La recuperación productiva luego de la sequía resulta clave.
La recuperación productiva luego de la sequía resulta clave.
DERECHOS DE EXPORTACIÓN

La recaudación por retenciones se duplicó en el primer semestre del año

Creció un 160% interanual entre enero y junio, respecto de 2023. No obstante, el aporte del sector es menor al de 2021 y 2022. Afirman que el incremento en el pago del tributo se condice además con una recuperación productiva luego de la sequía, que según productores locales “fue brutal”.

La recaudación por retenciones sobre el sector agropecuario se duplicó en el primer semestre del año frente al mismo período de 2023.

No obstante, se ubicó por debajo de los registros de 2021 y 2022, de acuerdo a un informe elaborado por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).

Según las estimaciones de la entidad, entre enero y junio el agro aportó US$2.660 millones por Derechos de Exportación (DEX) a las arcas del Tesoro, lo que implica un 160% más que el aporte de los primeros seis meses del 2023, con un estimado de US$1.153 millones en ese período.

Pero el incremento en el pago del tributo se condice además con una recuperación productiva luego de la sequía que afectó fuertemente la campaña agrícola durante el 2023.

Asimismo, explicó la merma en la recaudación frente a los dos años previos al calendario pasado por un menor volumen de exportación y la caída de los precios internacionales.  

Recuperación de la sequía

En esa línea, Gustavo Frederking, prosecretario de Carbap, reconoció los números de la recaudación e hizo especial hincapié en la sequía que afectó al sector en el último tiempo.

“Claramente se duplicó la recaudación por retenciones porque creo que no se toma dimensión de que la sequía del año pasado fue dramática. Fue brutal, muy severa”.

A su vez agregó que “este año tuvimos 50,5 millones de toneladas de soja, un muy buen promedio para lo que es el promedio argentino. No es el récord y creemos que con otro tipo de políticas habría que aumentar un montón esos 50 millones de toneladas. Igual es bueno, es alto, en torno a lo que ha sido la producción”.

En cuanto a las políticas, destacó la situación de Brasil, “que tiene 150 millones de toneladas y se han ido aumentando las toneladas de producción de manera considerable porque cuenta con una política activa de desarrollo en lo que es la producción”.

Reconoció que en la zona núcleo, “la cosecha fue excelente, lo de maíz y soja fue muy bueno porque hubo lluvias en su momento justo. Lo del trigo había sido pésimo, mejor que el año anterior, pero mal”.

No obstante aclaró que “los cultivos necesitan de la lluvia y de cierta humedad de la napa, y eso no se recompuso: a las napas les falta humedad. Va a hacer falta agua. Y se está anunciando una Niña, algo que sin dudas preocupa, pero aún falta para ello”.

Según Frederking, “los fríos y las heladas son normales, no afectan de manera diferente. Si bien estamos frente a un invierno que no veíamos desde hace muchísimos años, el agua se necesita más adelante, en octubre, cuando el trigo empieza a desarrollarse”.

Pero sí resulta diferente para la producción ganadera, donde aseguró que “sí falta agua. Está complicado y las reservas se agotan. Le haría bárbaro unos milímetros de agua”.

Espera por retenciones

Por su parte, el presidente de la Sociedad Rural de Junín, Andrés Moutous, se refirió a la recaudación en torno a las retenciones y la situación de la ganadería.

“En cuanto a las retenciones, mantenemos la misma postura. Estamos en contra de las retenciones, es un impuesto distorsivo, pero por el momento están, siguen existiendo. Obviamente que la recaudación es mucho mayor y eso también ha ayudado”, advirtió.

Consultado sobre el clima y el impacto en el sector, indicó que “la semana pasada de fríos y heladas fuertes, con escasez de humedad, afectan por supuesto, pero más que nada la ganadería por lo que es pastos. También afecta un poco lo sembrado con grano fino, que retrasa bastante el crecimiento por el momento”, refirió, aunque confió en que “se empezaría a moderar el clima por estos días”.

Cabe destacar que respecto de las retenciones, un histórico reclamo del campo, el Gobierno había manifestado que, con la recomposición de las cuentas fiscales y el crecimiento económico, se eliminaría el impuesto PAIS y luego las retenciones.

A pesar de los gestos oficiales, el campo espera, aunque no parece una posibilidad a corto plazo.

“La discusión seria es que hay que quitar retenciones. Entendemos el camino emprendido del equilibrio fiscal, presupuestario, no gastar más de lo que se tiene; todo eso es positivo. Falta un plan productivista de desarrollo donde apuntemos a producir, y con retenciones e Impuesto PAIS se nos va a hacer difícil aumentar la producción. No solo para el sector, sino para el país, para generar ingreso de divisas, que haya más empleo, más producción”, dijo Frederking.

Menos que en 2021 y 2022

En este sentido, la BCR indicó que “pese a la notoria recuperación interanual, si se compara con los años anteriores, este guarismo está por debajo de los 4.000 millones de US$ recaudados por esta vía en los primeros seis meses de 2021 y 2022”, y sostuvo que “esto encuentra su explicación tanto en un mayor volumen de grano anotado para exportar en aquellos años así como mejores precios de exportación”.

En relación al menor volumen actual, el reporte detalló que “en el primer semestre del año se llevan realizadas declaraciones juradas de venta al exterior (DJVE) por 16,2 Mt considerando tanto poroto, harina y aceite, muy por encima de las algo más de 10 Mt de igual período del año pasado, pero por debajo de las 18 Mt del primer semestre del 2022 y las 22 Mt del primer semestre del 2021”.

Al referenciar la caída de los precios internacionales, en el análisis se indicó que “los precios FOB oficiales del primer semestre de 2024 en poroto, harina y aceite de soja estuvieron, respectivamente, un 21%, 24% y 15% por debajo de los precios FOB promedio del primer semestre del 2023 y un 32%, 20% y 46% por debajo del primer semestre del 2022”.

En cuanto a la proyección de cara a lo que resta del año, en base a los volúmenes estimados actuales y a los precios FOB vigentes, y tomando la distribución de DJVE promedio de las últimas cinco campañas, la BCR proyecta que “el total de aporte por DEX de los principales complejos del agro alcance US$ 6.170 millones en 2024, más del doble de lo aportado en 2023, pero considerablemente por debajo de los guarismos del 2021 y 2022”.

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