Paso bajo nivel: vecinos y comerciantes preparan un amparo para ser presentado ante la Justicia

Un grupo de vecinos, comerciantes y entidades están concluyendo la presentación de un recurso de amparo ante el Juzgado Federal de Junín, según pudo confirmar Democracia en diálogo con varios de ellos. La acción judicial se basa en que los juninenses referidos se sienten seriamente perjudicados por el corte en avenida Rivadavia que lleva más de un año cerrada a causa de la obra del paso bajo nivel, que está parada desde fin de diciembre del año pasado.

Al respecto, el grupo de vecinos contactó a un abogado para que realice el reclamo correspondiente ante la Justicia y, en pocos días, se daría ingreso a la presentación ante el fuero federal. Es que los vecinos entienden que la situación no permite perder más tiempo, ya que se ven "directamente perjudicados", económica y emocionalmente, por los problemas que genera el corte en una de las arterias principales de la ciudad, la cual quedó dividida en dos.

La acción de amparo es un proceso considerado como "urgente" que busca la protección de derechos fundamentales, con plazos más breves que uno tradicional, ya que procura un auxilio judicial rápido ante situaciones de gravedad.

Por la competencia en razón de materia sobre los terrenos ferroviarios pertenece al Gobierno Nacional, la acción deberá ser entablada ante el Juzgado Federal de Junín.

Reuniones

En paralelo, esta semana el intendente Pablo Petrecca, se reunió con el jefe de Gabinete Guillermo Francos, luego que declarara que no había fecha para reactivar la obra y revelar el costo de la misma. El objetivo del funcionario municipal fue el de encontrar una respuesta definitiva por la obra paralizada del paso bajo nivel de Rivadavia.

Funcionarios del Gobierno municipal le dijeron a Democracia que "no existió una negativa" al respecto, lo cual genera ilusión de que la obra se reactive. Pero como dijo Francos, no hay una fecha establecida para su inicio.

Ante esta situación, la gestión de Petrecca analizaría alternativas. Inclusive, puertas hacia adentro, se habría abordado la posibilidad de abrir el corte, pero surgen dos problemáticas como mínimo. La primera es que eso también requiere de una obra costosa y, además, sería una señal hacia el Gobierno nacional de que se desiste de la obra. Cuando en realidad, desde el Departamento Ejecutivo aseguran que el objetivo es "que la obra se haga". En segundo lugar, para abrir al paso, se necesitaría de mucha paciencia, permisos y burocracia.

8 millones de dólares

A principio de septiembre, Democracia reveló que el jefe de Gabinete, en una presentación en la Cámara de Diputados, explicó en un documento que "no hay plazo previsto para la finalización de la obra en trato, encontrándose en evaluación las distintas posibilidades de continuidad". Asimismo, Francos aclaró que "desde la Administradora de Infraestructura Ferroviaria no se ha tenido contacto con los vecinos de la zona aledaña a la obra".

Como a toda la economía argentina, la obra del paso bajo nivel sufrió los fuertes embates de la inflación y los montos involucrados tuvieron cambios siderales. Así, el monto contractual original era $ 801.995.777,83 + IVA, según los valores básicos calculados a diciembre de 2020. Tras la primera llamada Adenda uno, se adicionaron $78.276.987,70 + IVA, por lo que el monto involucrado pasó a ser $880.272.765,53 + IVA.

Tan sólo tres años y medio más tarde, el monto asciende a $7.695.801.388,07 + IVA (valores actuales, abril 2024). Es decir, aún cuando la obra tiene un avance del 36,99% según el Gobierno, aún resta pagar más de $7 mil millones de pesos, lo que representa casi nueve veces más que el monto originalmente previsto para toda la obra.

En dólares, la distorsión también es significativa. Con el dólar oficial a $151, en diciembre de 2020, la obra representaba unos U$S 5,8 millones. Ahora, con el dólar oficial a $973, lo que resta ejecutar representa unos U$S 8 millones.