Mudarse sólo en Junín exige el desembolso inicial de alrededor de 500.000 pesos, entre gastos de inmobiliaria, transporte y equipamiento del nuevo hogar. El rubro de los electrodomésticos, junto con los gastos inmobiliarios, son los que mayores sumas exigen y, entre ambos, el monto supera los 300.000 pesos.
Muchos estudiantes y personas solas o en pareja emprenden el proyecto de mudarse solos, y los monoambientes, casas chicas e, incluso, habitaciones, son muy buscadas. De acuerdo al relevamiento realizado por Democracia en comercios locales, el cálculo obtenido a groso modo contempla, incluso, la compra de los elementos y utensilios básicos en el bazar.
El pago en cuotas, con los planes ahora 12 y ahora 24 o las promociones de tarjetas, y la financiación personalizada, son herramientas fundamentales para afrontar los gastos de comenzar una nueva etapa.
El alquiler
Si bien no es el gasto mayor, la elección del inmueble es un aspecto fundamental a tener en consideración, en un mercado signado por la escasa oferta, sobre todo de viviendas y departamentos chicos, ideales para una persona o una pareja.
“Cualquier monoambiente ronda entre los 25.000 y 30.000 pesos”, explicó Juan Manuel Bonanni a Democracia. Además, señaló lo que muchos inquilinos saben por experiencia, que “más comodidades o una mejor ubicación elevan el valor”. En dicho sentido, el martillero advirtió que muchos estudiantes también buscan dormitorios para vivir, ante la imposibilidad de afrontar los gastos fijos de un alquiler y mantenimiento de una casa o departamento.
En cuanto al estado del mercado inmobiliario, Bonanni explicó que “hay mucha demanda de todo tipo que no merma” y, se asume, esa es la principal causa de la escasa oferta y el aumento de los alquileres, un fenómeno que se observa en Junín hace muchos meses.
No obstante, a pesar de las dificultades que presenta el mercado, muchos jóvenes aún apuestan por el proyecto personal de mudarse solos y, según señaló el martillero, “la edad promedio es de 25 a 30 años, que generalmente buscan algo chico”. Además, la llegada de estudiantes universitarios de otras localidades también ensancha la demanda y Bonanni explicó que “son quienes más consultan por alquileres de inmuebles chicos”.
Por otro lado, quien se muda solo también debe atender a los costos iniciales y no sólo al precio del alquiler y otros gastos fijos. “El costo promedio para ingresar a una casa o departamento es equivalente a tres alquileres y medio”, explicó Bonanni. Por ende, en un inmueble que cuesta 30.000 pesos al mes, se debe contar con 105.000 pesos aproximadamente, que corresponden al mes de alquiler, mes de depósito y el 4% del total del contrato en honorarios.
Asimismo, para aligerar el impacto de dicho costo, y evitar un desembolso inicial demasiado cuantioso, el martillero destacó que su oficina ofrece la posibilidad de “hacer en cuotas el pago de honorarios”.
Los electrodomésticos para empezar
El equipamiento del hogar requiere de la compra de los electrodomésticos básicos de la línea blanca, y un desembolso inicial de, como mínimo, 250.000 pesos. De todos modos, los comercios consultados destacaron la afluencia de jóvenes que se mudan solos o en pareja y optan por los electrodomésticos básicos en vez de las compras de segunda mano.
En el caso de la heladera, Carlos Donatti, encargado de Bringeri, explicó a Democracia que “para un estudiante o una persona sola, parten de los 95.000 pesos”. La cocina, otro de los elementos indispensables en el hogar, no se consigue por menos de 47.000, y los modelos básicos cuestan hasta 51.000 pesos.
Además, si se desea agregar un lavarropas automático, Jorge Pereira, gerente de la sucursal local de Naldo Lombardi, señaló que el precio mínimo es de 47.000 pesos. Entre los electrodomésticos básicos también se destaca el microondas de 30 litros, cuyo precio oscila entre 27.000 y 32.000 pesos.
Por otro lado, un televisor de 32 pulgadas cuesta 46.000 pesos y el horno eléctrico, 18.000 pesos. El total, en ese caso, se elevaría a 280.000 pesos la cifra del gasto en electrodomésticos.
Cabe señalar que, en la búsqueda del equipamiento básico del hogar, los consumidores muestran tendencias claras. “Generalmente, quien viene hace un combo de lavarropas, cocina y heladera. Algunos agregan televisor y microondas”, explicó Carlos, de Bringeri, y destacó que los productos básicos de la línea blanca son los más vendidos.
Asimismo, en las cadenas locales observaron que son muchos los jóvenes que asisten para mudarse. “Por lo general vienen y abren su crédito personal”, explicó Jorge, de Naldo Lombardi, y coincidió con Carlos en que “buscan marcas básicas debido al costo de las marcas más conocidas”.
