En una recorrida por la zona céntrica de Junín, Democracia dialogó con los comerciantes que manifestaron que en este nuevo confinamiento bajaron las ventas y hubo muy poco movimiento de personas.
Norma, de la juguetería Reina Batata, explicó que “se notaron mucho las restricciones porque no circula gente. En relación a las entregas hubo muy pocas, más allá de que la gente pregunte. Vender un juguete por internet es casi imposible y en la calle no hay movimiento. Hoy hice una venta en todo el día, pero tenemos que seguir cuidándonos entre todos”.
En la misma línea, Andrea, de Calzados París, advirtió: “No hay nada de movimiento. La gente sale más bien a caminar o pasear que a comprar. Por lo menos en nuestro rubro, por internet no hay consultas. Trabajar desde la puerta es complicado para nuestro rubro, porque la gente se tiene que probar el calzado y es diferente a la indumentaria o a los electrodomésticos”.
Sofía, del local Salma, aseguró que “se está moviendo la venta solamente por las redes sociales, ya que en la calle no anda nadie, y hacemos envíos, que tampoco son muchos. Por ejemplo en Chacabuco este mismo comercio tiene más demanda para envíos a domicilios”.
Chiqui, de la perfumería y marroquinería Essences sostuvo que tras abrir en la mañana, “recién a las 16 horas tuvimos la primera venta del día. Justo pasó una señora, que es clienta, vio una cartera en la vidriera, preguntó precio y se la llevó. Fue atendida desde la puerta”.
Y manifestó que “así no se resiste más. Encima la gente no anda en la calle porque tiene muchísimo miedo con justa razón y yo me incluyo. Si vas a la calle a comprar, te dirigís a un lugar puntual y te volvés y no te quedás dando vueltas mirando vidriera, esa es la realidad”.
Por último, María, de Casa Luis destacó: “Estamos abiertos con atención al público desde la puerta y después tenemos las ventas online que están funcionando. Piden a través de internet, lo retiran en el local o se lo llevamos a la casa. Esta es una posibilidad de venta que ayuda al comercio”.
COMENTARIOS