Casi un 60 por ciento de la renta del agro se queda en las arcas del Estado
Es debido a la carga impositiva nacional, provincial y municipal. Específicamente la participación en los distintos cultivos es del 66,4% en soja, 40,6% en maíz, 39,8% en trigo y 51,4% en girasol.
Un reciente informe de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA) concluyó que un productor de la provincia de Buenos Aires entrega casi un 55,8% de la renta de producción al estado para el promedio de los cultivos de soja, maíz, trigo y girasol.
Ello significa, según desgrana el informe, que cada $100 de renta que genera una hectárea agrícola, $55,80 corresponden a impuestos nacionales, provinciales y municipales.
Específicamente la participación del Estado en la renta de los distintos cultivos es del 66,4% en soja, 40,6% en maíz, 39,8% en trigo y 51,4% en girasol.
Consultado por Democracia, el presidente de la Sociedad Rural de Junín, Joaquín Elósegui, aseguró que “el Estado tiene al sector agropecuario totalmente asfixiado”.
El índice se conforma de acuerdo a los rindes promedio de los últimos tres años además de los costos de producción e insumos. A este se descuentan luego los impuestos -nacionales, provinciales y municipales- para establecer la renta del productor y lo que finalmente tributará al Estado.
“Este año, con el problema de los rendimientos, por la sequía, la inundación, por el temporal, bajaron mucho los márgenes. Es tan chico que es normal que llegue casi al 60% lo que se paga pero el productor que alquiló un campo, tras los problemas climáticos tiene pérdidas de hasta un 30% o 40% en el valor, con mermas en el rendimiento, casi sin beneficios”.
Según el informe de FADA, “el indicador de este mes, es menor que el 64,1% de marzo de 2018, y sustancialmente menor que el 74,7% de junio de 2017. Este resultado es producto de que hay un factor negativo que hace subir el índice, la sequía, y cuatro factores que lo hacen bajar: la suba de precios, el incremento del dólar, la menor participación de la soja en el área sembrada y la baja de los derechos de exportación”.
“Sector perjudicado”
La presión impositiva que aduce el sector, no se compara con la que reciben otros como el comercio o la industria, según advirtió el presidente de la entidad ruralista.
“El Estado tiene al sector agropecuario totalmente asfixiado. Esto es una realidad”, estimó Elósegui.
“Cuando este año la gobernadora Vidal bajó Ingresos Brutos, solo lo hizo para con el comercio y la industria pero no al sector agropecuario. Siempre nos vemos perjudicados aún cuando el sector siempre vuelve a invertir. Yo no sé si otros realmente reinvierten cuando las papas queman”.
Asimismo, remarcó que “el problema financiero del sector es muy grande. El caso de las retenciones por ejemplo, te llevan del valor, el 30% de la soja. Una soja que tendría que valer diez mil pesos, vale siete mil. Es un problema grande”.