Rosana Franco, titular de FAA Junín.
Rosana Franco, titular de FAA Junín.
SIGUE LA PREOCUPACIÓN POR LA SEQUÍA

Afirman que "El Niño" pasó de "fuerte a moderado" y complica al campo en Junín

Esperan que la situación comience a normalizarse a mediados de septiembre. “Ahora la problemática está centrada en el trigo que se sembró y que ha tenido varios eventos malos”, afirmó Alejandro Signorelli, jefe del INTA, en diálogo con Democracia.

El fenómeno climático "El Niño" pasó de "fuerte a moderado" y "tendrá implicancias directas" en la campaña 2023/2024 en la región núcleo a partir de octubre, afirmó, ayer, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) a través de un informe.

Según la BCR, "se está experimentando una transición, con 'El Niño' pasando de una fase fuerte a una moderada", cuya evolución "tendrá implicaciones directas en la temporada agrícola 23/24 en la región núcleo, a partir de octubre".

"Si bien las previsiones iniciales proyectaban un 'Niño' fuerte, la realidad actual muestra una moderación", agregó la entidad, y explicó que "esto significa que, si bien habrá un aporte de humedad a la región, otros factores como efectos regionales cobrarán mayor relevancia en las precipitaciones".

La BCR contempló además que "los productores agrícolas enfrentan desafíos considerables debido a la falta de agua", como sumar 300.000 hectáreas a la siembra maicera, cuya estrategia "se ve influenciada por las lluvias de agosto y septiembre, y la siembra tardía se considera cada vez más como una alternativa viable".

Costos más elevados

A ello se suman los costos elevados y el atraso en las lluvias que "afectan la compra de insumos, como fertilizantes, impactando en la rentabilidad de los productores". No obstante, "hay un rayo de esperanza", remarcó la entidad, ya que "'El Niño' moderado sigue presente y su contribución de humedad será crucial para compensar las deficiencias causadas por la sequía".

"Si bien la intensidad del fenómeno ha disminuido, su presencia es un activo valioso para los agricultores", recalcó. En este sentido, la BCR sostuvo que "'El Niño' moderado ofrece una oportunidad para mitigar los efectos de la sequía", y su planificación cuidadosa, adaptabilidad y atención a las condiciones climáticas en constante cambio serán clave para enfrentar los desafíos y aprovechar las oportunidades en esta temporada agrícola", concluyó.

Preocupación en Junín

“Los pronósticos son a 3 o 4 meses, primero estaba previsto un Niño fuerte, pero aún no se ven los efectos en nuestra zona. Esperamos que, a partir de mediados de septiembre, se normalicen las lluvias y que tengamos situaciones normales y, en algunos casos, por encima de lo normal. Ahora la problemática está centrada en el trigo que se sembró y que ha tenido varios eventos malos, no solo la falta de agua y la napa, que está muy baja, sino también altas temperaturas en época invernal”, afirmó Alejandro Signorelli, jefe del INTA Junín, en diálogo con Democracia. 

Y añadió: “Para la siembra de gruesa, entre septiembre y octubre, esperamos un panorama un poco más normal, con una recomposición del agua del perfil. Por más que sea un Niño moderado, se espera una primavera llovedora”. 

Rosana Franco, presidenta de la filial juninense de la Federación Agraria Argentina (FAA), afirmó a Democracia: “Seguimos esperando las lluvias. Ojalá, en septiembre llueva abundantemente”. Y agregó: “Los insumos se comercializan al dólar oficial y este aumento repercute mucho ahora que hay que comprar, porque se empiezan a diagramar las siembras. Hay incertidumbre todavía y los costos en dólares están caros. Además, la semana pasada no había precio de referencia por el tema cambiario”. 

La dirigente federada afirmó que puede haber siembras tardías. “Cuando faltan lluvias se va corriendo la fecha de siembra”, dijo. Rodrigo Esponda, productor y concejal de Juntos, afirmó a este diario: “El clima es algo impredecible, evidentemente el cambio climático es una realidad que nos afecta, y mucho.

Desde febrero están diciendo que se corta la sequía y seguimos con una sequía espantosa, en nuestra zona hace falta el agua de manera urgente, los trigos empiezan a necesitar agua y sobre todo los perfiles, todo lo que tiene que ver con la ganadería, el pasto, las reservas forrajeras para el invierno -que no han venido, porque no llovió- y no se recuperan los perfiles para encarar la simbra de soja y maíz”. Y añadió: “Los pronósticos van perdiendo la confianza, porque van cambiando y errando casi como los encuestadores. Uno trabaja día a día, esperando que llueva”. 

“Vendemos con un dólar oficial y los insumos están al precio que pueden estar, cada vez hay menos insumos y es difícil acceder, en una economía tan manoseada, con tantos tipos de cambio, con tanto cepo, con tantas dificultades para importar y exportar, es una economía que está muy dañada y es muy difícil pensar cómo encarar los procesos productivos. Está muy difícil, pero no escapa de la realidad de la economía argentina, todos los que tienen que usar productos importados tienen la misma complicación”, manifestó. 

“Hasta que no veamos llover, ya es difícil de creer, porque los pronósticos han sido bastante erráticos. Y si no llueve la situación va a ser bastante complicada; más de lo que ya es”, alertó Andrés Moutous, presidente de la Sociedad Rural de Junín.

Y con respecto a los costos, afirmó: “Los insumos están en dólares oficiales, que es el mismo dólar en el que se venden los commoditie, o sea trigo, soja, maíz, girasol. El problema es que hay una brecha cambiaria cada vez más grande con el dólar real”. 

El trigo, “regular”

En dos semanas, 150.000 hectáreas de trigo de la región núcleo pasaron a estar en condición regular. Si bien el 40% de los lotes aún se conservan en buen estado y un 45% muy buenos, las lluvias aun no llegan y con el transcurso de los días los requerimientos del cultivo se incrementan. 

De hecho, hay un 5% de los cuadros que ya ingresaron en encañazón y el resto se reparte entre pleno macollaje (80%) e inicios de macollaje (10%). Hay lotes en los que comienzan a detectarse signos de estrés hídrico: “Los trigos empezaron a descartar hojas basales. En algunos casos hay pérdidas de plantas”, señalan los productores.  

En General Pinto -consigna el informe de la BCR- empiezan a verse trigos con hojas basales desecadas. “Es importante que llueva durante agosto para mantener el actual potencial de rinde”, señalan. En el noreste bonaerense, como en San Pedro y Baradero, si bien el trigo está en muy buenas condiciones, están esperando la lluvia para mantener esa condición. 

Siembra de maíz

En general no se reportan cambios respecto a una semana atrás, pero los asesores zonales coinciden en que la superficie maicera está fuertemente condicionada a la evolución de los precios de los insumos, las condiciones climáticas y otros factores económicos. Desde Corral de Bustos, si bien mantienen las intenciones de siembra, dicen que las evalúan día a día y su mayor preocupación recae en las reservas hídricas: “Necesitamos unos 100 milímetros para sembrar seguros. Pero el que tiene la semilla, seguro va a sembrar, a lo sumo, lo que tendrá que rever será la fecha”. 

Desde General Pinto son menos optimistas y advierten que la incertidumbre en el mercado y los aumentos en los precios de los insumos están generando preocupación y revisión constante de los planes de siembra: “Hay que revisar todo de vuelta. Aumentos de combustibles, el precio de los agroinsumos, ya que hoy es difícil saber qué puede pasar con los planes de siembra que habíamos establecido hasta hace unas semanas”.

COMENTARIOS