Una fragata rusa del tipo Burevestnik se incendió ayer frente a la isla Zmeiny, en el Mar Negro, y algunas agencias locales ucranianas atribuyen el incidente al impacto de un misil lanzado por el Ejército de Ucrania. Este es por lo menos el tercer barco ruso atacado en la guerra, además de dos lanchas hundidas por drones días atrás. La mayor pérdida, fue el hundimiento de Moskva por parte de dos misiles Neptune, de fabricación ucraniana.
Según publica la agencia ucraniana Dumskaya, la fragata rusa sufrió una explosión seguida de un incendio en un incidente al parecer ocurrido este jueves, y que es atribuido al impacto de otro misil Neptune, lanzado por las fuerzas militares de Ucrania. La agencia señaló que aviones rusos sobrevuelan esta zona del Mar Negro y los barcos de rescate han acudido en ayuda de la embarcación de guerra incendiada desde la península de Crimea, ocupada por los rusos desde 2014.
También, un diputado ucraniano, Oleksiy Goncharenko, confirmó el incidente de la fragata en su canal de Telegram, en el que señala que “otro buque ruso de guerra recibió lo suficiente”. Los medios locales destacaron además que los datos actualizados del Estado Mayor ucraniano publicados este viernes especifican que los rusos perdieron otro barco. Según las fuentes, la fragata siniestrada está en servicio dentro de la Flota Rusa del Mar Negro y forma parte de la 30ª división de naves de superficie. Esa embarcación está equipada con sistemas de guerra electrónica, misiles de crucero Kalibr y misiles antibuque Oniks.
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