Qué postura tienen los países de Latinoamérica
En la cuenta regresiva a la controvertida toma de posesión prevista en Venezuela, varios países de América Latina se han pronunciado para reconocer o respaldar al líder opositor Edmundo González como presidente electo frente a los resultados de las elecciones anunciados oficialmente el año pasado que, la justicia electoral vinculada al chavismo, dio por ganador a Nicolás Maduro.
Los comicios de julio de 2024 en Venezuela fueron ampliamente cuestionados a nivel internacional por Estados Unidos, la Unión Europea y organismos como la Organización de Estados Americanos, que señalaron falta de transparencia y de verificación independiente de los resultados. Más de cinco meses después de la votación, la autoridad electoral sigue sin publicar las actas de resultados.
Para mañana está previsto que el presidente venezolano tome posesión del cargo por otros seis años, pero su rival en las urnas prometió regresar a desde el exilio para asumir la Presidencia. Ante la tensión, varios países han mostrado su respaldo al opositor. Y, de momento, ningún mandatario ha confirmado oficialmente su presencia en el acto oficial en la Asamblea Legislativa de Venezuela.
Milei, enemigo de Maduro
El presidente argentino, Javier Milei, mantiene una confrontación abierta con Maduro prácticamente desde su llegada al poder en diciembre de 2023. Su gobierno fue uno de los primeros en considerar a González Urrutia como “legítimo presidente electo” de Venezuela.
En una demostración de su espaldarazo, Milei recibió a González Urrutia el sábado pasado en la Casa Rosada, en el marco de la gira internacional del opositor para recabar apoyo en la región de cara a su prometido regreso a Caracas para asumir la Presidencia.
Venezuela expulsó el 1 de agosto a los diplomáticos argentinos en Caracas, la misma medida que tomó para otros seis países de la región que desconocieron los resultados que daban a Maduro como ganador. Las rispideces entre Argentina y Venezuela se agudizaron con la detención el 8 de diciembre de un gendarme argentino en suelo venezolano tras cruzar la frontera con Colombia.
Mientras, el gobierno chileno fue uno de los últimos en pronunciarse con su decisión de poner fin a la misión de su embajador en Venezuela en medio de la escalada de tensiones entre las dos naciones.
El presidente Gabriel Boric ha sido una de las voces más críticas de la región ante la opaca victoria de Maduro y Chile ha manifestado en reiteradas instancias la importancia de que el Consejo Electoral venezolano hiciera públicas las actas. Pero tampoco considera a Edmundo González como el presidente electo. Las fricciones entre ambos países hicieron que Venezuela expulsara a todo el personal diplomático chileno de su territorio.
México, acompaña
Aunque la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, ha defendido reiteradamente la imparcialidad de su país ante la crisis que enfrenta Venezuela luego de las elecciones presidenciales, su gobierno ha sido de los pocos en la región que ha anunciado que enviará un representante a la toma de posesión de Maduro. Al ser preguntada sobre cuál sería su posición en la investidura del actual gobernante venezolano, Sheinbaum dijo que “la postura que está en la Constitución con todos los gobiernos del mundo: la autodeterminación de los pueblos”. Recalcó que “le corresponde a las y los venezolanos, no a México definir”.
Pese a que la postura inicial de México fue la de exigir transparencia en las actas de resultados, poco a poco fue convirtiéndose en una posición más condescendiente con Maduro. En diciembre, después de la visita de Petro a México, Sheinbaum enumeró a los gobiernos “progresistas” de la región e incluyó a “Venezuela, que tiene su problemática que todos conocemos, y Cuba, evidentemente”.
El gobierno colombiano anunció a finales del año pasado que enviará un representante oficial al acto de posesión presidencial de Maduro y que será el embajador de Colombia en Caracas, Milton Rengifo. Petro no ha reconocido públicamente ni a Maduro como presidente electo ni tampoco a González, pese a los pedidos de la oposición venezolana. Tras las elecciones, Colombia intentó mediar entre las partes con miras a destrabar la situación, exigiendo que se mostraran las actas de votación públicamente, sin tener éxito.
Brasil, Bolivia y otros
El gobierno brasileño no reconoce ni a González ni a Maduro como presidente electo de Venezuela. Junto con Colombia, la administración de Luiz Inácio Lula da Silva ha mantenido diálogo constante con el gobierno chavista; los dos países exhortaron a Venezuela a transparentar los resultados de las elecciones. Desde entonces, no ha habido cambios en la posición de Brasil, que hasta ahora mantiene relaciones diplomáticas con el país vecino.
El presidente boliviano, Luis Arce, no asistirá a la toma de posesión del presidente Nicolás Maduro por su recargada agenda. El gobierno enviará una delegación que “probablemente” esté encabezada por la canciller Celinda Sosa, dijo la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón. Arce ha sido uno de los pocos presidentes de la región que felicitó a Maduro por su “victoria electoral”.
En cambio, el gobierno peruano considera a Edmundo González como el “presidente electo” de Venezuela, dijo el canciller Elmer Schialer. Sus declaraciones sucedieron a un mensaje difundido el por la Presidencia que indicó que Dina Boluarte habló por videoconferencia con el opositor. En ese mensaje se indicó que Perú “no reconoce los resultados”. Además, Venezuela rompió relaciones con Perú en julio después de unas declaraciones del entonces canciller peruano Javier González-Olaechea en las que afirmó que González era el “verdadero y legítimo presidente electo”.
Ante la presencia ayer de Edmundo González en Panamá, la Cancillería de ese país llamó a acreditarse para lo que calificó como un acto de “reivindicación de la democracia en Venezuela y América”. Así expresó su reconocimiento al líder opositor como presidente electo, días después de suspender las relaciones diplomáticas con Caracas. Los vuelos comerciales entre ambas naciones también están suspendidos.
Antes de su visita a Estados Unidos y de las previstas en Panamá y República Dominicana, González pasó también por Uruguay durante el fin de semana. El presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, y el canciller Omar Paganini recibieron al líder opositor en la capital Montevideo y ratificaron su apoyo. “No hay dudas que es el presidente electo de Venezuela. Lamentablemente la dictadura decidió perpetuarse”, dijo Paganini tras el encuentro.
Por su parte, Paraguay reconoció el lunes a González como el presidente electo de Venezuela y exigió al embajador Ricardo Capella y al personal diplomático de Venezuela acreditado en Paraguay que abandonen el país en las próximas 48 horas. “Paraguay ha denunciado la persecución política sistemática y el desprecio absoluto del régimen hacia las garantías electorales, exigiendo de manera categórica la total transparencia del proceso y la celebración de elecciones libres”, agregó el canciller.