En medio de la crisis económica, aun cuando desde el gobierno nacional destacan los índices de crecimiento y recuperación del empleo, en la Región advierten que el mercado laboral continúa atravesando un momento de incertidumbre.
Lejos de los principales centros económicos y financieros del país, referentes del mundo del comercio y la industria del noroeste bonaerense se mantienen en estado de alarma, por un mercado de trabajo que no recupera su dinámica, luego de los dos años de pandemia de Covid-19 y en pleno tiempo de indicadores macroeconómicos adversos.
Del panorama que describen directivos de empresas de la zona y representantes de las cámaras comerciales se desprende un escenario afectado por factores negativos que se replican en las distintas ciudades: plantas laborales que mantienen un número estable -los nuevos ingresos, por lo general, vienen a cubrir vacantes por salidas-; jóvenes con intenciones de ingresar al mercado laboral, pero no lo consiguen; y dificultad de las empresas para cubrir puestos que requieren de cierta calificación de la mano de obra.
En tal sentido, el concejal Juan Fiorini, titular de Trabajum, explicó a Democracia que se vive "una época de cambio en lo que respecta a las búsquedas laborales, algo que, por supuesto, no atañe sólo a Junín, sino que es un fenómeno que se da a nivel país y también a escala global, a partir de los avances de la tecnología y los cambios culturales en la sociedad".
"Estamos observando una mayor rotación de personal que en años anteriores, mismas empresas suelen repetir sus búsquedas con poco lapso de tiempo, lo que indica que la oferta no fue satisfecha", advirtió Fiorini, en base a los datos registrados por los movimientos de búsqueda de Trabajum.
En la misma línea, señaló que "continúan las dificultades para encontrar algunos oficios y profesionales específicos", que en muchos casos "prefieren trabajar de manera independiente".
Por otro lado, Fiorini también reveló que se vive un tiempo de baja de ofertas laborales, lo que indicaría que las empresas no están en condiciones de ampliar sus planteles.
"Analizando la cantidad de ofertas de los últimos tres meses en nuestro portal de empleo, vemos que la cantidad de publicaciones fue muy baja en el mes de mayo, pero tuvo un crecimiento de 50% en junio, cantidad que se mantuvo con una pequeña variación en el mes de julio", precisó.
Al momento de detallar los rubros más solicitados, especificó que "la mayor cantidad de ofertas está centrada en puestos administrativos o de comercio, que abarcan entre ambas categorías el 35% de las búsquedas". "A esto, le siguen los reclutamientos de personal para funciones de ventas, oficios y tecnología, que alcanzan un 22% de las publicaciones", informó.
En la Sociedad Comercio e Industria comparten la percepción y reafirman que la pérdida del poder adquisitivo del salario, como consecuencia de la inflación, volvió a las ofertas laborales en el sector poco atractivas para las personas que buscan trabajo.
"Hoy las empresas no están tomando gente, no agregan empleados al plantel, los movimientos que hay tienen que ver más por recambio de personal, cuando alguien se va. En líneas generales, el número de empleados se mantiene y en algunos casos se achica", aseguró a Democracia el presidente de la institución, Marcos Maroscia.
Por otro lado, el directivo de Comercio e Industria aclaró que, en algunos rubros de cierta complejidad, "no hay mano de obra calificadas, es decir, hay puestos vacantes, pero no quien los cubra".
En cuanto al sector comercial, Maroscia lamentó que "por la inflación que hay, muchas veces a los jóvenes no les rinde trabajar ocho horas por el importe del sueldo que se puede pagar, por lo que muchos buscan alternativas", como sumarse a la empresa familiar -en los casos en que exista- o probar suerte con pequeños emprendimientos independientes.
En el municipio, por su parte, la visión general sobre la problemática encuentra puntos de contacto con la del sector privado, aunque difieren en cuanto a la percepción de los movimientos generados tanto desde el lado de los empleadores como de la fuerza laboral para dinamizar el mercado.
De esta manera, en la Oficina de Empleo informaron a Democracia que se registra "un promedio de 35 a 40 búsquedas mensuales", es decir, empresas que recurren al servicio del área para incorporar personal.
Según precisó su titular, Sergio Pérez Volpin, "las búsquedas son variadas, desde oficios y también apuntan a lo que denominamos nuevos empleos, que tienen que ver con la Economía del Conocimiento". En este último caso, el funcionario admitió que "hay búsquedas, pero no muchas, porque claramente el mercado laboral es muy exigente en este punto y no se logra cubrir la totalidad de las vacantes".
Independientemente del contexto nacional, el gobierno local aseguró que el movimiento de la Oficina de Empleo "creció exponencialmente" en los últimos años, al punto de pasar de 5 búsquedas mensuales a las 40 de la actualidad, y se lograron "varias inserciones, lo que indica que el servicio que se brinda es eficiente".
