CONFLICTO

Putin: “Entramos en la década más peligrosa desde la II Guerra Mundial”

El presidente ruso ha asegurado que el fin de la hegemonía de Occidente está cerca.

Como cada año, el presidente ruso, Vladímir Putin, intervino ayer en el llamado Foro de Valdái, en referencia a la localidad rusa donde nació este Club Internacional de Discusión Política. Y, como en cada edición de este certamen politológico, volvió a no dejar títere con cabeza entre los países de Occidente, especialmente Estados Unidos, a quienes ha vuelto a acusar de todos los males habidos y por haber.

Esta vez, a causa de las sanciones adoptadas por la invasión de Ucrania, Putin ha hecho hincapié en los intentos de Occidente de “abolir” la cultura rusa. “Los nazis una vez llegaron a la quema de libros y ahora los guardianes occidentales del liberalismo y el progreso se han deslizado hasta la prohibición de las obras de Dostoyevski y Chaikovski (...) cuando los países occidentales abogaron siempre por una política de cultura universal”. Pero, según sus palabras, “la abolición de la cultura rusa afecta al desarrollo del libre pensamiento en la política, en la economía y en otras áreas”.

“La historia, por supuesto, pondrá todo en su lugar y cancelará no a los más grandes genios universalmente reconocidos de la cultura mundial, sino a aquellos que hoy por alguna razón decidieron que tienen el derecho de disponer de esta cultura mundial según su propia discreción”, afirmó Putin ante los asistentes al Foro de Valdái, que este año tiene lugar en Moscú.

Durante su discurso, el presidente ruso también dijo que los países occidentales “están imponiendo sus objetivos y estereotipos de consumo para aumentar el área del mercado para su propia producción, en su propio beneficio. Occidente está seguro de su infalibilidad (...) está a un paso del deseo de los infalibles de destruir a los que no les gustan, como dicen ellos, cancelándolos”, añadió.

A su juicio, “la ideología liberal en el mundo ha cambiado hasta hacerse irreconocible. Si el liberalismo clásico entendió la libertad de cada persona como la libertad de decir lo que quieras y hacer lo que quieras, en el siglo XX los liberales comenzaron a declarar que la llamada sociedad abierta tiene enemigos y la libertad de tales enemigos puede y debe ser limitada, cuando no cancelada”. 

Para el jefe del Kremlin en Occidente “han llegado al absurdo de que cualquier punto de vista alternativo es declarado propaganda subversiva y amenaza a la democracia”. Arremetió también contra quienes consideran que detrás de todo lo malo que pasa en el mundo están “las intrigas del Kremlin” y se pregunto si “¿somos realmente tan omnipotentes? Cualquier crítica a nuestros oponentes, cualquiera, se percibe como maquinaciones del Kremlin, la mano del Kremlin” y deploró que “no se puede culpar de todo al Kremlin. Niegan la soberanía de los países y los pueblos, su identidad y singularidad (...) Rusia no está desafiando a las élites de Occidente. Rusia simplemente está defendiendo su derecho a existir y desarrollarse libremente”.