Con las bajas temperaturas, aumenta la demanda de garrafas en la ciudad y la zona.
Los vecinos con vehículo optan por comprar sin recargo, en las plantas distribuidoras.
GOLPE AL BOLSILLO

Con la llegada del frío, el precio de la garrafa de 10 kilos ya supera los $ 200

Es el importe que pagan muchos vecinos de Junín y la región en los comercios de barrio. Quienes pueden trasladarse hasta las plantas distribuidoras obtienen en general el precio de referencia establecido por el Gobierno nacional, de 135 pesos.

Con la llegada de las bajas temperaturas, el precio de las garrafas comenzó a comercializarse en la región muy por encima del importe de referencia establecido por el Gobierno nacional, que ronda los 135 pesos para el envase de diez kilos, por lo que comienzan a llegar denuncias en distintos distritos. 
De hecho, en algunos municipios aseguran que se consiguen hasta por 210 pesos, es decir, un 55 por ciento más caras que lo estipulado por el Ministerio de Energía el mes último.
En una recorrida que realizó Democracia por comercios del rubro juninenses recabó que, en los grandes plantas distribuidores, el precio establecido por el Gobierno se cumple, aunque los consumidores consultados advirtieron que en momentos donde se da un pico de consumo, por el frío intenso, “la venta se limita a una garrafa por persona”, debido a que no llegan a reponer y el stock se acaba rápidamente.  
“Están los pícaros de siempre, comerciantes inescrupulosos que llegan a vender la garrafa de diez kilos, en el barrio, a 200 pesos”, lamentó Claudio, vecino de la zona de quintas de nuestra ciudad. “La gente que necesita una garrafa no la quiere para desperdiciar gas, la usa para cocinar, para calefaccionar una pieza, y la persona de más bajos recursos, la que no tiene un vehículo para trasladarse hasta las plantas, o los propios jubilados, son los que más sufren los sobreprecios”, lamentó. 
Según la nueva tarifa autorizada por el Gobierno, que comenzó a regir en abril, la garrafa de doce kilos en las distribuidoras locales se consigue a 162 pesos; y la de quince kilos, a 205 pesos. Pero, como se dijo, en los comercios de barrio estos costos sufren importantes variaciones al alza.  

Defensa al consumidor
En nuestro medio las distribuidoras autorizadas son cinco, por lo que el titular de la dirección General de Defensa del Consumidor y el Usuario, Fernando Scanavino, se reunió días pasados con proveedores de gas envasado para establecer un acuerdo respecto de los precios de la garrafa social. "Muchos comercios terminan cobrando esta garrafa a 220, por eso es importante dar a conocer que existe una resolución del ministerio de Energía de la Nación que fija el precio en un promedio de 140 pesos", destacó el funcionario, aunque recordó que ese valor no incluye los costos de traslado, que pueden rondar entre los 20 y 40 pesos, lo que encarece el precio en los comercios minoristas.

En otras ciudades
En Tres Arroyos, donde tras un relevamiento realizado días atrás, el bloque de concejales del Frente para la Victoria (FpV) aseguró que si bien en las distribuidoras oficiales se respeta el precio, en otros comercios se encontraron valores que van de los 200 a los 210 pesos.
El problema que se presenta en esa comuna y que se extiende a otros distritos es que los puestos de venta donde se consiguen a un precio más económico son escasos y se ubican fuera del centro, por lo que dificultan el acceso a los vecinos que viven en barrios lejanos y no cuentan con vehículos para el traslado.
En Olavarría se da un escenario similar: la agrupación Patria Grande arribó a las mismas conclusiones tras un relevamiento en barrios periféricos y pidió al municipio que garantice “puntos de acceso” más cercanos, para que los vecinos puedan acceder a la compra de garrafas a precios oficiales. Es que por la falta de vehículos, terminan por comprar en los comercios cercanos, donde las garrafas cuestan hasta 200 pesos.
Cabe señalar que el Programa Hogar (Hogares con Garrafas) consiste en un subsidio directo a los usuarios de bajos recursos que no cuentan con servicio de gas natural por redes. El Gobierno subsidia 115 pesos de la garrafa, por lo que si se toma el valor de referencia (de 135 pesos), el beneficiario sólo paga 20 pesos.
No obstante, cuando estos valores no se respetan, se termina desembolsando más dinero y se perjudican quienes menos tienen. A raíz de esta situación, la secretaría de Desarrollo Social de Mar del Plata controla que los comerciantes respeten el valor del producto y no actúen de manera “inescrupulosa”, así como también ampliarán el cronograma de distribución y ampliarán puntos de venta. “Si encontramos a través de denuncias de vecinos o en recorridas en centros comerciales que a la garrafa de 10 kilos la cobran a un precio superior, se realizarán las sanciones correspondientes”, dijo días atrás la titular del área local, Vilma Baragiola.
Incluso, el municipio clausuró un comercio que no contaba con la habilitación para la comercialización de garrafas, ni las medidas de seguridad requeridas (tenía 100 unidades, cuando sólo podía contar con 10). Estos controles generaron polémica porque desde Lealtad Comercial señalaron que el municipio no tiene potestad sobre los precios y que el valor de 135 pesos es obligatorio sólo para distribuidoras y estaciones de servicio. En tanto, los comercios, que tienen que sumar costos de traslado, pueden vender las garrafas más caras, siempre y cuando estén exhibidos los precios.
Por último, en La Plata, ante la falta de centros de distribución, el bloque de concejales FpV-PJ presentó un proyecto de ordenanza para la creación del programa “Garrafa en tu Barrio”, con el fin de que el municipio distribuya garrafas al precio de referencia, controle los precios y brinde información a los vecinos sobre el programa Hogar.