Un grupo de voluntarios jóvenes comenzó hace cinco años con un proyecto solidario que día a día crece y se afianza en la ciudad y la zona, con distintas tareas que buscan el bienestar de quienes más lo necesitan.
Pablo Rodríguez es uno de los fundadores de esta agrupación que nació un 16 septiembre, a raíz de la situación familiar que a través de una voluntaria, participaron de la sala de juegos del Hospital Garrahan.
“Vimos que se hacía mucho por los chicos desde el hospital y nosotros como sociedad no devolvíamos todo lo que el hospital brindaba a los chicos”, reflexiona Pablo sobre una especie de click que volvió aquella experiencia en algo mucho más grande.
“El amor , la entrega, la dedicación que entregan es mucho más de lo que vale su sueldo. El Garrahan hace una tarea social muy grande que no se ve en todos los hospitales y quisimos retribuir a esa sala de juegos con algo. Ese lugar donde los chicos cortaban con el tratamiento y volvían a ser niños, a jugar, a compartir, a distraerse un poco y también a los papás”.
Así comenzaron a organizarse para llevar juguetes al Garraham. Y así comenzó la historia de Don Ito que hoy forma parte de la organización Techo y se encuentra en contacto permanente con la Red Solidaria, de Juan Carr.
Camino de crecimiento
A medida que el tiempo pasaba, los voluntarios comenzaron a sumar actividades y eso los llevó hasta el Hospital Interzonal donde entregaron juguetes en el área de pediatría.
“Allí conocimos el caso de una familia que necesitaba ayuda económica y desde Don Ito organizamos los carnavales solidarios por primera vez y después de 8 años que no se hacían en Morse”.
Los voluntarios llevaron una comparsa de niños de un jardín de infantes y lograron ayudar económicamente a esa familia. De esa forma surgió Don Ito, que luego de esas actividades como agrupación se dieron cuenta de que podían hacer mucho más.
“De causalidad, uno de los chicos de Red Solidaria Chacabuco vio nuestra actividad y nos llamó para que nos incorporemos al programa Mil ciudades solidarias”.
Comenzaron con el programa “Tu cuadradito abriga”, que ya va por su cuarta edición, en el armado de mantas tejidas para donar.
Haber entrado en este programa les permitió estar en una red de trabajo social, comunitario y solidario que poco a poco iba abriendo puertas a otras tareas.
Trabajo con Techo
Participaron de numerosos encuentros de Cátedra Solidaria a cargo de uno de los referentes solidarios, Juan Carr a través de los que pudieron contactarse con distintas organizaciones.
“Estaban en los mismos temas que nosotros y afrontaban los mismos problemas”, destacó Pablo.
En uno de esos encuentros lograron contactar a Techo, un hecho bisagra a partir del cual Don Ito cambia su manera de trabajar.
“Techo permite que Don Ito entre en los barrios, con familias aisladas. Techo nos ofrece hacer relevamientos de asentamientos informales en Junín, Los Toldos, Lincoln y Bragado, así empezamos a trabajar en barrios populares donde la necesidad es aún mayor”.
Don Ito continúa trabajando en red con otras instituciones y es lo que según destaca Pablo, les permite aprender y buscar propuestas y actividades afines a la ciudad.
Trabajos de relevamientos y colaboración en inundaciones y situaciones acontecidad en la ciudad les permitió generar vínculos con referentes barriales para poder llegar a todos.
Pilares
Reuniones y mesas de trabajo para ahondar en las necesidades del vecino y no solo en la entrega de bolsones, es uno de los pilares de trabajo de Don Ito.
Hace tres años iniciaron un taller de juguetes en el que hacen partícipe a la gente, a quien dona y a quien recibe, buscando más vínculo y más compromiso.
Otro pilar es el trabajo en red, que según Pablo “es algo que hemos mantenido y es fundamental para nosotros”.
“La presencia en los barrios es muy importante para la gente, necesitan ser escuchados. Notamos esos cambios al ir y buscamos asesorar, ayudar, informar, darles herramientas”, concluyó.
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