Con controles en cada uno de los canales, en los desagües pluviales y a través del monitoreo de todas las lagunas, la Municipalidad de Junín “sigue de cerca la evolución del tema hídrico”, se informó.
“Las bombas están funcionando todo el día y de no mediar grandes lluvias, la situación está controlada. Se espera para estos días el crecimiento que estaba pautado para luego, de manera progresiva, que comience a bajar la cantidad de agua”, dijeron.
“La situaciónestá controlada”
Al respecto, el subsecretario de Obras Públicas, Marcelo Balestrasse, afirmó: “Después de los 35 milímetros de ayer (por el domingo), no tuvimos mayores inconvenientes en el sistema. La laguna Mar Chiquita no sólo está estable sino que sigue bajando. Hay que esperar que desagüen los campos, más que nada los 100 milímetros que llovieron en la zona de Arribeños y Ferré. De alguna manera, esta agua va a afectar a Mar Chiquita, pero creemos que no se va a notar en el incremento de agua en esa laguna”.
El funcionario agregó que “la Laguna de Gómez también recibió un incremento de 2 centímetros, producto del desagüe de los campos y del agua que se recibe de Lincoln y Bermúdez. Nuestro canal apenas movió los dos centímetros que estaban previstos, tanto en el incremento que se viene dando y lo que será en estos días el pico máximo de agua para luego estabilizarse y comenzar a bajar. Obviamente sin lluvias grandes que se reciban, la situación está controlada”.
“Se bombeó tanto en los últimos días, se abrieron compuertas en los desagües pluviales y se sigue bombeando todo el día en los distintos canales que hay, tanto suburbanos como los desagües pluviales de la ciudad. También vamos a bombear en el Parque Borchex para sacar el agua que está reservada ahí por los excedentes hídricos. La situación hoy está controlada y de no mediar grandes lluvias o alguna complejidad aguas arriba o alguna filtración por la Ruta Nacional 188, la situación va a seguir estable dentro de los parámetros establecidos por Hidráulica. Tenemos un margen de 50 o 60 centímetros para llegar a un desborde del canal que nada hace suponer que pudiera ocurrir en estos días”.
Complicaciones en varios distritos
Las intensas precipitaciones en diversas zonas de la provincia de Buenos Aires trajeron complicaciones en Chivilcoy, La Plata, Berisso y Ensenada, en donde se produjeron anegamientos en distintos barrios.
En la capital provincial llovieron alrededor de 90 milímetros en las últimas 24 horas y las complicaciones más grandes se dieron en la periferia de la ciudad y en zona Norte. En tanto que también se vieron afectados los caminos Centenario y General Belgrano, en la localidad de City Bell.
Asimismo, también sufrió complicaciones la ciudad de Berisso por un lento escurrimiento en distintos barrios, donde una familia debió ser asistida por Defensa Civil. Similar fue la situación en Ensenada y Punta Lara.
En el caso de Chivilcoy, varios sectores resultaron anegados por las lluvias y dos familias se tuvieron que autoevaluar. Allí llovieron cerca de 100 milímetros en pocas horas y los bomberos realizaron 20 salidas por el ingreso de agua a viviendas.
Pedido de la Provincia
El Gobierno bonaerense pidió a los intendentes de los distritos inundados del noroeste que consensuen un plan de obras para alivianar la situación hídrica de la región, en un tenso encuentro en el que se buscó una solución a la crisis hídrica y se presentaron planes a largo plazo.
El subsecretario de Infraestructura Hidráulica, Rodrigo Silvosa, representantes de la Autoridad del Agua y del Ministerio de Agroindustria recibieron a diez intendentes del noroeste provincial para acordar una serie de “prioridades” para paliar la difícil situación hídrica de la zona.
El encuentro no estuvo exento de fuertes cruces entre los jefes comunales de los distritos más afectados, que vienen manteniendo una dura pulseada por el destino del agua, al punto que tres de ellos (los representantes de Trenque Lauquen, Rivadavia y Carlos Tejedor) presentaron una denuncia penal contra la Provincia por la rotura de rutas realizada para descomprimir la situación de General Villegas, algo que afectó sus localidades.
Frente a esta situación, el Gobierno bonaerense pidió a los intendentes y representantes municipales que presenten ellos mismos los planes que crean más adecuados para resolver la crisis en el corto plazo, con la intención de discutirlos en un próximo encuentro y consensuar un plan que conforme a todos.
En lo inmediato, la Provincia se comprometió a reforzar las márgenes de la Laguna de Gómez como una de las formas de mitigar las subidas de agua. Además, explicó el avance de las obras del Plan Maestro del Salado e informó sobre una reunión con autoridades de Santa Fe, Córdoba y La Pampa para “aliviar el exceso hídrico de la región”. Finalmente, se comprometió a comunicar “por escrito” a cada comuna cuando deban realizarse obras de escurrimiento que pudieran afectar a otras localidades.
Por su parte, los intendentes reclamaron una serie de obras como la construcción de puentes y alcantarillas que ayuden a descomprimir la situación, al tiempo que reclamaron al Gobierno un mayor control de los canales clandestinos construidos por productores.
De la reunión participaron los representantes de los municipios de Pellegrini, Carlos Tejedor, General Pinto, Hipólito Yrigoyen, Leandro N. Alem, Trenque Lauquen, General Villegas, Junín, General Arenales y General Viamonte.
Tras el encuentro, Rodrigo Silvosa indicó que el objetivo fue “pedirles a los intendentes coordinar las acciones en conjunto”. Además, indicó que “hemos evitado colapsos en ciudades cabeceras. A pesar de la situación no hemos tenido evacuados y eso para nosotros es un logro. Por eso quiero resaltar la madurez institucional que hemos desarrollado en esta crisis cada uno desde su lugar”.
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