Preocupación por el brote de sarampión y un aumento de casos de hepatitis A

Al brote de sarampión, que según el último Boletín Epidemiológico para la provincia de Buenos Aires reportó 13 casos, con 7 en CABA y 6 en todo el territorio bonaerense: 4 en Florencio Varela, 1 en Quilmes y 1 en Moreno, se suma hoy la preocupación por el aumento de los casos de Hepatitis A. Si bien estos últimos se dan en todo el país, las autoridades de salud llaman a controlar los propios esquemas de vacunación para que la mayor cantidad de la población se encuentre inmunizada.

Democracia consultó al médico infectólogo, Mario Cuitiño, quien destacó que el brote de sarampión en curso tiene que ver con un aumento de casos a nivel mundial y una gran cantidad de población sin vacunación.

Brote de sarampión

Como se dijo, según el último informe epidemiológico de la provincia de Buenos Aires, que se extiende del 9/03/2025 al 15/03/202, ya son 13 los casos vinculados al brote de sarampión.

Nicolás Kreplak, ministro de la Provincia resaltó que “la situación del sarampión se agrava y es cada vez más importante y fundamental que la campaña nacional de vacunación comience ya”. 

Lo cierto es que los equipos técnicos del Ministerio de Salud bonaerense, junto al de CABA y Nación, trabajan de forma articulada para realizar la tarea de control de foco y seguimiento de contactos. 

“El sarampión es una enfermedad que por suerte está eliminada de la Argentina. Hace muchos años que no hay casos autóctonos. Eliminada significa que no es un virus que circule permanentemente, como el del dengue o la gripe, que los tenemos todos los años. El sarampión no”, aclaró Cuitiño.

No obstante, respecto del brote en cuestión, explicó que “como es un virus que sigue circulando en otros países del mundo, existe siempre el permanente riesgo de importación. Es decir, un viajero que llega con la enfermedad a la Argentina, puede generar un brote dentro del país. Ya hemos tenido en otros años brotes que se limitaron, pero como a nivel mundial se está viendo en los últimos años un aumento de casos, y hay países que tienen sarampión permanentemente, eso hace que el riesgo de importación sea cada vez mayor”.

Ese sin dudas es uno de los riesgos, la posibilidad cada vez mayor de importar casos, pero a su vez, hay una cuestión clave que va de la mano con ello y es la falta de vacunación en los últimos años.

“Hay una caída en las coberturas de los planes de vacunación”, señaló Cuitiño sobre lo que resulta una preocupación para poder hacer frente a cualquier brote. 

“El sarampión es una enfermedad que se llama inmunoprevenible. Es decir que tenemos una vacuna que previene la enfermedad, pero en estos últimos años se ha visto un declinamiento, una baja en las coberturas de vacunación y entonces eso genera que haya más población susceptible en nuestro país”, detalló.

Así, la suma de ambas cuestiones eleva los riesgos: “Si combinamos aumento de casos en el mundo y personas cada vez más susceptibles en Argentina, es como la situación ideal para que aparezca un brote” y agregó que “es un virus altamente contagioso. Una persona enferma se estima que puede contagiar hasta 15 personas más, y a su vez esas 15 personas siguen contagiando”.

“Mirar las libretas de vacunas”

En Argentina la vacuna antisarampionosa está disponible en forma gratuita para todos los niños y niñas que cumplan un año de edad y luego al momento del ingreso escolar. “Es decir que todos los niños y niñas de Argentina deberían tener dos dosis de la vacuna triple viral. Ese es el mensaje a la población. Si no cumplen con esas dos dosis, tienen que acercarse a cualquier vacunatorio. No tiene costo alguno”, insistió el profesional y recordó que las dosis también protegen contra rubeola y paperas.

“Cualquier niño o niña o adulto incluso que no tenga las dos dosis de vacuna debe aplicárselas. Es gratis, nadie tiene que pagar nada”, remarcó.

