Corea del Norte busca disuadir cualquier movimiento militar estadounidense y esta semana mostró un gran misil balístico intercontinental para dar cuenta de su poder.
El país anglosajón respondió diciendo que presionaría al Consejo de Seguridad de la ONU para que “actualice y fortalezca” las sanciones contra Corea del Norte por sus “provocaciones cada vez más peligrosas”, una medida a la que probablemente se opondrán los aliados de Pyongyang, China y Rusia.
El lanzamiento del jueves fue la primera prueba completa de Icbm realizada por Corea del Norte con armas nucleares desde 2017. Los datos de vuelo indicaron que el misil voló más alto y durante un período más largo que cualquiera de las pruebas anteriores de Corea del Norte antes de estrellarse en el mar al oeste de Japón.
Lo que el país asiático llama el Hwasong-17 sería el misil de combustible líquido más grande jamás lanzado por cualquier país desde un lanzador móvil de carretera, dicen los analistas.
Su alcance y tamaño sugieren que planean inclinarlo con múltiples ojivas que podrían alcanzar varios objetivos o con señuelos para confundir las defensas antimisiles, dicen.
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