-Se reúne ahora la mesa de salud, ¿le preocupa el incremento de los casos?
-Si preocupa, pero no hay mucho margen para retroceder. La vacuna nos dio muchas más libertades, pero la pandemia sigue, y quienes tienen factores de riesgo siguen estando. Reitero, creo que no hay margen para dar marcha atrás y se viene la temporada de verano. La rama económica se ha recuperado bastante, pero creo que vamos a tener que enfatizar los cuidados e incentivar la vacunación. Por suerte, hay vacunas, falta la decisión de aplicarlas.
-En plano local, ¿cómo ve a la ciudad en el futuro?
-Hace tiempo que vengo hablando de un proyecto de ciudad que enamore. Yo no veo que en Junín se intente ese proyecto, algo que nos motive a todos independientemente de las pertenencias políticas. No puedo creer que no nos podamos poner de acuerdo entre las instituciones y el espacio político en diez o doce puntos importantes que queramos todos como eje para Junín en la educación, la cultura, el turismo, la seguridad, el perfil productivo. Tenemos potencial, pero no tenemos enfoque y cada uno propone algo contrario a lo que el otro dice. Es lo que percibe la sociedad, y por eso esta tan apática a los debates políticos. Muchas veces, y espero que eso cambie, se tocan temas nacionales en el Concejo. Digo: tenemos tanto para trabajar en Junín y desperdiciamos tiempo en temas ajenos o lejanos a nosotros.
-¿Qué lectura haces con respecto a las tensiones internas que se están dando tanto en el oficialismo como en la oposición?
-Por un lado, no me sorprende que eso suceda, es normal en la política. Yo no voy a opinar de Juntos porque no es el lugar donde tengo pertenencia ideológica, pero si puedo hablar de mi espacio político y la verdad lo que me molesta es que se esté dando esa discusión por Twitter o por indirectas en notas periodísticas. Esas discusiones se deben dar, pero en otro lado porque si ya estamos lejos de la sociedad (que nos da la espalda electoralmente) este tipo de cuestiones nos pone mucho más lejos. Hay determinados dirigentes que le dan un valor superlativo al Concejo Deliberante. Yo no menosprecio su función. La sociedad no los valora de igual manera, no les interesa. De hecho, hay que ver las sesiones públicas en las que la sociedad participa en lo fiscal impositivo porque es donde nos interesa por el bolsillo, pero el resto no hay participación. Es un reflejo también de cuál es la valoración que se tiene por los concejales y el Concejo.
-En la historia reciente, ¿hubo algún momento que fue diferente a la actualidad en donde hubo mayor debate o donde estos sectores se sintieron más incluidos?
-La experiencia es muy nueva, el Frente de Todos se formó electoralmente en el 2019 e incluyó sectores que habían sido antagónicos al gobierno de Cristina por lo que hay que saber llevar adelante y saber convivir. Ahora comienzan a verse algunas situaciones que tienden a disolver el espacio o a atomizarlo un poco más y la verdad las elecciones nos demuestra que debemos contener, no nos sobra nada porque fue mucho lo que pasó en esta última elección.
-Se percibe verticalismo por parte de los dos frentes. ¿Hay como un cierto temor a plantear una mirada distinta como por ejemplo el caso de la UP13?
-Hay otro punto donde tendría que haber un clamor social y todas las instituciones deberíamos estar al frente. Lo digo cuando, desde el otro lado, hace muchos años acompañamos a Abel Miguel con la CGT y todas instituciones para hablar con el ministro de ese entonces, Casal para pedirle que no hicieran lo que iba a ser la alcaldía y terminó siendo una cárcel. Creo que en ese tipo de situaciones primero hay que tener información clara, ahora si es para ampliar desde ya, independientemente de mi ideología, Junín no puede tener más cárceles porque todos sabemos lo que eso produce las consecuencias.
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