None
TRABAJOS EN CONJUNTO CON LA OPDS

El municipio dará a conocer las obras que se harán en el relleno sanitario

El anuncio podría hacerse el próximo martes. Sólo resta confirmar algunos detalles con el organismo provincial. Junín es una de las tres primeras ciudades que serán beneficiadas con financiación de la Provincia para sanear su basural.

Esta semana la administración comunal anunciará oficialmente el proyecto que llevará a cabo de manera conjunta con el Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible (OPDS) para el saneamiento del basural y el desarrollo de un verdadero relleno sanitario.
Por estas horas hay mucho hermetismo en el ámbito comunal respecto de este tema y no hay una palabra oficial que explique los pormenores de la iniciativa. “No sean ansiosos, esperen hasta el martes a la 9 de la mañana que ahí se va a anunciar”, sentenció, entre enigmático y risueño, un referente del Gobierno de Junín.
“Todavía hay que cerrar un par de cositas con el OPDS”, agregó otro funcionario.
Lo cierto es que el operativo está en marcha y, al parecer, el proyecto viene encaminado. De acuerdo a lo que pudo recabar este diario, lo que se busca con esta iniciativa, más allá del saneamiento del basural, es el desarrollo de una nueva planta de tratamiento y la instauración de un plan integral para el tratamiento de los residuos que incluye la reorganización de la recolección de los desechos y el destino de los mismos.

Tres ciudades en la Provincia
La actual administración del OPDS, a cargo de Ricardo Pagola, decidió que Junín, Balcarce y Vicente López serán las tres primeras localidades bonaerenses sobre las que el organismo intervendrá para realizar un trabajo de saneamiento de sus basurales.
De esta manera, nuestra ciudad será una de las que recibirá una fuerte inversión para evitar el efecto invernadero en el viejo basural a cielo abierto y desarrollar un proceso que tiene una fuerte connotación con el cuidado del medioambiente.
De hecho, en agosto último, cuando Pagola estuvo en nuestra ciudad, destacó el caso de Junín como “un ejemplo” porque “fue uno de los primeros municipios que se acercó para trabajar en conjunto” y advirtió que hay en el intendente, Pablo Petrecca, “una firme decisión de encontrar una solución integral al manejo de los residuos”.
En estos casos, el organismo provincial financia el saneamiento de los basurales a cielo abierto y, al mismo tiempo, ofrece algunas opciones para resolver la situación. Además, brinda asesoramiento técnico para el tratamiento de los residuos.
“Desde el punto de vista técnico ya tenemos todo, el tema es la financiación” del proyecto, admite un secretario municipal. Es que el OPDS aporta una porción importante de los fondos que se requiere para esta iniciativa, pero hay algunos costos que correrán por parte de la comuna.
En Balcarce, por ejemplo, donde las obras están más avanzadas, el OPDS invertirá unos 14,4 millones de pesos, mientras que el Municipio, por su parte, realizará la licitación para la compra y colocación de una membrana y sistema de drenaje de líquidos por un monto aproximado de tres millones de pesos, que se suman a los casi seis millones invertidos en la Planta de Separación y Clasificación.

El Proyecto

El proyecto para que el basural sea un verdadero relleno sanitario incluye un reordenamiento en la cadena de gestión de los residuos, cuyos puntos salientes pasan por la limpieza integral del lugar, el desarrollo de una nueva planta de tratamiento, acompañado de campañas de reciclaje y separación en origen.
El plan para sanear el predio consiste en la limpieza del sector donde en la actualidad se encuentran las inmensas montañas de desechos, a partir de las 90 toneladas diarias de basura que genera Junín. El paso siguiente es la construcción de una planta de tratamiento que permita evitar que los líquidos lixiviados y los gases que allí se generen afecten el suelo, el aire y el agua.
La pregunta que se impone es, entonces, ¿qué se va a hacer con la basura que se retire del lugar? Aunque no pudo ser confirmado, una versión indica que se construiría una nueva cava, con un sistema de impermeabilización donde también iría la basura que siga llegando a diario.
Otra etapa fundamental en este proyecto es la instalación de una planta de tratamiento de los residuos que, desde la recisión del contrato con la firma Girs SA, ya no existe.
Y el tercer eje del proyecto es el del reciclado de desechos. En tal sentido, una alternativa es que algunos tipos de residuos secos, como plásticos, cartón, vidrio y metales, no lleguen más al relleno y sean enviados directamente a centros de reciclaje que funcionen fuera del predio. Para implementar esto se necesita retomar las campañas de separación de los residuos en origen. Una opción podría ser la de reflotar el “lunes verde”; otra, instalar contenedores en la vía pública específicos para lo reciclable. Y sea como fuere, se deberá poner énfasis en la educación, en la cultura de los vecinos y en las campañas de difusión.

Girsu

Más allá de los detalles del proyecto, se trata, en definitiva, de un programa exhaustivo.
Desde la OPDS informaron a este diario que el trabajo conjunto que se está haciendo con la Municipalidad “tiene como finalidad la implementación de un plan de gestión integral de residuos sólidos urbanos”.
En efecto, estos programas, conocidos como Girsu –por su sigla– son sistemas de manejo de los desechos que, basado en el desarrollo sostenible, tienen como objetivo primordial la reducción de la basura que es enviada disposición final. Ello deriva en la preservación de la salud de las personas y la mejora de la calidad de vida de la población, como así también el cuidado del ambiente y la conservación de los recursos naturales.
El sistema Girsu se impuso como el método adecuado para el manejo de los residuos sólidos urbanos luego de años de estudio, de numerosas experiencias realizadas en el mundo y del concurso de las ciencias exactas, médicas, naturales, sociales, económicas y el desarrollo tecnológico.
Todos los estudios referidos a la gestión integral de residuos están dirigidos a disminuir los desechos generados –que son consecuencia inevitable de las actividades humanas– como medio idóneo para reducir sus impactos asociados y los costos de su manejo, a fin de minimizar los potenciales daños que causan al hombre y al ambiente.
Ya en febrero de este año el intendente Petrecca hacía referencia al sistema Girsu, cuando recibió a técnicos del OPDS y del Ceamse y, juntos, visitaron el basural. Allí, el jefe comunal señaló: “El proyecto es ambicioso. Hoy tenemos que tomar el control y sanearlo. Pero el objetivo final es el Girsu”.

COMENTARIOS