Ubicado en el Cuartel Segundo, del barrio Los Totoreros, Silvina Arán tuvo la iniciativa de abrir un espacio para los chicos del sector hace ocho años. Así nació el Comedor Los Totoreros para darles la merienda y comida a más de 35 chicos.
Según Silvina, actualmente afrontan dificultades para conseguir donaciones y por ello solo ofrecen la merienda.
“No tenemos carne, ni puré de tomate. Cuesta mucho conseguir los alimentos. Estamos complicados”, asegura.
La historia del comedor nació en un galpón de chapa y piso de tierra, sin agua y sin servicios. Hoy, gracias a los voluntarios y colaboradores que acompañan, el comedor cuenta con los servicios básicos y el galpón se convirtió en un salón, aunque siempre necesita muchísima colaboración.
Necesidades
Las necesidades de las familias del barrio movilizan a Silvina y a los voluntarios que tratan de conseguir lo que haga falta, desde leche o azúcar hasta un colchón o una cocina.
La cadena de ayuda se hace extensa, especialmente vía Facebook (Comedor Los Totoreros).
“Siempre agradezco la ayuda de Esmeralda Piedrabuena, que me ayuda desde que empecé hace ocho años. Trae verduras y cosas para el comedor”.
Los interesados en colaborar pueden también contactarse al 236 4341507.
Mate solidario
A través de Facebook, desde el comedor agradecieron la iniciativa de Matías Albornoz, un juninense que vive en Ascensión y vende mates con su hermano, y por cada mate vendido dona un litro de leche al comedor.
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