Los precios de los combustibles volvieron a subir desde ayer. El aumento es del orden del 4% dentro de lo que se había indicado, y así el litro de nafta súper en YPF ahora cuesta $1069 -estaba $1027 y el de Infinia saltó a $1277 – se pagaba $1.227. Respecto del gasoil, en la petrolera nacional, que controla la mayor parte del mercado, el Diésel 500 pasó de $1073 a $1100, mientras que quien quiera cargar Infinia Diésel tendrá que pagar el litro a $1.280 contra $1248 que costaba.
El alza se debe a un aumento al Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) y el incremento iba a promediar un 3,5 por ciento, aunque también se mencionaba un índice de sólo un 1 por ciento en la actualización del gravamen.
El costo de llenar el tanque
Para un automóvil naftero con una capacidad de tanque de 45 litros, la suma para llenarlo con nafta súper en las estaciones de servicio YPF, se eleva ahora a $48.105. Pero si el conductor quiere llenarlo con Infinia, el montó que deberá abonar será de $57.465.
En el caso de tratarse de un vehículo a gasoil, una carga completa con la línea más económica demandará unos $49.500, mientras que, si desea cargar con la línea premium, la cifra aproximada a pagar será de $57.600.
Con este ajuste, los combustibles ya subieron un 62 por ciento en lo que va del año, pero desde noviembre del año pasado, los incrementos acumulados alcanzan el 262 por ciento. Desde el sector petrolero advirtieron que los precios todavía están retrasados, pero admiten que deben aflojar los ajustes por la fuerte caída en el consumo, en medio del escenario recesivo. Desde diciembre, las ventas de combustibles cayeron 17 por ciento, según cálculos de los estacioneros.
Además, se desplomó fuerte el consumo de nafta premium, ya que las ventas cayeron 22,6. Con estos aumentos, el precio de la nafta y el gasoil en la Argentina se equiparó al valor de los países vecinos, lo que hizo menos conveniente para los extranjeros cargar combustible en el mercado local.
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