UN PELIGRO AL ACECHO, QUE PUEDE ACARREAR CONSECUENCIAS TRÁGICAS

En lo que va del año, se secuestraron 82 equinos que estaban sueltos en vía pública

Los caballos fueron entregados por la policía a otros cuidadores. En reiteradas notas, Democracia ya había advertido sobre la necesidad de mantener controles más estrictos para evitar accidentes. En los últimos 15 días hubo dos siniestros por causa de estos animales, con una víctima fatal.

El drama de los equinos sueltos continúa siendo un problema recurrente en la ciudad de Junín y la zona, producto de la irresponsabilidad de sus dueños y la dificultad para controlar todos los caminos de la Región. 
La gravedad de esta problemática de larga data se vio acrecentada con la muerte, el martes de esta semana, de Antonio César Mugávero, en el kilómetro 252 de la Ruta 7. Pero no es solamente en la mencionada carretera nacional que se observan equinos sueltos. Este diario pudo comprobar que hay denuncias por presencia de los animales también sobre calles Posadas y Lartigau bajando hacia Villa del Parque; en todo el perímetro de Avenida Circunvalación; sobre la Ruta Nacional 188; y toda la extensión del camino al balneario 
En diálogo con Democracia, Damián Méndez, subcomisario del Comando de Patrulla Rural de Junín (CPR), explicó: “Nosotros tenemos una lucha constante con el tema de los caballos sueltos y estadísticamente, en lo que va de 2017, hay 82 caballos secuestrados que no fueron devueltos a los propietarios para que no vuelva a pasar lo mismo. Por suerte, hay gente que se ha ofrecido a tenerlos como depositarios y se lo hemos permitido para sacarlos de su lugar de origen”.
“Según las épocas de pasto, los llamados que denuncian caballos sueltos van variando: en el verano hay muy pocos mientras que ahora han aumentado ya que los animales, al haber escasez de alimento en el suelo salen a buscar en distintos lugares y, ciertamente, empiezan a cruzar las rutas”, explicó. 
“Uno de los problemas ocurre porque los dueños tienen los animales en lugares reducidos y, por eso, se dispersan buscando algún lugar para ir a comer… La responsabilidad recae sobre los dueños. En la zona de la agroquímica sobre Ruta Nacional 7 es donde hay más caballos, pero están bastantes controlados en conjunto con Vialidad”, resaltó.
“Los dueños de los animales, si bien le han llegado multas de los ministerios y del Juzgado de Faltas, tienen falta de conciencia y de responsabilidad con alto grado de desinterés. Hay mucha gente que todavía no entendió para qué tiene tantos caballos porque los tienen como hobby”, expresó.  
“Las tareas se hacen, se secuestra a los animales y se libra una infracción a los dueños quienes se enojan sin ver la falta de responsabilidad y el peligro que generan”, expresó Méndez.

Dos accidentes en 15 días
El último hecho resonante ocurrió en el kilómetro 252 de Ruta 7, pasadas las 23, el 6 de junio, donde falleció Antonio César Mugávero, de 78 años de edad, al impactar el vehículo en el que se transportaba con varios caballos que estaban sueltos.
En el lugar del hecho, inmediaciones del Golf Club de Junín, se interrumpió el tránsito en una mano de la calzada, y en un primer momento intervino personal de Bomberos, ya que la víctima había quedado atrapada en el habitáculo del auto, pero luego se comprobó que estaba fallecida. 
El fiscal de turno, Javier Ochoaizpuro, quien Investiga el hecho, dijo en esta oportunidad a Democracia que “lamentablemente los caballos sueltos no tenían ninguna marca”, por lo que esto dificulta la identificación del responsable de los animales. 
En relación a esto, Damián Méndez afirmó –sin embargo- que la CPR ya tiene “un panorama de los dueños que son gente que siempre estuvieron en el tema de los caballos y estamos buscando antecedentes de que seguramente le hemos hecho infracciones a esa gente”.
A muy poco kilómetros del reciente choque, en junio de 2015, un ómnibus de la empresa Laiolo había colisionado también de noche con dos equinos que estaban sueltos. El colectivo impactó de frente contra los animales, que murieron en el acto. De milagro, en ese hecho no hubo heridos entre los pasajeros del micro, que rozó a los animales con uno de los laterales.
Otro caso reciente fue el 20 de mayo, también en Junín, cuando dos vehículos colisionaron con caballos, que murieron en el acto, mientras que los conductores no sufrieron ningún tipo de lesiones. También era de noche, alrededor de las 20, cuando dos camionetas impactaron con dos equinos sueltos que se encontraban en Avenida Circunvalación en intersección con Avenida Alvear.
Los rodados fueron una camioneta Toyota Hilux y una Chevrolet S10 que circulaban en el mismo sentido por Circunvalación, las cuales impactaron de frente con los caballos que estaban sueltos en la cinta asfáltica.

Un accidente muy recordado 
Además de la reciente muerte de Mugávero, otro accidente fatal sobre la Ruta 7 ocurrió el 19 de agosto de 2000, cuando a en el kilómetro perdió la vida el Diego Civalero, hijo del reconocido médico Jorge Civalero, quien regresaba de La Plata donde cursaba el último año de la carrera de abogacía.
Cinco años después, tras una demanda de la familia del joven, se supo que la concesionaria vial, Nuevas Rutas, debería pagar 170.000 pesos de indemnización por el fallecimiento de Diego Civalero. 
Asimismo, durante el tratamiento de este caso, se pudo constatar que en cercanías del camino, existía un horno de ladrillos con seis caballos, en el cual se encontró que el alambrado perimetral, lindero a la ruta, estaba cortado en una extensión de unos 300 metros. 
En el caso, se cuestionó la actitud de la empresa Nuevas Rutas, la cual no habría dado parte de la situación de la mayoría de los alambrados de la zona, además de no haber demostrado tampoco el método seguido para la realización de los patrullajes de control de la vía. En tanto, también se mencionó la falta de iluminación en el sector de la ruta (lo cual se le adjudica a la empresa), pese a que se trata de un tramo que esta próximo al ingreso de la ciudad.

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