El médico llamó a “mirar las libretas de vacunas”, y controlar la aplicación de las mismas. 

Vale aclarar que por ser vacunas de virus vivo, no se pueden vacunar las embarazadas, opersonas que tengan alguna enfermedad crónica que genere inmunocompromiso, es decir personas que padecen leucemia, cáncer, con quimioterapia o trasplantados.

Cuitiño destacó que “la enfermedad es muy contagiosa y hasta puede ser grave y mortal”.

Cabe remarcar que se contagia por vía aérea, es decir, “por las gotitas de saliva cuando uno habla, estornuda o tose”. 

Además, “la enfermedad se manifiesta como una especie de gripe. Empieza con fiebre, muy alta, moco, tos, da como una conjuntivitis y después, a los pocos días, la persona se brota toda. El característico brote del sarampión. Y si bien muchos pacientes se curan y no pasa nada, algunos pueden hacer complicaciones graves, neurológicas, respiratorias muy complicadas”. 

Suba de casos de Hepatitis A

Durante los últimos días, la Federación Bioquímica de la Provincia de Buenos Aires alertó sobre el incremento de casos de Hepatitis A en territorio nacional en personas menores de 20 años y una mayor afectación en varones de 20 a 39 años. 

La advertencia, se enmarcó en la comunicación epidemiológica del Ministerio de Salud de la Nación, que en febrero pasado pidió reforzar medidas de prevención.

Durante el quinquenio 2019- 2023, se estableció un promedio de 31 casos anuales pero, en 2024, el número trepó a 69 casos. 

“Desde el inicio de 2025, la cantidad de casos confirmados notificados ha sido superior a los valores esperados”, detalló el informe de Salud. 

Asimismo, en lo que va del año, se notificaron 24 casos de hepatitis A en el Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud (SNVS 2.0), de los cuales, “5 corresponden al grupo etario menores de 20 años, 5 corresponden al de 20 a 39 años y los 2 restantes a mayores de 40 años”, manifestó el informe. 

“La distribución por sexo, al igual que años anteriores, presenta una mayor afectación masculina (7)”, agregó.

Cuitiño advirtió que “también es una enfermedad muy poco frecuente en Argentina, desde que se dispuso la vacunación hace ya varios años. Dicha vacuna de “Hepatitis A” también está en el calendario nacional de vacunaciones, con una dosis única al año de vida”.

Si bien la cantidad de casos ha bajado en los últimos años, se ha visto este año un aumento de casos mayor a lo habitual. Los casos de “Hepatitis A” están bastante más difundidos por Argentina, en varias provincias como Salta, Mendoza, además de la Provincia de Buenos Aires.

“Habría que revisar los calendarios de todos los niños y ver si no la tienen, entonces la pueden recibir. Es también una vacuna gratuita. Esa es la recomendación para la población. Ver si sus hijos o hijas recibieron al año una dosis de la vacuna de Hepatitis A”, indicó Cuitiño. 

Cabe recordar que la hepatitis A es una enfermedad de transmisión ‘fecal oral’, es decir a través de agua y alimentos contaminados. 

“Se da al consumir agua que no sea potable, que puede estar contaminada o alimentos contaminados con el virus de la Hepatitis A”. 

La recomendación, según Cuitiño es, “primero, ver que todos tengamos la vacuna. Y también tomar agua que sea potable, de red potable o agua mineral, envasada, más que nada en los lugares donde ha habido casos. Y en lo que es alimentos, hay que ser prudente con lo que sean alimentos crudos; hay que lavarlos bien, ya sean frutas, verduras. Y evitar comer carne cruda, tratar de que siempre esté bien cocida”. 

La vacuna de la Hepatitis A, indicó el médico, “es de virus muerto, o sea que no tiene ningún tipo de contraindicación y la puede recibir absolutamente cualquier persona”.

En el caso de los adultos son dos dosis.