“El joven que equipa su casa para estudiar, vivir solo o con su pareja viene con otra mentalidad, porque busca un electrodoméstico para cambiar en pocos años”, agregaron desde Bringeri.
Respecto a las formas de pago, se trabaja fundamentalmente con crédito personal, tarjetas de crédito y formas de pago al contado. “El ahora 12 y ahora 24 ya no son más sin interés, por eso la gente joven paga de contado o busca abrir créditos personales”, señaló Carlos.
La mueblería, ineludible
Para quienes no heredan los muebles que tenían en su anterior casa, o bien anhelan renovar los de uso diario, el gasto en el rubro depende, fundamentalmente, del tipo de material y los tamaños elegidos. Al respecto, Horacio Bucalá, de la mueblería homónima, señaló que “el precio de un sommier de 1 plaza de calidad intermedia, durable, es de 48.000 pesos” y, en el caso de 2 plazas, es de 74.500 pesos. La mesa de luz que lo acompaña cuesta, como mínimo, 8000 pesos. Además, si la habitación no cuenta con placard, se necesitan al menos 38.000 pesos para hacerse de uno.
Por otro lado, en cuanto a la mesa con 4 sillas, Bucalá explicó que el modelo más económico es de caño, y se vende por 40.000 pesos. La compra promedio de una persona sola que equipa su nuevo hogar con lo básico sería de 134.000 pesos, aproximadamente.
Además, si se trata de una casa o departamento con living-comedor, agregar un sillón de 2 cuerpos de calidad media cuesta 80.000 pesos.
“Son precios de lista, para pagar en hasta 6 cuotas, y hay descuento del 15% por pago a contado”, señaló el comerciante, pero lamentó que “hubo una merma de ventas a gente de la zona” en los últimos meses.
No obstante, al igual que otros comerciantes, destacó que las ventas de los elementos básicos se mantienen, puesto que “la gente joven amuebla su casa de a poco, aunque no compra todo junto”.
Mínimo e indispensable
Equipar una casa o departamento implica también tener en cuenta los elementos de uso diario y, en caso de tener que comprarlos nuevos, en los bazares las opciones son múltiples. En diálogo con Democracia, Ana María Fiorentino, dueña de Dosmildos, explicó que “es relativo, depende del gusto de cada uno. Si alguien busca un plato económico consigue, si busca uno de 2000 pesos también”. Además, destacó que ello mismo sucede también con los demás utensilios de cocina, como los vasos y cubiertos.
Entre los modelos más comunes, cada plato de cerámica de color, de 21 centímetros de diámetro, cuesta 590 pesos; cada cubierto tramontina, 380 pesos, y cada vaso bombe de color, 350 pesos. En total, un juego de platos, cubiertos y vasos para 4 personas básico cuesta alrededor de 7000 pesos. Si se agregan tazas básicas, el monto alcanza los 9200 pesos.
Además, respecto a las ollas, Ana María explicó que “hay mucha variedad en tamaños y calidad”, el diámetro comprende desde los 16 centímetros hasta los 50, y los materiales también son varios. Entre las opciones disponibles, “de acero, aluminio, losada y hierro”, las más económicas son la sartén de cerámica y la cacerola con asas del mismo material, ambas de 20 centímetros. La primera se vende a 2590 pesos, y la segunda a 7000. Si se agrega una fuente para horno básica, de 2500 pesos y un bowl de 630 pesos, el total de la compra inicial en el bazar ronda en los 22.000 pesos aproximadamente. Es un gasto que, sin dudas, debe ser tomado en consideración.
Sin embargo, la comerciante explicó que “la gente joven compra cosas lindas y útiles, sobre todo de diseño”, por lo que los materiales como la porcelana y la cerámica son los que más se destacan, y los que más rápido se van de las góndolas. En cuanto a la clientela, detalló que asisten “parejas jóvenes, personas solas y estudiantes” que equipan su casa al mudarse.
El transporte
Por último, el gasto en el transporte de los bienes personales también se suma a la extensa lista de los costos iniciales para mudarse solo. Desde Fletes y Mudanzas Franco, explicaron a Democracia que, si bien “los precios varían mucho y no hay dos mudanzas que tengan el mismo valor”, el estimado de un traslado chico, para una persona o una pareja, es de 10.000 pesos, e incluye el transporte de “los muebles y electrodomésticos esenciales”, tales como la cama, mesa de luz, heladera, lavarropas, un juego de living, mesa y sillas.
Además, explicó que “el precio cambia si hay que subir escaleras” y que el costo es aún mayor si se trata de un estudiante o una pareja que tiene sus pertenencias en una localidad vecina. “Hacemos mudanzas a todos los puntos del país”, señalaron, y detallaron que para recorrer los 80 kilómetros que separan a Bragado de Junín, la mudanza cuesta entre 18.000 y 20.000.
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