahan de Buenos Aires. En total, más de 300 personas acudieron a ese llamado.
Una información conocida ayer indica que en los próximos días se llevará a cabo un nuevo procedimiento de recolección de flujos sanguíneos, dado que la intervención quirúrgica a “Berni” es inminente.
Otra que debió sortear una cruzada complicada fue Dolores Zunino, la niña de 4 años que pelea contra una encefalopatía crónica desde que llegó al mundo.  En marzo, tras largos meses juntando fondos aportados por particulares e instituciones de la ciudad,  viajó junto a sus padres a China para someterse a una serie de implantes de células madre. En abril volvió con una clara mejoría en sus movimientos corporales y ahora continúa el tratamiento en su hogar.
Por otro lado, hace menos de un mes, distintas bandas y solistas de Junín tocaron con el fin de ayudar a Lautaro, un pequeño de 10 años.
El festival de música se realizó en el Club Moreno y reunió a cientos de personas.
Lautaro sufre de una enfermedad llamada leucodistrofia metacromática y necesita urgente un trasplante de médula ósea específico.
Por ser una de las denominadas “enfermedades raras”, los centros especializados son muy pocos en el mundo, y sólo uno de ellos aceptó realizar el tratamiento: el Duke Children, un Hospital de Carolina del Norte. En total, se necesita juntar 1.095.000 dólares para depositar antes de viajar.
Su historia, como las de “Berni” y “Loli” cautivaron la vocación solidaria de los juninenses.