En Junín y la Región, los municipios salieron a objetar el bono de $60 mil
Los jefes comunales consultados por Democracia insistieron en que son las paritarias el ámbito de negociación y manifestaron que las arcas comunales no cuentan con los recursos para solventar ese desembolso. Condicionan el pago a la asistencia de Nación y Provincia.
Luego del anuncio del refuerzo de 60 mil pesos para los empleados privados y públicos por parte del ministro de Economía, Sergio Massa, en el marco de un paquete de medidas apuntadas a contrarrestar los efectos de la devaluación, en Junín y en varios municipios de la región -en sintonía con doce distritos del país- ya avisaron que no aplicarán ese pago debido a están desarrollando sus propias negociaciones o no pueden afrontarlo con las arcas propias.
En este escenario, Juan Fiorini, secretario general de la Municipalidad de Junín, afirmó a Democracia: “La medida anunciada por Sergio Massa es un parche más de los tantos que viene realizando el Gobierno. Es un anuncio pensado más como un candidato en campaña que como ministro de Economía”.
Y prosiguió: “Nosotros estamos del lado de los trabajadores, como siempre, pero de ninguna manera nos parece que esta sea la manera de solucionar nada. En la Municipalidad de Junín hay una instancia de paritarias, que se implementaron desde el 6 de enero del 2016, por decisión del intendente Pablo Petrecca, y ese marco de paritarias se debe respetar”.
“Si a pesar de eso, desde el Gobierno nacional insisten en imponer esta medida, pediremos que el Estado provincial nos envíe los fondos, dado que no contamos con los recursos”, punzó el funcionario y mano derecha del jefe comunal de Pro. “La difícil situación que vivimos los argentinos requiere de responsabilidad, algo que no está demostrando este Gobierno”, cuestionó.
Por su parte, Víctor Aiola, intendente de Chacabuco (UCR), afirmó a Democracia: “En Chacabuco cerramos paritarias hace poco, por lo que no estamos en condiciones de otorgar ningún bono. La Nación se tiene que hacer cargo de la situación en la que dejó a los argentinos. En Vialidad y en otras áreas siguen nombrando empleados, siguen emitiendo y poniendo parches a una situación terminal”. Y sentenció: “Esta situación no se resuelve con un bono”.
En la misma vereda, en Rojas, distrito gobernado por el radicalismo, el secretario de Coordinación y Gobierno, Nicolás Scardino, manifestó a este diario que, si el gobierno bonaerense no gira los fondos, no podrán afrontar el pago del bono.
Según informó el funcionario rojense, el monto a pagar para los trabajadores municipales de Rojas sería de 15.000.000 de pesos por mes, suma con la que no cuentan las arcas comunales.
Franco Flexas, intendente de General Viamonte (UCR), afirmó a Democracia: “Nosotros acabamos de dar un aumento del 35%, que se suma a otro 35% que habíamos dado con anterioridad. El bono no está en ninguna mesa de negociación, solo en la de Massa. Yo doy el bono si Massa envía a General Viamonte 1000 millones de ATN para compensar la pérdida por inflación”.
El alcalde radical señaló que durante este año los trabajadores municipales recibieron un incremento salarial del 70%. “Los gastos suben con la inflación, pero la coparticipación viene con el 40% aproximadamente”, comparó. “No sé si es una medida electoralista del Gobierno, pero sí es a medida para los sindicatos, para que no salgan a la calle”, evaluó.
En el país
La Ciudad y 11 provincias se abren del bono de 60 mil pesos que anunció Massa. Se trata de la Ciudad de Buenos Aires y las provincias de Santa Fe, Misiones, Córdoba, Jujuy, Entre Ríos, La Pampa, Neuquén, Catamarca, Tucumán, Salta y Santa Cruz.
Hasta ahora solo confirmaron este pago Mendoza, La Rioja y Santiago del Estero. En tanto, el resto de las provincias por estas horas estaba definiendo qué hacer, es decir si se plegaban al bono o privilegiaban sus negociaciones locales.
El primero en separarse fue el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, quien detalló que no pagará a sus empleados el bono de $60 mil en dos cuotas de 30 mil anunciado por Nación porque -en su propia paritaria- la provincia ya había acordado con los gremios la aplicación de una cláusula gatillo hace sólo diez días. Al respecto, el gobernador peronista afirmó que Santa Fe ya tenía acordado "un mecanismo frente a cualquier instancia de desfasaje de inflación como las cláusulas automáticas o gatillo para preservar el poder adquisitivo".
"Lo que se está recurriendo en algunos lugares es porque hubo discusiones salariales que no contemplaron de ninguna manera el desfasaje que se generó con la inflación y la devaluación. Acá la provincia tiene resguardadas estas instancias", aclaró Perotti en declaraciones a una radio local.
El bono a cuenta de paritarias forma parte de las medidas que el ministro y candidato anunció el domingo pasado, y que incluye créditos y aumentos en los planes sociales, a fin de contener los efectos inflacionarios que trajo aparejada la devaluación del día siguiente de las PASO del 13 de este mes. En tanto, Misiones, conducida por un gobernador Oscar Herrera Aguad que apoya la candidatura presidencial de Massa, también se distanció del bono a empleados públicos, con argumentos similares a Santa Fe, ya que también están en medio de su propia paritaria.
