En el distrito, con la temporada de verano en marcha, continúan descendiendo fuertemente los niveles de los espejos naturales, como la de Gómez y Mar Chiquita.
La sequía extrema que afecta a gran parte del país tuvo en los últimos días un impactante efecto al eliminar los cursos de agua del río Rojas y del Arroyo del Medio, cuyos cauces quedaron a la vista por la falta de agua.
En Junín, continúan descendiendo fuertemente los niveles de las lagunas, una situación que se viene agravando desde la primavera, estación en la que se registró el noviembre más cálido de la historia.
Además, se le suma que la Región viene atravesando el fenómeno climático denominado La Niña, el cual se caracteriza por la falta de lluvias respecto al promedio histórico.
El mismo ingresaría en una “etapa de transición” en el primer trimestre de 2023 hasta alcanzar “condiciones neutrales” y la normalización del régimen de lluvias en el Cono Sur, coincidieron entidades y especialistas. Si bien el sector agropecuario es quien más lo padece, la falta de precipitaciones está dejando serias secuelas en los ecosistemas locales y regionales.
Al respecto, el titular de Obras Públicas, Marcelo Balestrasse, informó a Democracia que el nivel de la Laguna de Gómez “está 40 centímetros por debajo del vertedero”, donde hay una compuerta abierta a la que “el agua no llega”, donde hay una abierta de estiaje (de limpieza), al igual que en El Carpincho, en el marco de un protocolo que se debe seguir hasta que lleguen las grandes lluvias.
En cuanto a la falta de agua de los ríos, las opiniones son diversas. Hay quienes adjudican la situación expresamente a un fenómeno natural, mientras que otros sostienen que también es responsabilidad del hombre por intervenir estos cauces naturales.
Al respecto, el ingeniero agrónomo y presidente de la Sociedad Rural de Rojas, Alberto del Solar Dorrego, explicó que en sus años de vida es la tercera vez que le toca ver una situación de estas características.
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