Los juninenses festejaron el Día del Amigo

El Día del Amigo se celebró nuevamente ayer, como desde hace más de tres décadas. Es la excusa perfecta para reunirse con amistades de toda la vida o retomar el vínculo con aquellos con los que se ha perdido el contacto.
Esta popular fecha es un invento argentino, que encontró la inspiración en un ignoto odontólogo, músico y profesor de psicología, filosofía e historia de una manera muy especial. El 20 de julio de 1969, hace 48 años, el hombre pisó la Luna por primera vez. Por esta razón, esta fecha quedó en la conciencia colectiva como un logro de todo el mundo. Ese día Enrique Ernesto Febbraro tuvo una idea repentina: conectarse con el resto del mundo a través del envío de cartas. Desde entonces, el festejo creció imparablemente y se convirtió en un clásico de todos los años.
En nuestra ciudad, el festejo por el Día del Amigo movilizó a los juninenses, quienes desde hace más de quince días habían comenzado a reservar lugares para cenar y compartir un buen momento junto a sus “hermanos del alma”.
Por esa razón, en muchos de los bares y restaurantes, estuvieron repletos. Algunos de los factores que más influyeron para que los amigos decidan celebrar su día fuera de casa fueron las promociones y los entretenimientos ofrecidos por los distintos locales gastronómicos.
En general, los restaurantes tuvieron menús fijos, en los que se incluirán, entrada, plato principal, postre y bebidas a elección: en la mayoría de los casos, los comensales optaron entre cervezas y gaseosas, aunque no faltaron las ofertas de vinos. También las birrerías que se encuentran en un “boom”, tuvieron largas filas de espera desde temprano para aguardar por una mesa.