Aplicaciones de delivery: cada vez son menos los gastronómicos que las utilizan

Cada vez menos comercios del rubro gastronómico de Junín utilizan las aplicaciones de delivery para ofrecer sus servicios, como por ejemplo la popular PedidosYa, un cambio de tendencia que encuentra gran parte de su explicación en los costos extras que demanda la entrega por estas plataformas virtuales. 

La plataforma llegó a Junín en agosto de 2019, y desde entonces no paró de ganar usuarios, que se fidelizaron durante la pandemia. Treinta fueron los restaurantes que comenzaron a ofrecer sus productos desde el primer día a través de la aplicación, que prometía una gran oportunidad para mostrar los productos y alcanzar nuevos clientes. Sin embargo, hoy, la mayoría de los días no hay ningún local disponible para comprar comida, según pudo constatar Democracia. 

Marcos Maroscia, presidente de la Sociedad Comercio e Industria de Junín (SCIJ), afirmó a Democracia: “Lo principal es la comisión, que era del 20 al 40 por ciento, que lo absorbía el comercio. Ahora bajó, pero sigue siendo mucho y el comercio pierde rentabilidad. El otro problema son los pagos, que funcionan como una tarjeta de crédito, y se demora el pago. Lo positivo es que el cliente, desde un celular, hace la compra, y quizás de otro modo no lo haría”. 

“Muchos lo que hacen es estar en la aplicación, pero de 50 opciones que tiene el restaurante, aparecen tres o cuatro opciones, porque no les conviene vender por la aplicación.

Cuando llega el pedido, lo terminan vendiendo ellos, porque también está la opción de enviarlo con un delivery propio”, comentó.

“En Junín, por las distancias, es más negativa la parte económica, ya que se puede resolver tranquilamente con los delivery de la ciudad”, consideró. 

Causas

Las razones de esta disminución son diversas. Una de las principales causas es la coyuntura del país, que ha empeorado durante los últimos años, y que obliga a disminuir los costos, y tratar de mantener los precios accesibles para la gente. 

El elevado costo de comisiones que implica el uso de la plataforma es otro de los aspectos que más aleja a los gastronómicos de su uso. Muchos dueños de restaurantes aseguran que las comisiones que cobra PedidosYa son demasiado altas y que, en muchos casos, superan el 30% de la venta. Esto hace que muchos restaurantes prefieran ofrecer sus servicios de forma independiente y no tener que pagar estas comisiones.

En otros casos, los restaurantes que utilizan la plataforma terminan trasladando un incremento a sus productos para afrontar la comisión. Es decir, que publican precios más elevados que le permitan pagar el treinta por ciento de retribución a la plataforma, al cual además hay que agregarle el costo del mandado. Así, si se comparan los precios de algunos de los gastronómicos que se ofrecen, se encuentra que una hamburguesa clásica con fritas se vende a $1950 en la app, mientras que en el menú del local está a $1650.

Las heladerías, por su parte, que son actualmente los únicos servicios disponibles en PedidosYa en Junín, ofrecen un kilo de helado por ejemplo a $2400, mientras que, retirándolo en el local, cuesta $1800.

Otro motivo que influye en la disminución del uso de las apps de delivery es la dificultad para establecer una relación directa con los clientes. Los restaurantes que utilizan la plataforma no tienen acceso directo a los datos de contacto de los clientes, lo que les dificulta establecer una relación de fidelidad y ofrecer promociones y descuentos directos.

Parecería ser que es solo una buena oportunidad para los locales que recién arrancan, y que necesitan darse a conocer, en esos casos, publicar los productos en PedidosYa puede resultar la manera más rápida de empezar a competir y aprovechar una gran vidriera para darse a conocer.

Experiencia local

En Junín, además, hubo proyectos de aplicaciones locales, como el caso de PIDE, una plataforma que ha funcionado y prometía bajar las comisiones. Sin embargo, hoy ya no se encuentra disponible para poder realizar pedidos.

José Bruzzone, del restaurante Tancredo Luna, afirmó a este diario: “Nunca usé la aplicación, porque las comisiones siempre me parecieron leoninas. A veces te ofrecían tener dos cartas, cobrar 100 en tu negocio y en la carta que ofrece la aplicación cobrar 100 más la comisión, que llegó a ser de hasta el 30%, además de las demoras en la liquidación”.