Luego de la conferencia de prensa, el precandidato a presidente por Juntos, Horacio Rodríguez Larreta, brindó una entrevista en exclusiva a Democracia, en la cual Cómo bajar la inflación y pagar al FMI, dos cuestiones de suma actualidad, fueron abordadas por se refirió al problema inflacionario, al pago de la deuda al FMI y a los planes sociales.
Al respecto insistió en la necesidad de lograr un plan de desarrollo para que la Argentina crezca y pueda resolver el problema inflacionario y el pago de la deuda del FMI. En tal sentido, remarcó: “Si el plan para bajar la inflación, para que los argentinos tengan un salario digno, que las jubilaciones no sean de hambre, si no lo enmarcamos en un plan de desarrollo, no sirve”.
A continuación, la entrevista concedida por Rodríguez Larreta, en forma exclusiva a Democracia, en su visita a Junín:
- La inflación es uno de los grandes problemas actuales. ¿Cómo intentará bajarla si es elegido presidente?
-Vamos a bajar la inflación lo dice cualquiera, la pregunta es cómo, y es bien concreto. Primero, vamos a terminar con el déficit fiscal, a dejar de gastar de más como lo venimos haciendo hace 70 años. Segundo: dejar de emitir, la maquinita de la emisión es la maquinita de la pobreza. La emisión genera inflación acá y en la China. Tercero, para garantizar eso, el Banco Central tendrá plena autonomía por ley. Eso quiere decir que el Gobierno no le puede tocar más la puerta, no le puede decir ‘mandame plata’. Eso hay que complementarlo con un fuerte shock de exportaciones, porque también genera inflación hoy es la inestabilidad del tipo de cambio, no hay dólares.
Hoy la Argentina tiene una oportunidad enorme de duplicar sus exportaciones en seis a ocho años: el litio y el cobre, el gas y el petróleo de Vaca Muerta y toda la zona núcleo de exportar más alimentos que el mundo necesita hoy producto de la guerra. Es una gran oportunidad que vamos a aprovechar. Si conseguimos un boom de exportaciones, se acaba el problema del dólar para siempre, generando inestabilidad e inflación.
Si las medidas para bajar la inflación, para que los argentinos tengan un salario digno y para que las jubilaciones no sean de hambre no lo enmarcamos en un plan de desarrollo, no sirven. Todo forma parte del cómo y es lo que hace la diferencia. (Gerardo) Morales, Pablo (Petrecca) y yo somos gente del “cómo”, de la gestión, de tomar decisiones. Eso es lo que Argentina necesita.
- Y en el tema del cómo, la pregunta es ¿cómo pagar la deuda con el Fondo Monetario Internacional? Al fin de cuentas, eso también traba el desarrollo de Argentina.
- En cuanto a la deuda, por supuesto, nosotros vamos a dar toda la pelea posible para conseguir las mejores condiciones, ¿qué significa eso?: más plazo, menos tasa. Ahora, la deuda se paga con crecimiento, nosotros mostrándole al mundo (el Fondo Monetario es uno de los acreedores que tiene) el desarrollo y el crecimiento basado en las riquezas naturales, en las posibilidades que el mundo nos da, la deuda no va a ser un problema en la medida que crezcamos, por eso es tan importante tener un plan de crecimiento y desarrollo, no un plan para la deuda.
-¿Habrá un nuevo plan de pago, se continuarán con las negociaciones?
-Eso viene después, primero un plan de desarrollo.
- Pero hay plazos que cumplir con los pagos.
-Necesitamos un plan de desarrollo, mostrarle al mundo cómo la Argentina va a crecer. Si Argentina crece va a generar los recursos para cumplir con sus deudas que es lo que corresponde como buen acreedor.
-¿Qué va a pasar con las políticas sociales para el país? Me refiero a la Anses, los planes y las movilizaciones reclamando sobre eso.
- Vamos al cómo. En primer lugar, sacamos a los intermediarios, que son los que hoy otorgan los planes sociales. Este señor que hoy vemos en la televisión, (Eduardo) Belliboni, decide a quién le dan un plan y a quien no, y usa ese poder de decidir para que aquellos que le dan el plan los extorsionan para que vayan a las marchas. Conclusión: tenés marchas todos los días porque si la gente no va a las marchas, pierde el plan. Eso se soluciona quitándoles el poder a todos los intermediarios como Belliboni, a las organizaciones sociales y lo retoma el Estado. El Estado decide y no obliga a la gente a ir a las marchas.
En segundo lugar, hay que transformar a los planes en un incentivo al trabajo. Hoy el que tiene un plan tiene prohibido tomar un trabajo porque si no pierde el plan, con lo cual faltan trabajadores en muchos sectores.
- Finalmente, en esta nueva recorrida por Junín, ¿cómo la está viendo en su desarrollo?
- Es una ciudad pujante. Es muy lindo modelo para replicar en otras ciudades del interior del país. Ojalá tengamos cien localidades como Junín y ese es el desafío tener ciudades que tengan trabajo, un entramado productivo en la ciudad y alrededor, que tiene seguridad, que tienen desarrollado todo un sistema de monitoreo con cámaras, que se ve la gestión de un intendente como Pablo, que trabaja, resuelve y gobierna.
Es para destacar que la ciudad tenga un cien por ciento de cobertura de cloacas y agua. Muy pocas ciudades la tienen. En el Conurbano bonaerense tenés un promedio de 20 a 25 por ciento, y en José C. Paz, a media hora de la ciudad de Buenos Aires hay un 9 por ciento de cobertura. Yo la veo muy bien, pero de todas maneras vamos a ir a recorrer, a tener reunión con vecinos, me gusta preguntar y también saber cómo impactó la sequía acá.
COMENTARIOS