En medio de la crisis entre Rusia y Ucrania, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, llegó a Moscú para reunirse el miércoles con su colega Vladimir Putin, en una gira en la que busca obtener cierto barniz internacional para alimentar su campaña de cara a la reelección para los comicios del 2 de octubre.
Bolsonaro incluirá en su viaje una visita en Budapest a su gran aliado europeo, el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán (ultraderecha).
Aliado del expresidente estadounidense Donald Trump, el brasileño fue presionado por el Departamento de Estado norteamericano para cancelar el viaje, según admitió el vicepresidente Hamilton Mourao la semana pasada al diario económico Valor.
Ante las alertas de la "inminencia" de una invasión rusa a Ucrania lanzadas por Estados Unidos, Bolsonaro confirmó su viaje luego de que en 2020 fuera invitado a visitar Moscú por el propio Putin.
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