En medio de la polémica por la construcción del llamado Balcón del Sol en un sector del Parque Natural Laguna de Gómez –que apunta a potenciar el turismo- y las denuncias de los ambientalistas, que ven peligrar la vida silvestre, se manifestó la profesora de biología y referente del Museo Legado del Salado, Marcela Torreblanca.
“Si se construye, entonces que se respeten los 500 metros y que no se fumiguen los campos aledaños. Es un reglamento que deben cumplir todos y también se aplica al balneario municipal. Así que a 500 metros del camino Costero no se debe sembrar soja”, afirmó.
Y pidió que los funcionarios “se informen y hagan -como corresponde- el análisis de impacto. No es lo mismo un sendero de pescadores que rellenar y pasar la aplanadora a toda una península que era parte del humedal y corresponde a la provincia de Buenos Aires como toda orilla de ríos y lagunas que ocupan más de un partido”.
En este sentido, Perla Casella, subsecretaria de Medio Ambiente del municipio, afirmó que el lugar elegido no es una reserva natural ni está protegido por ninguna norma o legislación.
En diálogo con TeleJunín Noticias, la funcionaria petrequista insistió en que, pese a que el Camino Costero es un sector con escasa intervención en la naturaleza, el Balcón apunta a generar un espacio atractivo para el turismo y los visitantes.
“No es una reserva, no está previsto como reserva sino que está dentro de la franja permitida, un área de sacrificio para nuestra explotación turística”, manifestó.
Y aclaró que no habrá una construcción, aunque recordó que el sector ya estaba “impactado”, ya que van muchos pescadores y además a metros de allí está la escuela de kitesurf, y hay una bajada de lanchas, con embarcaciones a motor, es decir, que es un lugar que ya cuenta con un impacto. “Eso es lo que se analizó desde el municipio”, sostuvo.
Y explicó que “si bien el nombre es Parque Natural, no es una reserva natural, porque eso implicaría que no se puedan hacer muchas acciones que hoy se llevan a cabo”, aclaró.
Críticas
Torreblanca confirmó que ambientalistas y vecinos se oponen a la construcción del Balcón del Sol sobre una zona silvestre. “La llegada de máquinas aplanadoras de tierra nos tomó por sorpresa, ya que lo hicieron antes de consultar al OPDS, que se encarga de los espacios protegidos”.
Explicó que mediante un proyecto de ordenanza “se busca para esa zona la sanción de una norma para proteger aves y establecer un acceso ordenado al turismo”.
Al respecto, reflexionó que “la gente necesita aprender que tener un pastizal o espinillos o juncales no es mugre, sino que allí viven aves, reptiles”. Y consideró que “es necesario tener un guardaparques y normas para preservar el lugar”.
Torreblanca señaló que “debe haber un guardaparques y programarse visitas guiadas” con normas de protección del humedal.
La profesora, que además creó el Museo Legado del Salado en el que se exhiben los restos fósiles de más de 12 mil años hallados en la ribera del río Salado, sostuvo que la construcción que prevé el municipio "puede hacer perder la parte agreste, la que reúne gran diversidad de flora y fauna y que la hace única en el país", y repudió la posibilidad de que se permita el ingreso de turistas con automóviles y motos.
Un grupo de fotógrafos que se ocupan de registrar la biodiversidad de la zona también expresaron su repudio al Balcón del Sol.
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