Los fomentistas del barrio Pueblo Nuevo siguen reclamando una solución definitiva al histórico problema de los plátanos añejos, aunque reconocen que tienen sus “pros y contras”, es decir, sombra en verano, y serios inconvenientes con las raíces, que levantan las veredas incluso se introducen en las viviendas, generando todo tipo de trastornos.
En diálogo con Democracia, el presidente de la Sociedad de Fomento del sector, Osvaldo Soto, afirmó que “tiene y no tiene solución, quién se va a atrever a arrancar todas las plantas, pero lo cierto es que son un peligro y hay que encontrar una alternativa”.
“Tengo un conocido que vive sobre calle España, le dije que tenía que arreglar la vereda, me contestó que no tenía problema en arreglarla, pero que en seis meses iba a tener que arreglarla de nuevo por el problema de las raíces de los plátanos”, contó el dirigente barrial.
“No se ha hecho nada, solo promesas”, lamentó
Los inconvenientes que generan los añejos plátanos dispersados en todo el vecindario con, entre otros, rotura de las veredas, el adoquinado y las cañerías producto del crecimiento de sus raíces; anegamiento de calles por los desagües tapados por esas raíces; disminución en la intensidad de las luminarias del alumbrado público por su frondoso follaje; además de las alergias respiratorias que provocan.
El barrio
En general, los residentes del barrio Pueblo Nuevo no tienen mayores reclamos, puesto que cuentan con todos los servicios básicos cubiertos.
Uno de los temas pendientes tiene que ver con el agua corriente. En tal sentido, Soto explicó que “mucha gente se ha quejado por la falta de agua en los domicilios, es un problema de años en este sector, vemos que falta presión, aunque el verano pasado comenzó a regularizarlos, aparentemente porque hay nuevos pozos”.
Seguridad y tránsito
Precisamente, respecto de la seguridad, el presidente de la sociedad de fomento se muestra “conforme” con el trabajo que realizan las fuerzas policiales. “Se ven las recorridas de los móviles, por ahí hay algunas quejas porque en ciertos sectores no llegan los rondines, pero al mismo tiempo sabemos que no puede haber dos agentes por cuadra”, asevera el dirigente quien, acostumbrado a andar de madrugada por la calle por su actividad, remarca que “siempre se ven los patrulleros”.
Por último, en cuanto al tránsito, se advierte que arterias como España y Leandro N. Alem tienen mucha circulación puesto que numerosos vehículos las toman para evitar la avenida San Martín.
Sin embargo, los lugareños no observan más problemas que en otros sectores de la ciudad: “Si al tránsito no lo arreglamos entre todos, no se va a poder hacer. Las motos pasan por cualquier lado, pero uno también debe ser consciente de que no hay transporte público y la gente se tiene que movilizar. No obstante, aquí no hay mayores inconvenientes”.
Roque Sáenz Peña
En Roque Sáenz Peña impulsan una transformación de la calle, entre la avenida San Martín y España. La idea es la de generar una intervención sobre esa arteria, de manera de ponerla en valor para que tenga características similares a las que tiene en el centro, y así promover un corredor comercial que se extienda hasta la plaza Ferrocarriles Argentinos.
“Yo le digo ‘la Sáenz Peña postergada’, porque desde la Fuente del Milenio hasta Arias está muy linda, pero estas tres o cuatro cuadras no, y podría hacerse ahí un corredor hasta la Unnoba, que es la institución más importante que tenemos en nuestra ciudad. Y hay muchos negocios, comercialmente es muy importante”, señaló.
Desde la entidad barrial explicaron que esta propuesta ya fue consensuada con los frentistas y cuenta con el aval de la Federación de Sociedades de Fomento.
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