Las postales cotidianas en la ciudad, dan fe de las cifras que desde el Hospital Interzonal Abraham Piñeyro informan las autoridades y que arrojan el saldo de 1699 personas accidentadas que debieron ser atendidos en el nosocomio durante el año pasado.
Tanto vehículos como motos son presos de las mismas faltas que ponen en riesgo la vida a cada paso: sobrepasos por manos indistintas, conducción a alta velocidad, maniobras peligrosas, cruce de semáforos en rojo. Incluso en el caso de las motos se suma la falta de uso de casco y el exceso de personas que en muchos casos suman tres, cuatro y hasta cinco arriba de una moto.
\LEÉ MÁS: Tres muertos y $3 millones robados
Tres personas perdieron la vida en Junín en lo que va de 2017 a causa de distintos siniestros viales y se cuentan muchos heridos en los accidentes cotidianos que conllevan heridas leves, heridas graves, fracturas, traumatismos, casi como una moneda corriente.
De las 19 muertes que se contabilizaron el año pasado, alrededor de 15 accidentes involucraron un motovehículo.
Más de 140 accidentes por mes
De acuerdo a los datos estadísticos de la Agencia Municipal de Seguridad Vial (AMSV), en los últimos tres meses del año pasado se produjeron en Junín 424 accidentes de tránsito. De ese total, 179 correspondieron a choques de motos con autos, 32 a impactos entre dos motos, 14 a colisiones entre dos autos, y 199 a otro tipo de eventos (caídas, choques de postes o árboles, entre otros). En casi la mitad de los eventos, participa un solo vehículo.
Tal como afirmara días pasados a Democracia el Coordinador de la Secretaría de Seguridad, Mario Olmedo, las motos protagonizan el 80% de los accidentes en la ciudad.
Accidentes que ocurren con más frecuencia en las calles Primera Junta, Avenida San Martín y en zona del centro. Pero también en arterias como Libertad e Intendente de la Sota y Pastor Bauman.
Tres ejes
Las cifras proporcionadas por la Dra. Patricia Barisich y la licenciada Cecilia Benedetti, desde la dirección del HIGA, que arrojan el saldo de 1699 personas accidentadas que debieron ser atendidos en el nosocomio durante 2017 representan la altísima cifra de más de cuatro heridos por día, como consecuencia de la accidentología de la ciudad (y la zona).
Si a eso sumamos las cifras que provee la Secretaría de Seguridad, se puede decir que el año pasado ocurrieron alrededor de 3 accidentes diarios que involucró una moto y un auto, dos motos o bien dos autos.
Los operativos de tránisto, la colocación de reductores y las charlas de concientización son tres herramientas que utiliza el Estado para tratar de revertir la situación.
Según Olmedo, “los operativos de tránsito se realizan en distintos sectores de la ciudad y cuentan con alrededor de quince inspectores”.
En 2017 se labraron 11875 infracciones, un 25% más que en 2016. Entre ellas, las faltas más comunes son: circular sin licencia de conducir, sin casco y sin portar comprobante de seguro.
Se secuestraron entre 10 y 15 motos por día, una de las razones por las que se han compactado ya tantas, secuestradas en operativos anteriores.
Si bien fueron –y continúan siendo discutidos-, los reductores de velocidad son parte de otro dispositivo que permite controlar de un modo el tránsito y desde el municipio aseguran que “funcionan bien y cumplen su objetivo, que es el bajar la velocidad”.
Educación vial
La educación vial volcada a los niños y adolescentes para generar conciencia sobre los riesgos y trasmitir la importancia del respeto a la norma de tránsito, conforma el tercer eje al que debe apuntar el Estado, especialmente en una ciudad cuyas calles los padecen a diario.
Según Olmedo, las charlas de educación vial se realizaron durante todo el 2017 y continúan este año.
“Creo que lo más importante es entender que si todos respetáramos las normas de tránsito no habría tantos accidentes y mucho menos, víctimas”, expresó el Coordinador de la Secretaría de Seguridad y agregó que, “la seguridad vial la hacen todos los actores: el Estado, los conductores, los peatones, los motociclistas, los ciclistas”, indicó.
COMENTARIOS