Frente de todos
En sintonía con la crisis política en el Gobierno nacional, toma temperatura la interna en el Frente de Todos de Junín.
DIFERENCIAS CADA VEZ MÁS VISIBLES

La crisis interna del Gobierno tensiona la relación del Frente de Todos en Junín

Si bien no hay una correlación directa entre la situación nacional y local, las distintas lecturas sobre el acuerdo con el FMI y los chispazos entre el cristinismo y el albertismo recalientan la discusión. El debate por las “propuestas enlatadas” desde el Conurbano.

La fractura en el Gobierno nacional tensiona aún más la relación de las distintas fuerzas que conforman el Frente de Todos en Junín.

Y si bien en el terreno local no hay un impacto directo de la flamígera interna que mantienen el kirchnerismo y el albertismo, prevalecen, con todo, distintas lecturas sobre la crisis política, el acuerdo con el FMI y la estrategia electoral de cara a 2023, que profundizan las divisiones en el espacio. 

En este escenario, toman temperatura a su vez viejas rencillas del peronismo juninense, como, por ejemplo, la intromisión de los “caciques” de la Cuarta Sección en las decisiones locales y las “propuestas enlatadas” que bajan del conurbano bonaerense con la intención de replicarse en las ciudades de la región, que tienen, en rigor, realidades y problemáticas muy disímiles a las del Conurbano. 

Si bien es cierto que aún no hay en el terruño señales sobre la presencia de sectores vinculados al “albertismo” -la mayor parte del peronismo local es afín a Cristina Kirchner-, el debate estriba sobre quién representa más cabalmente al kirchnerismo, si La Cámpora u otros sectores. 

Hacia una propuesta local

“Queremos que el peronismo de Junín sea verdaderamente de Junín”, punzó un concejal del Frente de Todos, en referencia a los ordenamientos internos que muchas veces se bajan desde estamentos superiores, pero que muchas veces desconocen las particularidades locales o regionales. “Queremos construir una propuesta que contemple las oportunidades locales. No estamos dispuestos a seguir bajando propuestas enlatadas que vienen de otras latitudes. No queremos militar en campaña lo que se diseña desde el Conurbano, porque en Junín tenemos agro, industrias, educación, servicios; hay que diseñar una propuesta local”, advirtió el edil a este diario. 

“Como ocurrió siempre, la situación política que se da arriba, repercute abajo”, señaló el dirigente, aunque diferenció ambas realidades. “Si en Junín aún no hay una fractura tan grande, tiene que ver con el grado de conciencia de las bases, que es más alto, más responsable que el de los dirigentes nacionales. Hay más conciencia de lo que está en juego, quizás por estar más cerca de la gente”, analizó. 

Con respecto a un presunto corrimiento del sector de Traverso del kirchnerismo duro (el sector no participó de la elección del consejo del Partido Justicialista, que conduce el camporista Andrés Merani), un referente de ese espacio respondió en diálogo con Democracia: “¿Quién representa al kirchnerismo duro en Junín? No creo que La Cámpora sea lo más fiel al kirchnerismo, en todo caso sería un kirchnerismo por portación de apellido. Ideológicamente no es necesario compartir todo con La Cámpora para seguir siendo kirchnerista. De hecho, la historia del kirchnerismo contradice muchas de las posiciones que hoy tiene La Cámpora, como el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, crecimiento económico con desarrollo. Néstor sabía que no se puede repartir lo que no se genera, primero hay que generar la torta”. 

Y amplió: “No entendemos la pelea entre Cristina y Alberto, tiene que procesarse de otra manera. Está la necesidad de que se pongan de acuerdo, entonces siempre hay una chance de que eso ocurra. La política está hoy encarajinando la economía, y sobre esa crisis crecen candidatos como Milei”. 

“No nos fuimos ni del peronismo ni del kirchnerismo”, remarcó el dirigente, que también mostró diferencias con el campamento camporista al no reclamar la renuncia del ministro de Economía, Martín Guzmán. “Es lo que hay”, soltó. 

“Van a tener que fumar la pipa de la paz”

“Se va a tener que frenar la pelea, Cristina no va a volver a estar como los chanchos con Alberto, pero hay que gobernar. Y gobernar en medio de una interna tan fuerte es complicado, y perjudica a todos. La realidad es que la gente va a votar a Cambiemos o a Milei, y eso nos termina perjudicando a todos”, afirmó a Democracia un concejal que se mantiene equidistante tanto de La Cámpora como de Unidad Ciudadana. “Van a tener que fumar la pipa de la paz”, se esperanzó. 

“Cristina tensiona y pide algunos cambios en el Gabinete nacional. Pero las tensiones que podemos tener en Junín no están relacionadas directamente con la interna nacional, sino que son disputas anteriores a esta pelea. Creo que no fue una decisión correcta no participar de la elección del PJ local”, afirmó. 

“Sergio Massa está cerca de Cristina, en nuestra ciudad no hay problemas con el Frente Renovador”, señaló. 

Sobre la imagen de La Cámpora en Junín, el edil afirmó: “De cara a 2023 no se puede obviar el armado de La Cámpora, aunque esto no implique necesariamente que presenten candidatos”. 

Con un ojo en las elecciones del año que viene, hay cierto consenso dentro del Frente de Todos en que la dirigente mejor posicionada es la actual diputada provincial por el Frente Renovador Valeria Arata, que deberá afrontar, sin embargo, no pocas resistencias internas. “Tiene que tener ganas, vocación, y la realidad es que en este escenario nadie va a tener muchas ganas”, se sinceró un dirigente local del peronismo.

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