Las consecuencias de la escalada inflacionaria y el impacto en el salario hicieron mella en las tradicionales ventas navideñas. En efecto, el nivel de operaciones se desplomó un 22 por ciento, según se desprende de un relevamiento elaborado por la Sociedad Comercio e Industria de Junín (SCIJ), al que tuvo acceso Democracia. Además, el 56 por ciento de los comerciantes consultados “no cumplió con las expectativas” para esta fecha.
El ticket promedio ascendió a 26 mil pesos y, entre los regalos más elegidos por los juninenses aparecen los juguetes (49 por ciento); indumentaria (34 por ciento); tecnología (6 por ciento); perfumería (3 por ciento); librería (3 por ciento); y otros (5 por ciento). Con respecto a las formas de pago, lideran las promociones bancarias especiales, con el 75 por ciento; seguidas por las tarjetas (entre una a seis cuotas), con un 12,5 por ciento; y contado efectivo, 12,5 por ciento.
El grueso de las ventas se concentró el sábado 23. Y, en comparación con una semana normal, las comercializaciones el 45 por ciento vendió “algo más”; el 44 por ciento, “mucho más”; y el 11 por ciento, “igual o menos”.
En el país
Las ventas de juguetes experimentaron un seis por ciento de caída interanual en esta Navidad, informó la cámara empresaria del sector. Las fiestas de fin de año representan una época muy esperada por los comerciantes, dado el aumento de la demanda en la mayoría de los rubros.
Sin embargo, las expectativas para este 2023 marcado por una alta inflación y un contexto político y económico difícil, resultaban poco alentadoras. A pesar de este panorama, la Cámara Argentina de la Industria del Juguete reportó una caída en el nivel de ventas de juegos y juguetes del 6% respecto al año anterior.
Asimismo, la entidad señaló que el nivel de actividad repuntó en los últimos 3 días, con la Noche de las Jugueterías, y atenuó la caída, que rondaba e 10% antes de la semana previa a Navidad.
La Noche de las Jugueterías, llevada a cabo entre el jueves 21 y el domingo 24 inclusive, incluyó promociones bancarias que morigeraron el resultado, que cerró en una disminución del 6% respecto al año anterior.
Julián Benítez, presidente de la Cámara, aseguró que "los precios de los juguetes, comparados con otros rubros como los alimentos y bebidas para estas fiestas, no aumentaron en la misma magnitud, lo que terminó influyendo en la compra de los regalos más elegidos por la niñez para el arbolito: los juguetes".
Respecto al comportamiento de los precios, Benítez señaló que es necesario segmentar por lugar de origen: "Por un lado, tenemos la industria nacional, que incrementó los precios en los últimos 12 meses entre un 110 y 120%, muy por debajo del nivel de inflación acumulada, y por otro lado los productos importados, que tuvieron aumentos en el orden del 200 y 240% y fijaron los precios de acuerdo con los diferentes tipos de cambio". Sin embargo, agregó que "no se hicieron remarcaciones de precios significativas en los últimos días".
La entidad informó que siete de cada 10 regalos que realiza Papá Noel son juguetes y en este año, aún con las restricciones presupuestarias de las familias, se decidió privilegiar a los niños y niñas, reduciendo otros gastos de la nochebuena.
A partir del jueves, con la Noche de las Jugueterías, se empezó a verificar una mayor afluencia de consumidores a los comercios de barrio y cadenas de jugueterías, quienes aprovecharon las promociones de los diferentes bancos.
Los artículos más económicos son los que se vendieron en mayor volumen y en base al comportamiento del consumidor en locales, se deduce que se compraron artículos para que sean compartidos entre hermanos y hermanas como los arcos y pelotas de fútbol o juegos de mesa.
Asimismo, se estimó que el valor del ticket promedio en jugueterías de barrio fue de $7.000 pesos por juguete mientras que, en cadenas de jugueterías, ascendió a 18.000 pesos. Del informe de la Cámara, también se desprende que, salvo los productos de aire libre como pelotas, inflables, globos de agua, juegos para la arena y didácticos para la primera infancia, todas las categorías presentaron retrocesos.
"En la actualidad, no hay un juguete que se destaque, sino que son muchos tipos de categorías que se demandan. Esto es bueno para el gremio ya que permite una venta más homogénea y no se concentran los pedidos en uno o dos productos únicamente. Existe mucha competencia hacia el interior del sector", remarcó el titular de la entidad.
Ahora, la industria pone sus expectativas en el Día de Reyes, el próximo 6 de enero.
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