DIPUTADO NACIONAL

Sergio Massa: "El Gobierno nos ataca y luego nos da la razón"

El fundador y líder del Frente Renovador analizó en una entrevista exclusiva con TeleJunín la situación actual del país. También habló de repensar el sistema educativo para potenciar las economías regionales.

Está de visita en Junín para brindar una charla en el auditorio de la Unnoba, ¿de qué se trata?
-Vine a partir de la invitación del director del Banco Provincia, y ex intendente de esta ciudad, Mario Meoni, y de los dirigentes locales del Frente Renovador para dialogar con estudiantes y docentes universitarios.
Estamos tratando de instalar el círculo virtuoso de la educación y el trabajo, y, sobre todo, el desarrollo de las unidades educativas en cada una de las regiones. Necesitamos que la Argentina potencie la economía de sus regiones, de lo contrario siempre vamos a generar riquezas únicamente alrededor de los puertos de Buenos Aires y Rosario.
Es preciso capacitar a nuestra gente para el desarrollo económico de nuestro interior. El sistema educativo no puede ser el mismo en la pampa húmeda que en la Patagonia argentina, por lo que debemos pensarlo de manera integral y asociado con el mundo del trabajo, para que nuestros hijos, cuando egresen de la universidad, puedan insertarse rápidamente en el mercado laboral.

-¿Cómo observa los índices de inflación y desocupación? ¿Cree que el país saldrá adelante pronto y quedará sumergido en el estancamiento hasta fin de año?
-La economía argentina funciona cuando la gente tiene plata en sus bolsillos, porque depende en un 80% por su Producto Bruto Interno (PBI). Estamos obligados a estar atentos a cuánto dinero tiene un jubilado, cuánto tiene un pequeño y mediano productor, porque sólo así podemos poner en movimiento la maquinaria de consumo.
Hay sectores en los que aparecen signos positivos de recuperación, como el agro, y otros, como industria y construcción, en los que se aprecia una caída muy preocupante. Pero necesitamos que se reactiven el consumo y la inflación, y, sobre todo, el trabajo como factor de apalancamiento de los otros dos elementos.

-¿Cuál es la posición del Frente Renovador sobre la propuesta de regionalización de la Provincia de Buenos Aires?
-No he visto hasta ahora ningún proyecto serio en la materia, pero a la hora de trazar cualquier mapa de la Provincia, independientemente de cuántos habitantes haya en los municipios, lo más importante siempre es evaluar la sustentabilidad y la posibilidad de desarrollo.
Si dividimos municipios, pero los condenamos a la pobreza, estamos haciendo un gran daño a los bonaerenses. En cambio, lo que debemos hacer es igualar hacia arriba.
Podemos citar, por ejemplo, el caso de La Matanza. Tenemos que lograr que todos los vecinos de Ramos Mejía, de González Catán, de Laferrere, de San Justo o Virrey del Pino tengan la misma calidad de servicios, desde cloacas y agua potable hasta comisarías y jardines de infantes. Es decir, la prioridad debe ser evitar que se genere desigualdad.  

-¿Se rompió el acuerdo con el gobierno después de las últimas críticas en su contra del presidente Mauricio Macri?
-Más allá de las agresiones, el Frente Renovador tiene una responsabilidad. Al Presidente lo votaron para gobernar y a nosotros para controlar. Señalamos el problema que se estaba generando con el aumento de tarifas varias veces y finalmente la Corte Suprema terminó dándonos la razón.
Pasó exactamente lo mismo cuando nos atacaron porque advertimos sobre la preocupante situación con el nivel de desempleo y, finalmente, el ministro de Trabajo (Jorge Triaca) reconoció que se perdieron más de 120 mil puestos de trabajo.
Entonces, nuestro planteo es claro: hay que cuidar la industria y el trabajo argentinos. No es posible que tengamos naranjas importadas, mientras los productores citrícolas entrerrianos o los sampedrinos terminan tirando sus productos.

-Ha señalado en reiteradas ocasiones que el camino adoptado en la actualización de las tarifas fue erróneo. ¿Cómo cree que se debió haber procedido?
-En abril enviamos dos cartas al ministro de Energía, Juan José Aranguren, y el 9 de julio hicimos lo propio con el Presidente, para plantearles la necesidad de avanzar con gradualidad en la quita de subsidios, para que las tarifas fueran razonables.
También advertimos sobre el requisito previo de la audiencia pública, pero no fuimos escuchados. El gobierno corrigió cinco veces sus decisiones con respecto a las tarifas. Eso habla a las claras de que están admitiendo que hubo errores.

-¿Aranguren debería renunciar?
-No es mi función elegir los colaboradores del Presidente, pero sí lo es el señalar que hay incompatibilidades de intereses en el caso del ministro Aranguren.
Desde que asumió, hace nueve meses, conserva sus acciones en la empresa Shell, y es muy probable que la Justicia pronto revise muchas de las decisiones que ha tomado en todo este tiempo, para determinar si como funcionario favoreció a una compañía en la que tiene intereses económicos.

-¿Pesa todavía sobre usted su antecedente como funcionario del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner?
-No, para nada. Fui durante once meses jefe de Gabinete nacional, pero con el mismo coraje con el que defendí al gobierno durante la crisis del campo en 2008, me puse al frente en 2013 para frenar el sueño de "Cristina Eterna".
Uno hace lo que tiene que hacer, en el momento en el que corresponde, y en mi caso siempre puse por encima de todo la defensa del país en el que vivo.