En el barrio La Celeste quieren que se cumpla con los compromisos asumidos para mejorar su infraestructura. De todos, el más esperado es la pavimentación de la calle San Lorenzo. Aunque hay más.
“El barrio sigue igual, son pocas las mejoras que se han hecho”, asegura el presidente de la sociedad de fomento, Ariel Tejedor, para luego ampliar: “Tenemos algunas promesas pero solamente se han arreglado algunas calles. Son muchos los problemas que tenemos porque estamos lejos de la zona céntrica y es como que no se nos presta mucha atención”.
Las calles
Delimitado por las vías del ferrocarril, la calle Chile, la avenida Pastor Bauman y la Ruta 188, La Celeste es un vecindario que en su geografía cuenta con más de cien hectáreas y apenas diez cuadras con pavimento.
“Las calles de tierra, medianamente, se mantienen, pero están muy deterioradas, de acuerdo a las lluvias que caen”, afirma Tejedor.
Aquí, las dificultades más grandes se dan en la calle San Lorenzo, desde Pastor Bauman hasta Chile. “Tenemos una promesa hecha de que se va a asfaltar, eso sería muy importante porque terminaríamos con un problema muy grande para este sector, porque ahí tenemos rotura de calles, casas a las que se les mete agua, así que sería muy bueno que cumplan con lo que nos dijeron”.
Días pasados, desde el municipio informaron a este diario que en poco tiempo saldría la licitación para esa obra.
Otras arterias que se ven muy comprometidas cuando llueve son Payán y Chávez, ambas desde Pastor Bauman hasta Chile. El presidente de la sociedad de fomento asegura que allí “se hacen grandes zanjones, se destruye cuando llueve”.
Infraestructura
Aquí, los servicios básicos están presentes en casi todo el vecindario. Solamente resta colocar el gas en una cuadra de la calle Bolivia, entre San Lorenzo y Battilana.
En cuanto al gas natural, desde la sociedad de fomento aseveran que muchos residentes quieren conectarlo, pero para eso deben esperar hasta que Grupo Servicios Junín defina un proyecto de extensión de la red: “Hay vecinos que quieren el servicio y están dispuesto a pagarlo a través de un consorcio, como se hizo en una parte de La Celeste, con una colaboración de la municipalidad”.
Finalmente, el alumbrado público es otro de los déficits de La Celeste, según lo que expresa Tejedor: “Tenemos algunos sectores oscuros, estamos tratando de ver si vienen a resolverlo. Me prometieron que van a venir a revisar y poner lámparas donde haga falta. Hay muchas que están rotas y hay calles a las que les haría falta la colocación de luminarias. Queremos resolverlo porque todos sabemos que, cuanto más oscuro está, más peligro hay”.
Seguridad y tránsito
El dirigente fomentista relaciona la deficiencia en la iluminación del sector con el riesgo por la inseguridad. No obstante, remarca que una situación particular hace que se vean beneficiados en este tema: “En el barrio La Celeste tenemos una a favor, y es que hay un destacamento de la Policía Local en el velódromo y, como está el semáforo en Bauman y de la Sota, los patrulleros buscan evitarlo y pasan por el barrio, entonces gracias a eso recorren esta zona. Y al haber presencia policial, tenemos pocos hechos de inseguridad”.
Por último, la circulación vehicular es otro tema de preocupación para los vecinos de esta zona.
“Es mucho el tránsito que hay –señala Tejedor–, en la Escuela 21 hay jardín, primario y secundario, enfrente está la Iglesia, por suerte logramos que pongan un reductor de velocidad allí porque era un peligro constante. Pero el tráfico es difícil, en Intendente de la Sota no respetan ningún semáforo”.
La avenida está más sobrecargada a partir de esta semana, con la llegada del transporte público de pasajeros. Sobre esto, Tejedor concluye: “Veo que suele haber mucha gente esperándolo en las paradas, así que ojalá que sirva para la comunidad”.
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