Un proyecto de ley de la eutanasia fue aprobado ayer por amplia mayoría en el Congreso de los Diputados de España que, de ser avalado por el Senado en enero, podría convertir al país hibérico en el sexto del mundo en regular la ayuda médica para morir.
Presentada por el gobernante partido socialista (Psoe), la ley contó con el respaldo de 198 diputados, frente a los 138 (Partido Popular y Vox) que votaron en contra, y 2 abstenciones.
La ley sería aprobada de forma definitiva a principios del año próximo y es considerada muy garantista y establece que solo podrán solicitar la eutanasia las personas que sufran una enfermedad grave e incurable o un padecimiento grave, crónico e imposibilitante.
Para poder acceder a la eutanasia, el paciente deberá pedirla hasta en cuatro ocasiones, dos de ellas por escrito, y en ningún caso la podrán solicitar la familia o el entorno de la persona enferma, indicó la agencia de noticias Ansa.
El proceso de la eutanasia, que se podrá realizar en el domicilio, en un centro sanitario y en una residencia de mayores, será supervisado por una comisión, y los profesionales de la salud tendrán derecho a la objeción de conciencia.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, defendió durante el debate que el 80% de la sociedad, según los últimos sondeos, apoya despenalizar esta práctica.
La eutanasia comenzó a ser objeto de debate en España en los años 90, cuando el tetrapléjico Ramón Sampedro intentaba sin éxito que le ayudaran a quitarse la vida.
MADRID
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