El ministro de Transporte de la Nación, Mario Meoni, y el presidente de la Cooperativa de trabajo Talleres Junín (Coottaj), Pedro Rodríguez, se reunieron en el Museo Nacional Ferroviario Raúl Scalabrini Ortiz de la Ciudad de Buenos Aires, donde acordaron acondicionar algunas unidades ferroviarias depositadas en ese lugar, que serán trasladadas a nuestra ciudad para ser intervenidas y ponerlas en condiciones para que vuelvan a los rieles.
Durante la jornada se realizó una recorrida por las instalaciones del Museo a las que acudieron, también, el subsecretario de transporte ferroviario Agustín Special, el presidente de Trenes Argentinos, Martín Marinucci, el titular de Desarrollo del Capital Humano Ferroviario (Decahf) Damián Contreras, y el secretario general de la Unión Ferroviaria, Sergio Sasia, además del anfitrión y director del Museo Nacional Ferroviario Santiago Basigalupo.
El plan incluye unos nueve vagones históricos que serán reparados por la Cooperativa de nuestra ciudad. Entre ellos aparece el que usó Juan Pablo II, cuando vino a Argentina en junio de 1982, para trasladarse de Moreno hasta Luján.
El objetivo que se busca desde Trenes Argentinos es generar un tren histórico itinerante que recorra el país y fortalecer el Museo Ferroviario que se encuentra ubicado en el barrio de Retiro.
“Estamos a la espera de la orden de compra, para la reparación de nueve coches históricos. Son coches oficiales de madera que necesitan una reparación general, y para lo que se necesita mano de obra especializada que nosotros la tenemos”, expresó Rodríguez. “Significa algo fundamental histórico, más allá del trabajo en sí”, completó.
“Estuvimos con Daniel Bispo, presidente del Belgrano Cargas, quien nos pidió una serie de detalles y nos dijo que contratará nuestra mano de obra para que el trabajo de la Cooperativa sea continuo”, señaló.
El proyecto también contempla la reparación del coche que utilizó el Príncipe de Gales, Eduardo de Windsor, en el año 1925 y que justamente paró en Junín, cuando se dirigía a Chile. Ese vagón fue vandalizado casi íntegramente.
Además, se restaurará el coche-bar que corría en el ramal a Mendoza y un coche-cine en el “Expreso Arrayanes”, y que fueron orgullos de la industria ferroviaria.
El de Juan Pablo II, antes fue utilizado por Juan Domingo Perón durante la década del 50 y fue comprado a Holanda. El Papa viajó en el coche el 11 de julio de 1982 desde Moreno hacia Luján, donde ofició una misa para más de 700.000 personas. Luego regresó a Capital, en esa formación.
“Hoy estamos saliendo del desastre de estos últimos cuatro años y las perspectivas son completamente distintas. Acá se nota la mano del ministro (Mario Meoni) quien en su momento se comprometió a darnos trabajo, y estamos agradecidos.”, finalizó Rodríguez.
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