Reunión por el Día del Amigo junto a quienes impulsaron el club.
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NUEVA SEDE

El Club Cte. Escribano del Paraje La Agraria cumplió 90 años desde su fundación

La gente del club, junto a vecinos, gente de campo y el Estado, pudo erigir una nueva sede para la entidad.

Hace pocos días, el Club Comandante Escribano del Paraje La Agraria cumplió 90 años de historia desde su fundación, con fecha del 12 de octubre de 1933. 

Si bien su edificio original fue demolido totalmente cuando pasó por allí la Autopista de Ruta 7, el espíritu de la entidad permaneció en su gente, que decidió construirlo de nuevo, ponerlo en condiciones en cuanto a trámites y demás, y muy pronto será inaugurada la nueva sede.

En diálogo con Democracia, Raúl Dattoli, presidente de la nueva comisión y reconocido conductor del programa televisivo “Homenajeando pueblos”, recordó un poco de la historia del antiguo club. “El edificio estaba bien hecho, a pesar del paso de los años, porque había sido mantenido. Contaba con la cantina atendiendo todos los días, un salón completo para encuentros sociales. Pero tras ser demolido no quedó un solo ladrillo”, aseguró. 

Por estos días, a pesar de que parezca increíble, el Club Cte. Escribano ya tiene nuevas instalaciones: un galpón con dimensiones importantes, sanitarios y una nueva comisión que lo dirige.

Al respecto, Dattoli contó: “Cuando se hizo la Autopista, Vialidad tomó un sector de tierra para hacer la colectora. Eso fue unos meses antes de la pandemia. El club fue demolido, no quedó nada de su estructura, pero sí un terreno propio. La cancha de futbol que tenía el club fue corrida hasta el mencionado terreno y luego se empezó a construir la sede del club, ya superada la pandemia, circunstancia que demoró todo, por supuesto”.

“Lo cierto es que un grupo de gente del lugar quiso recuperar la pérdida. Muchos nos dijeron que estábamos locos por querer hacer un nuevo club de la nada y en el medio del campo. Nos propusimos llevarlo a cabo y estamos trabajando. Ya tenemos el club armado, aunque falta muchísimo. Es todo a pulmón, un trabajo impresionante que se está haciendo. Tenemos paredes, techos, ventanas, estamos haciendo los baños. Ya hicimos todo el piso de hormigón”, dijo entusiasmado Raúl. 

“Además del trabajo físico y los costos, todo con mucho sacrificio, está la problemática de los papeles porque el club fue demolido y hubo que hacer todo de nuevo en cuanto a trámites administrativos y legales, lo cual no es fácil. En este momento ,por lo pronto, hubo un cambio de nombre: se llama Asociación Civil Centro Juvenil Agrario de Capacitación ‘Cte. Escribano'”, destacó.

Características

El club nuevo cuenta con una estructura armada de importantes dimensiones, con canchita de fútbol donde iba gente de Junín, jóvenes para jugar, en horario nocturno incluso porque había buena iluminación. “Lamentablemente sufrimos de todo – dijo Dattoli-  porque, cuando teníamos levantado el tinglado con las paredes hechas, hace un año y medio atrás vino un fuerte viento, un tornado, derribó dos paredes y tiró todas las columnas de luz de la cancha. Obviamente, las paredes no habían sido hechas como correspondían, pero la empresa se hizo cargo y las hicieron de nuevo y bien”.

“Eran de 15 metros de ancho por 4 y pico de alto, pero no les habían hecho columnas ni puesto hierro, entonces las embolsó el viento y tiró todo. La empresa se hizo cargo y hoy estamos bastante adelantados, pero con un esfuerzo humano impresionante, juntando dinero entre los integrantes de la comisión para comprar materiales, etc. Hemos recibido y estamos recibiendo muchísimas donaciones  de materiales, incluso dinero, por parte de vecinos y chacareros de la zona. Y hubo una buena administración de la última comisión y esfuerzo por el amor a lo que significó el club en sus 90 años”, sostuvo. 

Consultado sobre si el Estado les había pagado algo por el antiguo edificio del club que demolieron, el directivo dijo que se hizo cargo de la demolición de la sede del club y proporcionó dinero con el cual se hizo el tinglado y las paredes, pero nada más. “Teníamos un problema muy grande porque la construcción era de muchos metros de piso (25 de largo por 15 de ancho) y costaba un dineral hacer el piso de hormigón”, dijo. 

Al parecer Vialidad Nacional les proporcionó el dinero para hacer la mitad del piso y el resto, la Municipalidad de Junín. “Hoy tenemos la totalidad del piso hecho de hormigón armado, lo cual es una gran ventaja para seguir trabajando en el club. Tenemos los baños terminados, limpieza del predio, cortado el pasto. Y estamos organizando todo para tenerlo en condiciones. Vamos a hacer la inauguración de la nueva sede del club”, adelantó el presidente de la entidad.

Según lo expuesto, el objetivo es que el Club Cte. Escribano de La Agraria vuelva a ser un lugar de encuentro de la gente de campo y también de pueblos vecinos. “Siempre se hicieron cenas y bailes. Hasta la última realizada en el edificio viejo, venía gente de O’Higgins, Morse, Junín, incluso de Los Toldos y de Lincoln. Eran muy famosos los bailes del club de La Agraria”, recordó Dattoli.

Comisión

El 7 de julio del corriente año se eligió en asamblea la nueva comisión del Club Cte. Escribano del Paraje La Agraria.

“Fui honrado con el cargo de Presiente, junto a los demás valiosos integrantes, un grupo de gente maravillosa que estuvo presente por un solo motivo: AMOR A SU CLUB. Luego de la asamblea, fue muy gratificante compartir una cena con toda la nueva comisión y demás amigos que nos acompañaron y siempre están ayudando. Es un Club al que le falta mucho, pero con gente humilde y de corazón grande”, manifestó Raúl Dattoli en esa oportunidad.

Los integrantes de la nueva comisión son:

  • Presidente: Raúl Dattoli.
  • Vicepresidente: Raúl Pachelo.
  • Secretario: Mario Carca.
  • Prosecretario: Gabriel Ferrúa.
  • Tesorera: Silvia Mascareño.
  • Protesorero: Alfredo O. Gianella.
  • Vocales titulares: Daniel Pérez, Liliana González e Inés Cornacchia.
  • Vocales suplentes: Cristina Meccia, Raúl Loguzzo y Osvaldo Macchia.

Comisión revisora de cuentas: Ricardo Ferrúa, Gerardo Aperlo y Marta Balbi.

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