Al momento de analizar las situaciones de desencuentro entre quienes solicitan empleo y las empresas, Pérez Volpin sostuvo que se trata de un proceso complejo, con anclaje en la realidad económica que vive el país, y que se explica en un conflicto de intereses de ambas partes.
"Se da un fenómeno complicado, porque búsquedas laborales hay, pero es cierto que muchas veces el empresario no encuentra lo que necesita", reflexionó el responsable de la Oficina.
Entre las dificultades que suele mencionar el empleador, según relató Pérez Volpin, sobresalen "la falta de experticia y la falta de compromiso, es decir, que no se encuentran personas que se pongan la camiseta de la empresa".
No obstante, desde la óptica del trabajador, la Oficina de Empleo también registra una respuesta a dicho plateo: "Muchas veces, los salarios que se ofrecen no son los suficientemente atractivos para generar ese compromiso demandado". En cualquier caso, Pérez Volpin dejó en claro que "hay muchas personas en Junín con ganas de trabajar y crecer, tanto jóvenes como gente más grande".
¿Qué ocurre en la Región?
El diagnóstico no difiere demasiado a medida que la lupa se posa sobre ciudades aledañas a Junín. Desde el Nucleamiento Empresarial del Noroeste aseguraron a Democracia que "a grandes rasgos, no hay modificaciones en el mercado laboral" con referencia a los últimos meses.
En medio de datos desalentadores, la entidad aclaró que, así como no se destaca un crecimiento en el volumen de altas, tampoco las bajas son significativas. "Puede haber alguna perdida de puesto de trabajo, pero en la región no es representativa", confió a este diario Carolina Olguín, presidenta del Nucleamiento.
No obstante, insistió en que hay elementos propios de la política económica nacional que obstaculizan todo pronóstico de recuperación a corto plazo.
"La presión impositiva sigue siendo muy alta y permanentemente sigue creciendo, por lo tanto, hay una caída en la calidad de los puestos de trabajo, a raíz de los altos costos de los mismos. El costo de tener un empleado hace que sea más difícil a la hora de tener una decisión de incorporar un personal", sostuvo Olguín.
En Lincoln, el Centro Unión Comercio e Industrias coincide en que la columna de los costos laborales presiona al balance de la actividad económica local hacia un saldo negativo.
"Lo que observamos en nuestro distrito es que la actividad económica en el agro es un importante dinamizador del trabajo, pero en lo que tiene que ver con el comercio, no hay indicadores de mejora", afirmó Carolina Rojo, titular de la entidad linqueña.
"La situación económica general desalienta al empresario o emprendedor a tomar personal y menos aún con los costos laborales, que desde hace mucho tiempo vienen afectando al sector. El comerciante se muestra hoy reticente a tomar un empleado, por la inestabilidad que presenta hoy la economía del país", agregó.
Con respecto a las expectativas de ingreso al mercado de trabajo, Rojo subrayó que "hay mucha gente que busca empleo y, día a día, se observan chicos jóvenes que buscan una oportunidad laboral". Asimismo, la máxima representante de la Cámara destacó que "hay acompañamiento del municipio para impulsar el primer empleo en la juventud".
En Chacabuco, desde la Cámara de Comercio e Industria recordaron que funciona una bolsa de trabajo auspiciada por la institución, con más de 300 currículums aguardando por una oportunidad de trabajo.
"En la Cámara tenemos unas 300 solicitudes, pero la realidad es que las empresas muy esporádicamente piden referencias. Con lo que ocurrió en las últimas semanas, a partir de la corrida bancaria y la escasez de ciertos materiales e insumos, la actividad económica está bastante quieta y todo indica que seguirá así durante lo que resta del invierno", expresó a Democracia Andrés Capuzzi, presidente de la entidad.
En sintonía con sus pares de la Región, reconoció que la realidad del comercio y la industria en la comuna es acuciante, más allá de que "algunos rubros pueden andar un poco mejor que otros, pero no más que eso".
También resaltó que "hay jóvenes con interés en entrar al mercado laboral", pero advirtió que "no hay especialización, a empresas de cierto nivel de complejidad, como pueden ser las metalúrgicas, se les hace difícil encontrar personal capacitado".
"La situación es grave, porque no hay puestos laborales y cuando se busca a alguien capacitado, no hay. Va a ser complicado para todos, para las empresas incorporar, pero también para quienes buscan trabajo, cada se demanda mayor calificación", lamentó. Y redondeó: "Quien no se capacita, no consigue trabajo o, con la situación actual, termina accediendo a puestos laborales precarios".
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