Rusia aseguró ayer que destruyó esta semana el buque ucraniano de desembarco de tropas “Yuri Olefirenko”, que describió como el último barco de guerra con el que contaba la Armada de Ucrania, durante un ataque contra el puerto ucraniano de Odesa.
En un comunicado, el Ministerio de Defensa ruso dijo que el bombardeo alcanzó un punto de anclaje en el puerto de Odesa con un arma “de alta precisión” de las Fuerzas Aeroespaciales de Rusia el 29 de mayo pasado. Como resultado del ataque, “fue destruido el último buque de guerra de las Fuerzas Navales ucranianas, el Yuri Olefirenko”, agregó.
El “Yuri Olefirenko” es un buque para el desembarco de tropas cuyo nombre original era “Kirovograd” y fue rebautizado en 2016 para honrar a un oficial ucraniano.
En junio de 2022, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, condecoró a la tripulación de este navío por su heroísmo durante la ofensiva rusa en Ucrania. Fue empleado en 2014 para evacuar a militares ucranianos tras la anexión de la península de Crimea por Rusia. Las autoridades ucranianas no se pronunciaron hasta ahora sobre las afirmaciones del Kremlin, que de confirmarse representarían mayoritariamente una pérdida simbólica, ya que Ucrania se ha centrado en la guerra terrestre y aérea.
Un vocero de la Marina ucraniana se negó a hacer comentarios al ser consultado por el anuncio ruso, informó la agencia de noticias AFP. Como casi todo el material militar que posee Ucrania, el “Yuri Olefirenko” tiene su origen en la época soviética, dentro de la categoría de embarcaciones de guerra anfibia.
Pertenece a la clase de barcos conocida en la Otan como Polnocny-C. Esta unidad comenzó a construirse a finales de la década de 1960. Puede llevar hasta 12 vehículos de transporte blindados BMP-2 a bordo o cuatro tanques pesados o 250 soldados de infantería con sus respectivas armas.
Cuenta con una gran rampa en la proa que conecta la bodega interna con el exterior y se usa para realizar desembarcos a pie de playa. Dispone de 73 metros de eslora por 9,6 de manga y hasta 834 toneladas de desplazamiento a plena carga. Tiene una autonomía de 2.000 km a una velocidad de crucero de 33 km/h.
Algunas unidades también disponen de armamento a bordo, protagonizado por lanzadores de misiles superficie-aire, cañones antiaéreos y lanzacohetes.
Otan
La Otan trata de articular un nuevo modelo de relación más estrecha con Ucrania. Pero pese a los anhelos de Kiev, que lleva 15 meses combatiendo la agresión rusa, tanto la organización militar como los países aliados -de manera bilateral- se resisten a ofrecerle por ahora garantías de seguridad vinculantes y el escudo de defensa mutua que proporciona la Otan.
El motivo es que un paso así podría llevar a entrar en la guerra contra Rusia al país garante de esa seguridad, una situación a la que la Alianza no quiere llegar de ningún modo. En su lugar, los países se decantan por brindar medidas de “salvaguarda” o “acuerdos de seguridad” más limitados.
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