Todos los merenderos y comedores agradecen a los distintos colaboradores, vecinos o empresas que acercan sus donaciones para ayudar.
Gabriela Fioritti, una de las voluntarias en distintos barrios, aseguró que antes del decreto de cuarentena, buscaba las donaciones y las llevaba personalmente. Ahora tuvo que reacomodar todo.
“Hoy me manejo con un chico que tiene permiso para trasladar alimentos y Manuel llovet que se ocupa de todos los lugares. Y enseguida nos llaman y buscamos la forma de solucionarlo”, cuenta.
“Hay muchas familias que viven día a día, en casas de familia y la gran mayoría sin trabajo. Es terrible la situación”, relata.
"Es muy importante que se sumen en este momento redifícil. Es muy complicado. Donen siempre y en este momento más", pidió.
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