Con el correr de los años las necesidades de las personas van cambiando y la de guardar un auto en una vivienda pasó a un segundo plano.
Por ejemplo, en algunos barrios de Junín, como El Picaflor o Pueblo Nuevo, las tradicionales casas “chorizo” o “martillo” han ido mutando su conformación y las rampas para vehículos ya son parte de un pasado diferente.
Ya sea por querer agregar un ambiente o dormitorio; hacer una oficina, un local comercial, taller, espacio de trabajo o monoambiente habitacional para alquilar; o porque los vehículos son más grandes de los que se guardaban antiguamente (y no entran), algunos garajes en la Ciudad ya no se usan como tal.
Es por eso que la reconversión de cocheras ha crecido en Junín (una tendencia mundial) como un modo de hacer más provechoso aquellos inmuebles tradicionales.
Por ejemplo, dado que la oficina en el hogar se está convirtiendo cada vez más en una necesidad, el espacio para un área dedicada al trabajo online en la casa es uno de los que muchos buscan.
“Se adaptan a las necesidades actuales”
Al respecto, el presidente del Colegio de Martilleros de Junín, Daniel Di Palma, explicó a Democracia que “se ve una dinámica nueva en la incorporación de mejoras en propiedades existentes. Además, en algunas zonas que se ha desarrollado la tipología, las viviendas se han convertido en un objeto comercial”.
Y agregó: “Todo lo que es cochera, hoy se puede destinar a locales comerciales o exposición, siempre y cuando el código de habilitación permita la apertura y la habitación de los mismos. Hay una dinámica de transformación de inmuebles antiguos”.
Además, reconoció que “la demanda del mercado y las nuevas áreas comerciales hacen que se vea esa mutación y un cambio en la infraestructura urbana. Es un cambio producto de los cambios generales”.
“Hoy los inmuebles han quedado en las nuevas áreas comerciales o universitarias y lo que estaba destinado para vehículo hoy puede ser para monoambiente o un departamento”, aseguró Di Palma.
“Hay un cambio en la morfología de la ciudad y en la composición de las casas de corte antiguo en las que han cambiado los usos. Los propietarios modifican el objeto de la vivienda y adaptan a las necesidades actuales y al requerimiento del mercado”, concluyó.
También los sótanos o áticos
Es preciso destacar que los vecinos están en la búsqueda de poder ampliar la superficie habitable de sus casas para convertir los espacios no utilizados en áreas eficientes.
Desde un ático y un sótano olvidado, hasta la esquina del dormitorio, se puede convertir en un nuevo espacio para trabajo, descanso y ocio.
Pero para aquellos que buscan dar forma a una oficina, sala de estudio o lugar de trabajo en el hogar, el garaje ofrece una alternativa divertida y peculiar.
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