AUTOR DE LA MUESTRA "VADEMÉCUM"
Emmanuel Borao: un gran año de un fotógrafo comprometido con la realidad
El artista nacido en General Pinto, pero formado en Junín, consiguió este mes llevar su muestra a España, lo que le valió un importante reconocimiento a su trabajo y su talento. Se prepara para exponer en Córdoba en diciembre.
Este año será especialmente recordado por el Emmanuel Borao. El fotógrafo, nacido en General Pinto hace 31 años, logró que su muestra "Vademécum", en la que expone la problemática de la mercantilización de la salud y el consumo injustificado de medicamentos, saltara desde Museo Municipal de Bellas Artes “Manuel M. Balarino” de Lincoln al MACA en Junín, y de allí, sin escala, cruzara el Atlántico hasta aterrizar en Barcelona, donde desde el 13 al 27 de octubre estuvo exhibida en el Photogenic Festival, en el Barri de Gràcia.
Antes, las fotos de Borao también habían pasado por el prestigioso Festival de la Luz, una imponente muestra internacional bianual, que alcanza a 25 ciudades argentinas y de la cual participan más de 300 autores de todo el mundo.
"Vademécum intenta mostrar cómo el capitalismo no tiene límites y puede llegar al punto de transformar en mercancías incluso a los medicamentos. Y lo más impactante es que queda en evidencia cómo ese desfasaje en la función de la medicina termina poniendo en riesgo la salud de las personas", explica Borao en diálogo con Democracia.
Como cualquier artista involucrado con los problemas de su realidad y su tiempo, Borao empezó a dar vida a "Vademécum" observando las personas en sus vidas cotidianas, lo que le permitió descubrir que "cualquier problema se resolvía con una pastilla".
"Empecé a fotografiarlas, luego seguí indagando un poco más y llegué a dar con gente que consumía medicamentos de todo tipo ante el más mínimo problema. Conocí personas que consumían psicofármarcos, medicamentos por problemas alimenticios, medicamentos para dormir y demás", recuerda el joven fotógrafo.
Las piezas que estructuran "Vademécum" consisten en retratos de personas comunes, con una píldora en la mano y una breve descripción de su historia y los motivos por los cuales consumen medicamentos.
"El objetivo fue poner en evidencia el poder de la industria para estructurar un discurso muy fuerte para fomentar el consumo injustificado de medicina", explica Borao.
"La recepción fue clara, el mensaje es bastante literal, y todas las personas que vieron la muestra la comprendieron porque, en algún punto, estaban vinculadas con la problemática, ya fueran por ellas mismas o a través de un tercero", asegura.
La potencia del mensaje de "Vademécum" le valió a su autor la oportunidad de seguir difundiendo la muestra en diferentes ciudades del país. "Me seleccionaron para exponer en el Salón de Arte de Fotografía Contemporánea Argentina, en Córdoba, el 15 de diciembre. Con eso cierro el año", adelanta.
Con respecto al futuro inmediato, al menos en el plano profesional, Borao admite que hay todavía algunas incógnitas por develar. "Tengo algunos proyectos para el año que viene, pero aún es muy pronto para anunciar algo concreto", finaliza.
Antes, las fotos de Borao también habían pasado por el prestigioso Festival de la Luz, una imponente muestra internacional bianual, que alcanza a 25 ciudades argentinas y de la cual participan más de 300 autores de todo el mundo.
"Vademécum intenta mostrar cómo el capitalismo no tiene límites y puede llegar al punto de transformar en mercancías incluso a los medicamentos. Y lo más impactante es que queda en evidencia cómo ese desfasaje en la función de la medicina termina poniendo en riesgo la salud de las personas", explica Borao en diálogo con Democracia.
Como cualquier artista involucrado con los problemas de su realidad y su tiempo, Borao empezó a dar vida a "Vademécum" observando las personas en sus vidas cotidianas, lo que le permitió descubrir que "cualquier problema se resolvía con una pastilla".
"Empecé a fotografiarlas, luego seguí indagando un poco más y llegué a dar con gente que consumía medicamentos de todo tipo ante el más mínimo problema. Conocí personas que consumían psicofármarcos, medicamentos por problemas alimenticios, medicamentos para dormir y demás", recuerda el joven fotógrafo.
Las piezas que estructuran "Vademécum" consisten en retratos de personas comunes, con una píldora en la mano y una breve descripción de su historia y los motivos por los cuales consumen medicamentos.
"El objetivo fue poner en evidencia el poder de la industria para estructurar un discurso muy fuerte para fomentar el consumo injustificado de medicina", explica Borao.
"La recepción fue clara, el mensaje es bastante literal, y todas las personas que vieron la muestra la comprendieron porque, en algún punto, estaban vinculadas con la problemática, ya fueran por ellas mismas o a través de un tercero", asegura.
La potencia del mensaje de "Vademécum" le valió a su autor la oportunidad de seguir difundiendo la muestra en diferentes ciudades del país. "Me seleccionaron para exponer en el Salón de Arte de Fotografía Contemporánea Argentina, en Córdoba, el 15 de diciembre. Con eso cierro el año", adelanta.
Con respecto al futuro inmediato, al menos en el plano profesional, Borao admite que hay todavía algunas incógnitas por develar. "Tengo algunos proyectos para el año que viene, pero aún es muy pronto para anunciar algo concreto", finaliza.