La empresa que estaba a cargo de la obra de la travesía urbana en la Autopista 7 retiró el obrador, situado en la Ruta Nacional 7 y el camino al Parque Natural Laguna de Gómez (frente a la Sociedad Rural de Junín), situación que suma incertidumbre sobre el destino de esta obra clave para el desarrollo de la ciudad.
Esto se da luego de que el presidente electo, Javier Milei, anunció “obra pública cero” y un fuerte recorte en el área, que obligaría a los intendentes y gobernadores a buscar vías alternativas para el financiamiento privado.
Juan Fiorini, secretario General del municipio, afirmó a Democracia: “La autopista para Junín es muy importante, por eso, cuando fue el gobierno de Mauricio Macri insistimos mucho para que comience la obra y hemos celebrado los avances en las distintas etapas, que ya cambiaron la forma de circular. Y hemos insistido durante el actual gobierno de Alberto Fernández para que continúe. Lamentablemente, también entendemos que, hoy, el contexto es diferente y en esta transición de gobierno, el nuevo presidente y su equipo tendrán que analizar la situación financiera y económica y definir prioridades. Y, a partir de eso, tomar decisiones con respecto a las obras públicas”.
Y agregó: “Puntualmente, esta obra ya tiene más de un año desde su licitación, se licitó en junio de 2022 y fue adjudicada a una empresa en enero de este año, y vimos pocos avances o ninguno, es una obra que no avanzó, a pesar de haber estado en los presupuestos 2022 y 2023. Partiendo de esa base, entendemos que va a haber un tiempo prudencial para tomar decisiones y vamos a estar expectantes para ver qué decisiones toma este gobierno”.
Por su parte, el secretario de Obras Públicas del municipio, Marcelo Balestrasse, agregó en diálogo con Democracia: “Levantaron el obrador y se llevaron las máquinas. Estas grandes obras van a ser revisadas por los nuevos funcionarios y se deberán buscar, seguramente, nuevas formas de financiamiento, mientras tanto la empresa no querrá pagar costos operativos de personal, máquinas improductivas, alquileres y seguros hasta tanto no tengan la confirmación de si los contratos se cortan o se readecuan”. Y agregó: “Ya verá el nuevo gobierno como resolverán las actuaciones administrativas”.
El proyecto
En junio pasado, comenzaron a realizarse los estudios topográficos de la obra de la autopista en la travesía urbana de la Ruta 7, en Junín, entre los kilómetros 258 (calle Puente del Inca) y 259,35 (Roque Vázquez), que tiene un plazo de ejecución de 18 meses y una inversión de $3.598.797.197,58.
Y si bien estaba previsto el inicio de las labores en agosto, nunca comenzaron.
Cabe recordar que la apertura de sobres con las ofertas se llevó a cabo el 6 de junio de 2022, en el marco de la licitación pública de uno de los tramos perteneciente al proyecto para la transformación en autopista entre Luján y Junín, de 196 kilómetros, financiado por Vialidad Nacional.
Entre las dos firmas evaluadas, en enero de este año la obra se adjudicó a Vial Tec SA que compitió con Decavial Saica. Entre los trabajos, se prevé la construcción de un distribuidor en el empalme con Ruta 65 (Km 258,39), que será elevado a dos niveles, de tipo “trompeta”, ya que la traza de la ruta provincial no continúa hacia el norte.
En el kilómetro 258,67, con un distribuidor tipo “diamante”, la avenida Circunvalación se elevará por sobre la calzada nacional y se conformarán tres rotondas: Norte, Sur y la del acceso a la nueva Terminal de Ómnibus implantada en ese sector.
Según se indica en la licitación, el proyecto de la autopista, además, contempla las colectoras pavimentadas a ambos lados, intersecciones a distinto nivel y control total de accesos. Con ello la velocidad de circulación puede elevarse a 100 kilómetros por hora.
De esta manera se le dará continuidad a la doble calzada de la sección anterior inaugurada el año pasado, entre Junín y Chacabuco, localidad donde, además, se está construyendo la variante de 23 kilómetros, trayecto que rodea y evita atravesar el casco urbano.
Entre otras labores a ejecutar, se encuentran nuevos puentes de vinculación sobre el cruce del Río Salado en ambas colectoras, obteniendo así una continuidad de esas calles en todo el tramo; iluminación de los intercambiadores y calles colectoras, y demarcación horizontal y señalización vertical acorde a una autopista.
Desde Vialidad recordaron en ese momento que este trayecto estaba comprendido en “las famosas obras con financiación Participación Público Privada (PPP) que quedaron paradas”, situación que ahora alcanza al gobierno saliente, ya que las obras prácticamente nunca comenzaron.
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