Estados Unidos tiene la capacidad de llevar seres humanos a la luna, puede destruir el planeta y arrasar con la vida humana en cuestión de segundos, pero sin embargo no logra controlar los devastadores incendios forestales, que ya se cobran vidas humanas y consumen poblaciones enteras.
Según el más reciente balance de las autoridades, 16 personas han fallecido por estos incendios, que ya han destrozado más de 10.000 edificaciones. Además, han quemado hasta ahora más de 14.000 hectáreas, informó la agencia contra incendios de California.
Con ese panorama, el Gobierno mexicano coordinaba en las últimas horas el arribo de bomberos y otros elementos especializados en emergencias a California, ante la persistencia de incendios forestales en Los Ángeles.
La Cancillería mexicana detalló que, frente a los incendios en California, coordina con el equipo del gobernador de ese estado estadounidense, el arribo de un contingente de especialistas mexicanos conformado por elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional. (Ejército), la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) y la Comisión Nacional Forestal.
La CNPC precisó en un comunicado que el equipo solidario que México envía a California está integrado por 74 elementos de técnicos especializados en el combate al fuego y de protección civil.
Por su parte, el gobernador de California, Gavin Newsom, informó en la referida red social que bomberos mexicanos están en camino al área de contingencia del incendio forestal de Eaton, "uniéndose a más de 10.000 personas ya en el terreno".
De acuerdo con la información más reciente del Departamento de Silvicultura y Protección contra Incendios de California (Cal Fire), actualmente hay seis incendios forestales activos en el estado. Los dos mayores son los de Eaton y Palisades, que comenzaron el martes y se propagaron hasta alcanzar 13.690 acres (alrededor de 55,4 kilómetros cuadrados) y 21.317 acres (unos 86,27 kilómetros cuadrados), respectivamente.
Sin básquet
En esa línea, los partidos de la NBA de Los Angeles Lakers y Los Angeles Clippers previstos para ayer sábado por la noche en la capital del estado de California fueron aplazados debido a los incendios que están azotando la ciudad desde el martes, anunció el organismo. Los Lakers tenían que enfrentarse a los San Antonio Spurs y los Clippers a los Charlotte Hornets y el partido del jueves entre los Lakers y los Hornets ya fue pospuesto por la misma razón.
El personal de los Lakers se ha visto afectado por los incendios, como el entrenador J.J. Redick, que vio consumida por las llamas la casa que alquilaba en Pacific Palisades, un barrio de lujo que prácticamente ha sido borrado del mapa. "No creo que haya llorado o gritado así en varios años", dijo J.J. Redick, realojado en un hotel con su esposa y sus dos hijos.
"Fue una devastación y una destrucción total, (...) todo desapareció", agregó Redick. "No creo que puedas prepararte nunca para algo así". Antes del entrenamiento de los Lakers del viernes, "hablamos de ello como grupo", explicó el entrenador del equipo de LeBron James.
"Es nuestra responsabilidad y la responsabilidad de todos en esta institución dar un paso al frente y ayudar a la gente". Aunque el juego de ayer sábado fue cancelado, el entrenador espera que la próxima reanudación de los partidos "dé un poco de esperanza a la gente" tras esta catástrofe.
La tristeza de Francisco
El papa Francisco manifestó ayer sábado su tristeza por la devastación causada por los incendios, en un telegrama enviado al arzobispo de Los Ángeles. "Entristecido por la pérdida de vidas humanas y la amplia devastación causada por los incendios cerca de Los Ángeles", afirmó el pontífice en el mensaje, donde también expresó su "cercanía espiritual" con las víctimas, indicó el cardenal secretario de Estado Pietro Parolin, número dos del Vaticano.
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