En la arquitectura el término "elefante blanco" se utiliza con frecuencia para menospreciar ciertos proyectos y si es merecedor de tal infamia suele ser una cuestión de perspectiva.
En varios cafés y en el propio recinto del Concejo Deliberante de Junín –donde también se lo catalogó como “monumento a la desidia”- se ha sabido utilizar tal término para hacer referencia a la nueva Terminal de Ómnibus que se sitúa en Ruta 7 y Circunvalación.
Aunque ese rótulo resulta al menos excesivo, los días pasan y el moderno proyecto no llega a cumplir la función por la cual fue construido. Más allá de eso, hubo avances considerables que permiten conjeturar sobre que su apertura es inminente.
Inclusive, desde el propio Gobierno municipal admitieron que la idea es que los andenes de la terminal comiencen a recibir micros y pasajeros a finales de año. Sobre esto, fuentes cercanas a la administración local le confirmaron a Democracia que, de no abrirse en diciembre, la inauguración terminará ocurriendo en enero del año próximo.
La planta funcional está prácticamente terminada, sólo restan detalles. Pero la dificultad para definir la administración del lugar es lo que demora la apertura, mientras que desde el Municipio se subrayan los altos costos que requerirá su operación.
Terciarizar o no
El pensamiento principal del Gobierno es terciarizar el 100% de los servicios, algo que resulta difícil.Por eso, en segundo lugar, aparece la terciarización solo de algunos de ellos como la limpieza, el mantenimiento y la atención. Y la tercera y menos factible, es que la administración pública municipal se haga cargo de todo, pero los costos fijos son elevados.
Aunque es sabido que los funcionarios se encuentran “escuchando propuestas del sector privado” y nunca quedó descartada la idea administración del Estado municipal. Pero lo que tomaría cada vez más fuerza es la idea de una “administración mixta”. Es decir, que en parte se hará cargo la municipalidad y en otra el ámbito privado.
Esa administración –según lo detallado por funcionarios y concejales- está estimada en unos 50 o 60 millones de pesos mensuales. Lo que si estaría claro es que los fondos municipales no llegarían con la creación de una nueva Tasa. Y como tampoco abundarían los interesados, todo indicaría que lo “mixto” terminará siendo la solución. Inclusive, puertas hacia adentro de las oficinas municipales lo dan como prácticamente un hecho.
La clave será el equilibrio para que pueda financiarse abaratando costos a través de algunos ingresos de recursos que pueden llegar de los locales comerciales y gastronómicos. La etapa de escuchar propuestas está llegando a su fin y comienza la de evaluación, la cual será relativamente breve porque el tiempo corre y diciembre/enero están cada vez más cerca.
Transporte público
El municipio confirmó que ampliará el servicio de colectivos para llegar a la nueva Terminal de ómnibus, una vez que comience a funcionar. El refugio estará colocado frente al ingreso al Complejo Deportivo Municipal, en una de las islas.
El recorrido de este nuevo ramal seguramente será el mismo que hoy tiene la línea verde, que conecta la clínica La Pequeña Familia con el barrio Villa del Parque, pero sumará un nuevo punto de inicio o finalización, que sería la propia terminal.
Una deuda social
La obra de la nueva terminal de ómnibus de Junín lleva más de diez años desde su inicio y atravesó dificultades tanto políticas como económicas y burocráticas. El proyecto se aprobó en el Concejo Deliberante, en 2012, durante la intendencia de Mario Meoni y se empezó a ejecutar en 2013.
El plazo inicial de la obra era de 18 meses, pero aún no se concluyó. Tras varios contratiempos, denuncias por el impacto medioambiental y cruces políticos, finalmente la mega obra demoró durante largos años.
Con dimensiones e infraestructura únicas en la Región y un formato similar al de los aeropuertos, con múltiples puertas y accesos que dan a las diferentes zonas de dársenas, confortables bancos y butacas, cafetería, boleterías, baños, la nueva estación le aporta otro paisaje a la ciudad.
En el interior habrá lugar para la gastronomía, kiosco y el sector para las encomiendas y las distintas empresas de transporte interurbano.
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