El ministro de Hacienda de Misiones, Adolfo Safrán, justificó la decisión de no pagar el bono al explicar que dieron "aumentos en julio y agosto y hay otros sectores como la docencia y las fuerzas de seguridad que recibirán incrementos en septiembre".
El funcionario interpretó que Massa "se aplica al ámbito privado porque en muchos sectores no estaban previstos aumentos salariales para estos meses y ese bono es a cuenta de las paritarias". En ese marco, lo que se debe hacer es "revisar para ver si el aumento pactado está en línea con la realidad económica que se vive a partir de lo que pasó después del 14 de agosto", agregó Safrán.
La Ciudad de Buenos Aires, en la misma línea, también deslizó que ya dio aumentos a los empelados municipales que siguen de cerca la inflación de este año, "con paritarias mensuales y en algún caso hasta quincenales".
Por su parte, el gobierno de Córdoba hizo trascender este martes en medios locales que considera que el bono a los empleados públicos ya está dado en su propia paritaria y se aclaró que, en agosto, el que menos cobró de aumento fue de $33 mil y remunerativo, conforme al escalafón. Es decir, que lo que anunció el Massa ya se liquidó en Córdoba para todos los empleados públicos, excepto para los docentes.
En Jujuy, el ministro de Hacienda provincial, Carlos Sadir, fue más duro ya que también adujo que la administración local está en línea con la inflación en el marco de su propia paritaria, pero también utilizó otro argumento más para no sumarse a la medida.
Al respecto, aseguró que además Jujuy no tiene los recursos para pagar la suma fija de 60 mil pesos que el Gobierno nacional anunció para los trabajadores y consideró que el bono "es una medida electoralista sin conocer como es la situación financiera de cada provincia.
El gobernador de La Pampa, Sergio Ziliotto, dijo que la provincia no adherirá al pago la suma fija porque el Gobierno nacional "sacó esa medida para los empleados nacionales". "Nosotros en La Pampa hace cuatro años que garantizamos cláusula gatillo por encima del nivel de la inflación y hoy por hoy hay un esfuerzo mayor para los trabajadores que tienen cargas familiares", sostuvo el mandatario provincial.
El gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet, aclaró que los empleados públicos provinciales no recibirán la suma fija sugerida porque tiene sus propias negociaciones. "Hoy estamos con un 76% de aumento acumulado, con el 5% que acordamos este mes, y estamos un 15 o 16 puntos arriba de la inflación. Igualmente, seguimos con paritarias abiertas y trabajando", señaló.
"La totalidad de los trabajadores y trabajadoras están bajo Convenios Colectivos y se acordó en paritarias con todos los gremios. Existe un acuerdo vigente con ajuste por el IPC, único en el país, que contempla justamente estos saltos en las variables económicas", sostuvo, por su parte, el gobierno de Neuquén, con la misma lógica de las demás provincias mencionadas par ano dar la suma fija.
Catamarca mantuvo el mismo posicionamiento debido a que el gobierno provincial todavía tiene activo un bono de $120.000 a pagar en 6 cuotas que fue anunciado en mayo, al que además se le añadieron otras dos cuotas extra de $20.000 cada una antes de fin de año.
Tucumán hizo saber, por su parte, que no lo pagará porque está en plena negociación paritaria y además no tienen previstos "los recursos" para otorgar los $60 mil del bono. Tampoco lo hará Santa Cruz, ya que el mes pasado había dispuesto para el personal activo y pasivo de la provincia el pago de un bono por única vez de $100.000 para quienes ganan un salario bruto inferior a 300 mil pesos, y de $60.000, para quienes superan ese ingreso.
También se desmarcó Salta, ya que el ministro de Gobierno provincial, Ricardo Villada, dijo que el distrito "no tiene" los recursos para esa ayuda extraordinaria "sin ayuda de Nación". Y agregó: "Imagínese los municipios".
Municipales de Junín, en pie de lucha
Además de la discusión por el bono de 60 mil pesos, en Junín los municipales tampoco llegaron a un acuerdo por la paritaria, por lo que el gremio se declaró, ayer, tras un frustrado encuentro con los representantes del Ejecutivo comunal, en estado de alerta, asamblea permanente y movilización y, hoy, a las 10, brindarán una conferencia de prensa en la sede sindical de Colón 59.
El secretario general del Sindicato de Trabajadores Municipales de Junín, Gabriel Saudan, afirmó a Democracia que la reunión con los delegados e integrantes del Ejecutivo "no fue positiva". Y afirmó: "Solo nos ofrecieron adelantar a septiembre el 10% de suba salarial pautado para octubre, ofrecimiento que consideramos insuficiente”.
Con respecto al pago de la suma fija anunciada por el Gobierno nacional, Saudan dijo: "El Ejecutivo dijo que no tenía la plata para pagarlo, que iban a buscar pedir la suma a la Provincia".