Comenzaron las actividades en el Hospital Interzonal General de Agudos "Dr. Abraham Félix Piñeyro" de Junín para celebrar la Semana de la Prematurez. Se trata de una iniciativa que es promovida por el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos y que se desarrollará en todos los hospitales bonaerenses desde hoy hasta el 17 de noviembre.
En la jornada inaugural se concretó la charla “Pequeñas acciones con un gran impacto” y también se desplegaron actividades de prevención y promoción de los servicios involucrados en el acompañamiento de los bebes nacidos prematuros y sus familias.
En este primer día de actividades estuvo presente la directora ejecutiva de Región Sanitaria III, Lucrecia López; el director ejecutivo del HIGA Junín, Fernando Crocco; los directores asociados Cristina Tejo, Mario Scévola y Cristina Cerulli; la jefa del Servicio de Neonatología, Patricia Salas; y personal del equipo interdisciplinario que trabaja con los pacientes prematuros.
En el marco de este inicio, la Dra. Salas expresó: “Estamos comenzando la semana de la prematurez, se trata de una celebración que se realiza todos los años y donde el objetivo es difundir los derechos de los prematuros”. Y añadió: “El lema de este año es el acompañamiento de la familia al prematuro en la transición desde la sala de neonatología al hogar. Es decir, remarcar cómo se viene preparando la familia para estar, con mucha confianza, en los cuidados del bebé cuando llega al hogar”.
Salas completó: “Asique en lo que respecta a esta semana hemos preparado una serie de actividades en donde participan las familias y los profesionales de la salud de distintas áreas de nuestro hospital. Todos, trabajamos en base al lema de cada año y también con el desafío constante de evitar el parto prematuro”.
Es importante destacar que en el HIGA Junín la atención a los pacientes prematuros se realiza mediante un abordaje interdisciplinario, del cual intervienen profesiones de distintos servicios y áreas, como Neonatología, Trabajo Social, Comité de Lactancia, Obstetricia, Oftalmología y Audiología, entre otros.
Las actividades por la Semana de la Prematurez continuarán hoy, a las 10 horas, con la charla “Preparación para el egreso, cuidados del recién nacido”; y mañana, a las 9.30 se brindará un “Taller de RCP Básico para la comunidad”.
Para completar, el jueves 14, a las 10, se ofrecerá la charla “Controles Oftalmológicos” y el viernes 15, a las 11:30, se concretará el tradicional cierre con la realización de un mural en la residencia de madres.
Cuidados de un prematuro
Para muchas familias, recibir el alta de un bebé prematuro es como cumplir un sueño largamente esperado. Tras semanas de cuidados en la Unidad de Terapia Intensiva Neonatal, el regreso a casa trae consigo una mezcla de felicidad y temor.
Los bebés prematuros requieren cuidados médicos especiales desde el momento de su nacimiento, con un equipo multidisciplinario que monitorea su salud y evolución en las primeras semanas de vida. Pero este paso no se traduce en el final de los cuidados médicos. Al contrario, es el inicio de un seguimiento cercano y multidisciplinario. Es por eso que en esta etapa, los especialistas recomiendan reducir las visitas para ayudar a que la familia recupere su intimidad y el bebé pueda adaptarse con calma a su nuevo entorno.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) clasifica a los bebés prematuros en tres categorías según su edad gestacional: moderados a tardíos, nacidos entre las 32 y 36 semanas de gestación; muy prematuros, nacidos entre las 28 y 32 semanas; y prematuros extremos, nacidos antes de las 28 semanas. Los programas de vigilancia incluyen a todos los bebés con un peso inferior a los 1.800 gramos, quienes requieren un seguimiento especial tras el alta neonatal para monitorear su crecimiento, desarrollo y salud.
La alimentación es un aspecto fundamental en el cuidado de los bebés prematuros, quienes necesitan alcanzar un peso adecuado y tolerancia a la alimentación antes de poder recibir el alta hospitalaria.
Llegar al momento del alta, el bebé debe cumplir ciertos criterios médicos que aseguren que puede adaptarse a un entorno diferente y que su salud se mantendrá estable sin la vigilancia constante de los profesionales. Al mismo tiempo, la familia necesita estar bien capacitada para observar cualquier señal de alarma y llevar a cabo los cuidados esenciales. El equipo de salud supervisa todos estos aspectos, desde la evolución médica del bebé hasta la preparación de los padres, quienes participan activamente en los cuidados básicos.
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