Bolsonaro rechazó las acusaciones sobre el caso de corrupción, ayer
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, rechazó ayer las acusaciones de cohecho que se lanzaron sobre su Gobierno en la compra de la vacuna desarrollada en la India contra el coronavirus y afirmó que no hace entrevistas ni responde a las preguntas de los “idiotas”.
“Para tristeza de unos pocos, el Gobierno está cumpliendo dos años y medio sin un solo cargo de corrupción. No tiene sentido inventar una vacuna, porque no hemos recibido ni una sola dosis de la que se está hablando en la prensa”, dijo en un acto en el municipio de Jucurutu, en el norte de Brasil, donde fue para supervisar las obras de una represa levantada en la región.
Bolsonaro, quien intercedió para acelerar la compra de millones de dosis de la vacuna Covaxin a través de una carta dirigida al primer ministro indio, Narendra Modi, habría recibido informes en enero y febrero que alertaban que se estarían cometiendo irregularidades.
Fue el legislador Luis Miranda, de Demócratas, aliados del Gobierno, quien le advirtió sobre el posible hecho de corrupción a fines de enero, y aún así el Poder Ejecutivo firmó un entendimiento por 1600 millones de reales (322 millones de dólares) con el laboratorio indio el 25 de febrero.