¿Del idilio al divorcio?: Diarios contra la red social X
Tras denunciar que se volvió una “pesadilla informativa”, The Guardian (británico), La Vanguardia (español) y Dagens Nyheter (sueco) abandonaron la plataforma.
Desde que Elon Musk compró Twitter, red social ahora llamada X, muchos usuarios comenzaron a ver de reojo los cambios que introdujo y abandonaron la plataforma. Pero ahora la situación se agravó porque los que decidieron pegar el portazo no fueron usuarios comunes sino tres grandes medios de comunicación que tras denunciar que la red social se volvió una “pesadilla informativa” abocada a difundir desinformación, anunciaron que dejarán de compartir su contenido allí.
El diario británico The Guardian fue el primero en anunciar que bajará sus contenidos de esta “plataforma mediática tóxica”. Inmediatamente lo siguieron el periódico español La Vanguardia y el sueco Dagens Nyheter.
¿Pero estas salidas anuncian otras? La pregunta por una posible deserción masiva no es nueva, ya se había planteado en 2022, cuando Musk compró Twitter, lo rebautizó X y redujo drásticamente la moderación, en nombre de la libertad de expresión.
“Podemos esperar que otros editores de prensa abandonen X” tras la reciente victoria de Donald Trump, obtenida con el apoyo activo de Musk, en las elecciones presidenciales estadounidenses, dijo a AFP Stephen Barnard, investigador de la American Butler University.
Pero la magnitud de la deserción “dependerá probablemente de los actos de X, de Musk y de la administración Trump respecto a los medios”, añadió y completó: “Si se muestran tan hostiles hacia ellos como en el pasado, eso probablemente acarree más salidas”
En tanto que mientras que es confrontado por los medios de comunicación que lo acusan de promover la desinformación, Musk fue designado por Trump para encabezar una nueva comisión que tendrá por misión recortar el gasto público.
DEPENDENCIA
Para justificar su salida de X, The Guardian consideró que “los beneficios” de estar en la plataforma se veían ahora superados “por los inconvenientes”, en particular la omnipresencia de “teorías de conspiración de extrema derecha y del racismo” en las cuentas de X.
En sus inicios en 2008-2009, Twitter era visto por los medios como un lugar imprescindible para tener contacto directo con los lectores y las fuentes de información, tanto de expertos como de políticos.
Allí, los medios “encontraron y ampliaron su público, construyeron marcas, desarrollaron nuevas prácticas periodísticas, formaron una comunidad”, lo que a su vez “fortaleció notablemente la influencia de Twitter”, enumeró Barnard.
¿Hasta el punto de quedar atrapados en una dependencia que ahora están pagando? “Creo que sí”, respondió a AFP Mathew Ingram, antiguo especialista en medios digitales de la revista estadounidense Columbia Journalism Review.
LA POSTURA DE EDITORES
“Muchos editores de prensa abandonaron cualquier forma de interacción con sus lectores, externalizándola a redes sociales como Twitter, y recogen lo que sembraron”, explicó.
Pero ya mucho antes de la llegada de Musk, tras la fiebre de los primeros tiempos, se oían críticas contra el funcionamiento de una red acusada de fomentar polémicas e indignaciones instantáneas y de ofrecer un reflejo distorsionado de la sociedad, con una presencia sobredimensionada de las clases altas y de grupos de activistas.
Queda por ver si abandonar X es perjudicial para los periódicos, ya afectados por una grave crisis económica.
“Estamos convencidos de que seguramente vamos a perder suscripciones, porque algunos lectores se suscribían después de ver una noticia en la red social”, predijo Jordi Juan, director de La Vanguardia.
Pero “es poco probable que (eso) tenga un efecto significativo en los ingresos de los medios, ya que X genera relativamente poco tráfico hacia los sitios de noticias en comparación con otras plataformas”, matizó Barnard.
En octubre de 2023, seis meses después de que la radio pública estadounidense NPR abandonara Twitter, un informe de la Fundación Nieman para el periodismo consideró que los efectos de esa salida fueron “insignificantes” en términos de tráfico.
Ante la pregunta de a dónde migrar, algunos internautas proponen mudarse a otra red social estadounidense, Bluesky. Esta última anunció el viernes haber registrado un millón de nuevos usuarios en un solo día.
Pero sus 16 millones de usuarios siguen siendo pocos en comparación con los usuarios activos de X, estimados en varios cientos de millones.
“Hoy en día, no existen alternativas sólidas a lo que ofrece X. Pero quizás haya que inventarlas”, afirmó Vincent Berthier, jefe del departamento de tecnologías de Reporteros Sin Fronteras.
Para la ONG francesa de defensa de la prensa, el hecho de que los periódicos abandonen X es un “síntoma del fracaso de las democracias en la regulación de las plataformas de internet”
“Musk es la cara radical de esta pesadilla informativa que existe en las plataformas, pero el problema es mucho más global”, recalcó Berthier.